Iñaki Anasagasti, bere blogean
Hace un mes revisé un trabajo dedicado a Joseba Rezola, de Ordizia. Fue vicepresidente del gobierno Vasco en el exilio, entre otros muchos cargos todos ellos de entrega a los demás. La conferencia en la Fundación Sabino Arana el mes pasado me obligó a rescatar una carpeta con las cartas que me envió a Caracas los tres años en los que tuve relación con él. Rezola fue el alma de las dos Radios clandestinas que la resistencia al franquismo, una en Bayona y otra en Venezuela, puso en marcha con gran esfuerzo de equipos, presupuesto y riesgos. Su sensibilidad para la noticia, su gran capacidad para la acción política, su delicadeza en el trato de los diversos temas, el respeto al adversario y su gran ejemplo fue para mí una lección semanal por correspondencia sobre como quería él fuera una sociedad libre y con valores. Era la causa que vencía la sombra.
Rezola, junto a Lasarte, Lizaso, Arzelus, Urkola, Julene Urcelay y muchísimos más fueron dirigentes gipuzkoanos claves de aquella resistencia junto con Leizaola, de la que, quizás por ley de vida, pocos se acuerdan, aunque creo es obligación hacerlo para transmitir modelos de comportamiento político a una sociedad como la nuestra que anida conductas autoritarias y que incuba modelos muy sectarios de actuación. Cuando se deja de usar las armas no por una reflexión ética, sino por estrategia, pasan estas cosas que se van cronificando. De ahí la negatividad y la impaciencia por todo ante los nuevos retos que tenemos planteados, no siendo los menores la crisis económica y la bomba demográfica. Me preocupa este discurso demoledor que solo busca una sociedad crispada.
Transito pues como un viajero del tiempo por los momentos en los que todo era posible. Por lo tanto recordemos y comparemos. Al grano. J.M. Bastida pertenece a la siguiente generación de los nombrados. Encadenó seis mandatos en el ayuntamiento de Azpeitia, cuatro de ellos como alcalde de 1984 a 2003. Total, 24 años. Era el típico y clásico alcalde jelkide todoterreno del EAJ-PNV, una auténtica aspiradora para su pueblo. Conseguidor, insistente, ”harrapatari”, pelmazo hasta lograr las cosas. Con sus defectos y grandes virtudes pero sin que nadie pusiera en cuestión su ambición por una Azpeitia cohesionada, poderosa y con todos los servicios. De ahí que estoy seguro, no hubiera dudado medio segundo, en reactivar la fábrica de Corrugados en su pueblo.
Quizás por esa mentalidad de servicio, los de siempre, le quemaron su coche (que una suscripción popular le restituyó), a cuenta de vertedero de Lapatz en Azpeitia en donde el 3 de diciembre de 2008 asesinaron a Inaxio Uria cuando jugaba a cartas con sus amigos. Debatida la monstruosidad en el ayuntamiento ANV se negó a condenar el hecho saliendo del equipo de gobierno EA y Aralar por no aprobar la moción de rechazo y condena del asesinato. La misma palabra condena que 13 años después la IA sigue sin pronunciar. Acciones que al parecer dejaron huella en una mentalidad sectaria y dogmática que sigue coleteando. A Bastida veinte encapuchados le hostigaron en la calle estando con su familia, sin que nos olvidemos del secuestro del empresario Guibert y otros atentados. Sortu, heredero de este horror, y mandando en el ayuntamiento quiere nos olvidemos de él, pero sin cambiar ellos de conducta.
No ha sido pues fácil ser regidor en Azpeitia por lo que personalmente me pareció incomprensible una manifestación de apoyo a la actual alcaldesa de Bildu por el gran mérito de impedir una inversión, creadora de puestos de trabajo, en un valle necesitado de ellos. Me imagino que la buena Sra. llamaría al Soviet sobre lo que debía hacer y le dirían que se agarrase a lo que decían los Fariseos sobre el Sabath. ”El hombre está hecho para el Sábado y no el Sábado para el Hombre”. La letra muerta de unas normas aprobadas, pero con posibilidades de adaptación, antes que una inversión que quizás podría visualizar una apuesta del Gobierno Vasco y la Diputación por dar vida a la comarca.
”No es no y ¿qué parte del no es el que no entiendes?” dijo urbi et orbi Nagore Alkorta sentada en su trono de marquesa de Loiola, sin buscar ninguna solución, riéndose de un informe que consideró cuatro papeluchos y obviando todo lo demás. Me imagino la perplejidad de Bastida viendo a la alcaldesa llorando en la plaza, recibiendo el apoyo de Bildu por la gran hazaña de no hacer nada, más que impedir que otros hagan algo con el agravante de que al día siguiente en la Ordizia natal de Rezola se repitiese la misma escena pero esta vez con Otegi comparando “las mentiras del PNV con las mentiras de Trump y Ayuso”. Típica boutade para que nos olvidemos que aquí quienes han felicitado a Trump cuando ganó las elecciones fue Bildu. Si la política es diferenciación y con semejante pasado de falta de valores ¿cómo es posible que nadie sensato de ese mundo no se dé cuenta que el programa de la IA es el NO?. No al Puerto, no al Metro, No a la Incineradora, No a Corrugados, No al TGV, No a Leitzaran, No a condenar el atentado de Inaxio Uria y el secuestro de Guibert. No ahora contra Hondalea como estuvieron contra el Guggenheim. No a todo. Magnífico su programa industrial, de convivencia y de creación de empleo.
El domingo pasado, nos recordaron la muerte de Txabi Etxebarrieta poniendo pringando al ayuntamiento de Bilbao. Se ve que la IA busca la legitimidad en un pasado antifranquista huyendo de su responsabilidad en tiempos de construcción democrática. Se ve claramente también que están en crisis y la proyectan en los demás ya que en su obsesión antijelkide llegan incluso a coincidir nada menos que con el PP con quien votan hasta por un puñado de pipas. Borja Corominas, el portavoz del PP en el ayuntamiento donostiarra nos ha dicho que “esta pandemia ha desnudado las carencias del PNV y ha tumbado el mito de su capacidad de gestión”. Ese mismo día, Arnaldo Otegi nos sermoneaba muy enfadado diciendo enfático que “existe un modelo de gestión que se está agrietando y de ahí que la impronta de gran gestor de la que ha hecho gala el PNV durante años se está cayendo”.
Curiosamente ese día la noticia era, para berrinche de ELA y LAB, junto a Sortu, que Euzkadi obtiene la puntuación más alta del estado en el índice de desarrollo de los servicios sociales, el llamado índice DEC. Y para más INRI, el Sociómetro vasco indicaba que a pesar de la pandemia, el gobierno de coalición no acusaba desgaste alguno y el PNV y el PSE conservaban sus resultados de hacía un año. Demasiado para su “body”. De ahí su frustración, su negatividad, su exageración, su no saber actuar en democracia, su cabreo perpetuo, su insólita actitud en Azpeitia, su fijación con Zaldibar y con la Consejera Sagardui.
Y es que algo que no soportan es que el EAJ-PNV haya hecho avanzar más lo social que ellos con sus pancartas, sus piquetes, sus manifestaciones por cualquier cosa, su puño en alto y sus primaveras rojas. A pesar de ellos tenemos la RGI, el Concierto, Osakidetza, presupuestos y una esperanza de salir adelante que sus recetas mágicas insolventes que solo demuestran que allí donde se aplican ocasionan miseria, emigración y desesperanza. El cuanto peor, mejor, no es plato de gusto para nadie salvo para la burbuja en la que viven. Podrán ser toda alternativa de gobierno que digan y quieran pero si a su mensaje se le quita la ikurriña quedan en lo que son y que en un alarde de sinceridad lo describieron en su día presentándose como el “Partido Comunista de las Tierras Vascas” y coloquialmente “el partido hipercabreado y negativo de las tierras vascas”.
No deja de ser una lástima que no sepan ver la realidad, no hayan aprendido criticar lo criticable, presentar alternativas argumentadas y aprender a hacer oposición. Vienen de un inmenso fracaso y al parecer lo quieren seguir perpetuando creyendo que aplicando la doctrina de Goebbels aquella de que repitiendo una mentira cientos de veces se convierte en una verdad, la sociedad que es tonta y no tiene elementos de comparación, les va a creer de forma mayoritaria y cualquier partido serio va a querer bailar en su pista embarrada no terminando de aprender que solo aciertan cuando rectifican. Allá ellos. Las cosas solo dejan de existir cuando se deja de creer en ellas. Y estos Comisarios solo creen en la revolución bolivariana. Lo ocurrido en Azpeitia es una magnífica muestra.
Anasagasti …….para qué adjetivarle ¡¡¡
Después de que EH Bildu le instara a ello, tras subrayar al igual que los sindicatos ELA y LAB que no existe plan industrial real ni realizable para Corrugados Azpeitia, el PNV ha decidido colgar este viernes en internet los documentos de este conflicto. Lo ha planteado como ejercicio de «transparencia» para la ciudadanía, aunque lo cierto es que los papeles en cuestión confirman la tesis del Ayuntamiento de Azpeitia, tanto sobre la fiabilidad del proyecto como sobre la imposibilidad de materializarlo en el centro de la localidad.
El llamado «plan» del grupo CL es en realidad una especie de folleto de doce páginas, de las que seis son portadas o imágenes. En las otras seis hay algunos párrafos de explicaciones muy genéricas y esquemáticas, que si se pusieran en un formato estándar no ocuparían más de dos folios. Todo ello se presenta como ‘Hipótesis de reapertura de la planta’.
Llama la atención que en el documento, quizás por su brevedad, no se haga alusión alguna a la imposibilidad de actividad industrial en ese área urbana. Ello se intenta solventar aparentemente con un escrito posterior dirigido a la alcaldesa, Nagore Alkorta, en el que se señala que el bufete de abogados Cuatrecasas ve posible superar esa situación.
Secretaria municipal: «Debe denegarse»
El segundo documento relevante de este paquete es el informe firmado por la secretaria municipal sobre la legalidad o no de ese eventual reinicio de actividad. Tras un análisis exhaustivo del marco legal a lo largo de 16 páginas, concluye lo siguiente: «Debe denegarse por razones basadas en su incompatibilidad con el planeamiento urbanístico-PGOU en este supuesto la reanudación de cualquier actividad en el ámbito de AMUE».
JELen agur
Bueno. Solo la oposición al PNV, en especial los mas aulladores, opina que la gestión hace aguas por todas partes.
Pero el resto del mundo, Europa y la sociedad vasca, confía en la gestión del PNV sobre todo.
Máxime cuando se ha realizado con enormes, yo diría incomparables, dificultades, como fue la puesta en marcha de un gobierno vacío que había que dotarlo de competencias en medio de un estado franquista en su estructura muy receloso, en medio de una crisis económica estructural sin igual que obligó a hacer una replanteamiento de la economía vasca casi desde los cimientos y con un terrorismo frenético que, lejos de ser antifranquista, era anti-institucional vasco, pro dictadura castrista. Y lo sigue siendo.
Pues en este entorno tan desfavorable, sin igual, hemos llegado donde hemos llegado. Con éxitos y con fracasos como es inevitable para quien asume riesgos.
Pero seguimos con la misma ambición que en el 78.
Los demás, renunciando a todo tipo de estrategias para acomodarse a la modernidad y lo que aún les queda, no pueden atribuirse ni un solo mérito. Que ya es decir poco.
Al contrario. Siguen disfrutando generando crispación y frustración como la alcaldesa de Azpeitia que se acoge a una ley de su ayuntamiento (es decir, que lo pueden adaptar ella misma y la corporación) sin el más mínimo esfuerzo por valorar la posibilidad de recuperar la industria que le tiende la mano. Y va y la muerde. Como buen perro de presa. Y el resto de la cuadrilla a meter ruido para despistar.
Pero no nos despistamos.
Tendrá que dar explicaciones no solo por el no, que lo conocíamos, sino tambien por el ‘no había otra opción’. Si no hubiera otra, ya lo habrían explicado, no me cabe la menor duda.
No la había? Seguro?
Llevamos semanas leyendo este tema. En Euskadi hay un grupo de consultoras que son amigas del PNV y por eso les caen contratos a dedo.
Hemos pedido que se investigue y nos han dicho que NO.
¿Son amigotes, no?
( Miren Gorrotxategi )
Aitor Soloeta, jefe de Actuaciones Inspectoras de Hacienda de Bizkaia hasta 2015 y director de Hacienda de Bizkaia hasta que en 2019 pasó a ser socio de PwC, después de ser fichado por la consultora el exburukide Asier Atutxa, fue asesor fiscal de Cuatrecasas entre 1989 y 1994.
Cautrecasas y otras empresas vinculadas a tramas de corrupción del PP están vinculadas a la incineradora de Zubieta.
KFD , No te escondas….
Finalmente parece que Corrugados no está interesada en abrir una factoría en Azpeitia, donde la cerró en 2013. Era evidente y, sin embargo, desde el Gobierno de Gasteiz y la Diputación de Gipuzkoa se han generado falsas esperanzas. Sabían que la antigua factoría no se podía reabrir legalmente, pero han dado a entender que ellos, por el empleo, harían cualquier cosa. No lo mejor ni lo imposible, no, sino cualquier cosa. Es feo difundir esa mentalidad. Siempre está mal, pero en estos tiempos tan revueltos es muy irresponsable.
Según ese guión, si salía algo positivo de esta operación, el éxito sería de Lakua y la Diputación de Gipuzkoa, que promueven la industria, mientras que, si algo fallaba, la culpa caería sobre el Ayuntamiento de Azpeitia y su alcaldesa, Nagore Alkorta, que en el mejor de los casos favorecen el medioambiente ante todo. La maniobra ha sido muy burda, pero se ha invertido mucho en ella. Algunos cargos se han jugado su credibilidad y, en cierta medida, esta se ha visto dañada.
Al final de la polémica, basta con mirar los intereses de cada parte para ver qué había detrás. ¿Qué razón tendría una alcaldesa para ir contra el pueblo? En todas sus intervenciones, Alkorta ha explicado claramente que no había un propuesta firme; que, si la empresa la hacía, ella no podía bloquearla sin prevaricar; que se comprometía a tramitar la propuesta en cuanto se presentase y a darle curso si era legal; que también dependía del informe medioambiental y que este correspondía a quienes estaban metiendo presión mediático. Y, por supuesto, ha sostenido que qué más querría ella que poder ayudar a crear empleo en Azpeitia. Pero que no había una propuesta firme, ni mucho menos, tal y como se ha demostrado.
Fuentes jeltzales han señalado que la razón de que Corrugados no abra en Azpeitia es que EH Bildu apuesta por un desarrollo inmobiliario y está ideológicamente en contra del desarrollo industrial. Son los mismos que acto seguido les acusan de obreristas y sindicalistas. Alguno piensa que la gente es imbécil.
Precisamente por eso, no tengo claro el resultado de esta maniobra. Porque pienso que la gente, en general, no es imbécil. Supongo que mucha gente no conocía a Nagore Alkorta y habrán descubierto una política competente y articulada, muy por encima de la media. Creo que transmite esa impresión. Claro está, hablo de personas que no sean militantes ni del PNV ni de EH Bildu. En este sentido, pienso que quienes tuviesen prejuicios los habrán descartado y quienes tuviesen juicios los habrán confirmado.
El único escenario en el que veo una ganancia para el PNV es en provocar un bajón general en el nivel del debate, una tendencia peligrosa que se ve en algunas de sus políticas y declaraciones.
Si bien –además de la mencionada majadería– nadie es capaz de explicar por qué Alkorta querría sabotear la apertura de una fábrica en Azpeitia, las razones de la otra parte para desprestigiar a la alcaldesa son evidentes. Querían laminarla, en un pueblo que ha sido patrimonio suyo durante décadas y donde EH Bildu gobierna ahora con mayoría absoluta. Se trata de minar la imagen de los representantes de la formación soberanista para rebajar su figura hasta que case con los prejuicios, no con los hechos: Corrugados no iba a abrir esa fábrica. [Si bien las razones de EH Bildu y PNV son evidentes, la de Corrugados no está clara. Es lo que mete algo de ruido y misterio a esta maniobra].
Esta postura del PNV en Gipuzkoa es muy llamativa teniendo en cuenta la sociología del herrialde. Desde el punto de vista político, resulta triste ver a Arantxa Tapia y a Jabier Larrañaga protagonizando episodios como este.
Aun siendo esto así, creo que sería un error ceder al impulso reaccionario, a dejarse llevar por la inercia de esta deslealtad institucional y una política de tan bajo nivel. Alguien tiene que tener altura de miras en el país y quien gobierna no parece capaz en este momento.
Entre otras cuestiones, las opciones de acuerdos en Gipuzkoa son mucho más grandes de las que se quieren reflejar con episodios así. Quizás ese sea el verdadero problema. O parte de la solución.
El líder de Cuatrecasas evitó la cárcel tras ser condenado por ocho delitos fiscales en 2015 y fichó a la exvicepresidenta del Gobierno español Soraya Sáenz de Santamaría en 2019.
Meses más tarde, el líder de Cuatrecasas fichó al lehendakari para frenar el Procés catalán.
Finalmente parece que Corrugados no está interesada en abrir una factoría en Azpeitia, donde la cerró en 2013. Era evidente y, sin embargo, desde el Gobierno de Gasteiz y la Diputación de Gipuzkoa se han generado falsas esperanzas. Sabían que la antigua factoría no se podía reabrir legalmente, pero han dado a entender que ellos, por el empleo, harían cualquier cosa. No lo mejor ni lo imposible, no, sino cualquier cosa. Es feo difundir esa mentalidad. Siempre está mal, pero en estos tiempos tan revueltos es muy irresponsable.
Según ese guión, si salía algo positivo de esta operación, el éxito sería de Lakua y la Diputación de Gipuzkoa, que promueven la industria, mientras que, si algo fallaba, la culpa caería sobre el Ayuntamiento de Azpeitia y su alcaldesa, Nagore Alkorta, que en el mejor de los casos favorecen el medioambiente ante todo. La maniobra ha sido muy burda, pero se ha invertido mucho en ella. Algunos cargos se han jugado su credibilidad y, en cierta medida, esta se ha visto dañada.
Al final de la polémica, basta con mirar los intereses de cada parte para ver qué había detrás. ¿Qué razón tendría una alcaldesa para ir contra el pueblo? En todas sus intervenciones, Alkorta ha explicado claramente que no había un propuesta firme; que, si la empresa la hacía, ella no podía bloquearla sin prevaricar; que se comprometía a tramitar la propuesta en cuanto se presentase y a darle curso si era legal; que también dependía del informe medioambiental y que este correspondía a quienes estaban metiendo presión mediático. Y, por supuesto, ha sostenido que qué más querría ella que poder ayudar a crear empleo en Azpeitia. Pero que no había una propuesta firme, ni mucho menos, tal y como se ha demostrado.
Fuentes jeltzales han señalado que la razón de que Corrugados no abra en Azpeitia es que EH Bildu apuesta por un desarrollo inmobiliario y está ideológicamente en contra del desarrollo industrial. Son los mismos que acto seguido les acusan de obreristas y sindicalistas. Alguno piensa que la gente es imbécil.
Precisamente por eso, no tengo claro el resultado de esta maniobra. Porque pienso que la gente, en general, no es imbécil. Supongo que mucha gente no conocía a Nagore Alkorta y habrán descubierto una política competente y articulada, muy por encima de la media. Creo que transmite esa impresión. Claro está, hablo de personas que no sean militantes ni del PNV ni de EH Bildu. En este sentido, pienso que quienes tuviesen prejuicios los habrán descartado y quienes tuviesen juicios los habrán confirmado.
El único escenario en el que veo una ganancia para el PNV es en provocar un bajón general en el nivel del debate, una tendencia peligrosa que se ve en algunas de sus políticas y declaraciones.
Si bien –además de la mencionada majadería– nadie es capaz de explicar por qué Alkorta querría sabotear la apertura de una fábrica en Azpeitia, las razones de la otra parte para desprestigiar a la alcaldesa son evidentes. Querían laminarla, en un pueblo que ha sido patrimonio suyo durante décadas y donde EH Bildu gobierna ahora con mayoría absoluta. Se trata de minar la imagen de los representantes de la formación soberanista para rebajar su figura hasta que case con los prejuicios, no con los hechos: Corrugados no iba a abrir esa fábrica. [Si bien las razones de EH Bildu y PNV son evidentes, la de Corrugados no está clara. Es lo que mete algo de ruido y misterio a esta maniobra].
Esta postura del PNV en Gipuzkoa es muy llamativa teniendo en cuenta la sociología del herrialde. Desde el punto de vista político, resulta triste ver a Arantxa Tapia y a Jabier Larrañaga protagonizando episodios como este.
Aun siendo esto así, creo que sería un error ceder al impulso reaccionario, a dejarse llevar por la inercia de esta deslealtad institucional y una política de tan bajo nivel. Alguien tiene que tener altura de miras en el país y quien gobierna no parece capaz en este momento.
Entre otras cuestiones, las opciones de acuerdos en Gipuzkoa son mucho más grandes de las que se quieren reflejar con episodios así. Quizás ese sea el verdadero problema. O parte de la solución.
PNV y PSE aplican su rodillo para que no se investigue la «connivencia» pública en los contratos con las consultoras
Los socios en el Gobierno de Urkullu tumban la propuesta de toda la oposición para que un ente externo analizara el centenar de adjudicaciones irregulares confirmadas por la CNMC
El consejero Pedro Azpiazu junto al alcalde de Vitoria y presidente de Eudel Gorka Urtaran durante su comparecencia en la sede del Gobierno vasco en Lakua.
PNV y PSE-EE quieren bloquear el debate político sobre la trama de las consultoras vascas se repartieron durante una década informes de la admnistración. Los dos socios del Gobierno de Urkullu han impuesto su mayoría parlamentaria contra la primera iniciativa conjunta de toda la oposición con la que se pretendía que un ente «ajeno e independiente» analizara la posible «connivencia» de la administración para facilitar el centenar de contratos menores irregulares contrastados por la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC). Adjudicaciones logradas por un cártel de consultoras lideradas por empresas afines al PNV que han llegado a definir hasta el plan estratégico de la Autoridad Vasca de la Competencia, la entidad encargada de investigarlas.
PP+C’s, Elkarrekin Podemos, EH Bildu y Vox han sumado sus votos para reclamar que el Gobierno vasco investigue el alcance de la trama de las consultoras y demande a estas empresas para que compensen las pérdidas sufridas por las administraciones vascas. Una iniciativa impulsada por el parlamentario Luis Gordillo (C’s) que finalmente no ha salido adelante pero ha dejado en una incómoda posición al PNV y, especialmente, al PSE-EE, socio de los nacionalistas en las administraciones vascas. La resolución de la CNMC que culmina una investigación iniciada en 2016 señala a un núcleo de tres empresas (Deloitte, 97S&F y BMASI) en el reparto de informes encargados por las administraciones a través de contratos menores y sin publicidad. La investigación iniciada por la Autoridad Vasca de la Competencia (AVC) incluye correos electrónicos cruzados entre estas tres consultoras fechados antes de que se activaran los procesos de contratación discretos.
«El sistema de contratación público en Euskadi está en entredicho por estos gravísimos hechos», ha advertido Luis Gordillo, junto a David Soto (Elkarrekin Podemos) proponentes de esta iniciativa parlamentaria consesuada. Gordillo, Soto, Josu Estarrona (EH Bildu) y Amaia Martínez (Vox) han coincidido con distintos argumentos y tonos en reclamar al Gobierno de Urkullu que impulse una investigación para aclarar los «indicios» de la «connivencia» entre la administración vasca y el cártel de las consultoras en Euskadi. Un sistema fraudulento de contratación no detectado ni por los órganos internos de la administración ni por el Tribunal Vasco de Cuentas, como ha denunciado Estarrona. Y las consecuencias directas son las «decenas de millones», según Soto, abonadas con dinero público por la administración a proveedores fijos que se hacían con los contratos tras amañarlos con sus presuntas competidoras.
Todos los portavoces de la oposición han destacado que el epicentro del cártel detectado por la CNMC se encuentra en Euskadi y señalado al PNV por la «red clientelar» en estos contratos de consultoras como ejemplo del control que ejerce en la contratación pública vasca. Los partidos de la oposición han advertido de que las prácticas fraudulentas se extendieron durante 10 años y las mismas consultoras siguen trabajando para la administración vasca. Una práctica que continúa con llamativos casos como la adjudicación directa a PWC del primer listado de proyectos presentados para obtener la financiación europea del Mecanismo para la Recuperación y la Resiliencia (MRR). El máximo responsable de PWC en Euskadi es Asier Atutxa y PWC forma parte de las consultoras señaladas y sancionadas por la CNMC por el reparto de los informes públicos.
Estarrona ha ido más allá al denunciar el control que ejerce el PNV de órganos de control de la administración como la AVC o el Tribunal de Cuentas donde los nacionalistas han colocado a ex cargos como Anton Bikandi o José Luis Bilbao. Una estructura creada por el actual consejero de Economía y Hacienda Pedro Azpiazu que fue quien designó a Alba Urresola como presidenta de la Autoridad Vasca de la Competencia tras el trabajo realizado por Pilar Canedo.
Las portavoces del PNV y del PSE-EE, Itxaso Berrojalbiz y Sonia Pérez, han rechazado la investigación y el inicio de acciones judiciales contra las consultoras con mensajes y tonos diferentes. Pérez ha pretendido negar que la CNMC haya detectado cualquier tipo de connivencia entre la administración y las consultoras. Berrojalbiz ha elevado el tono cargando contra toda la oposición a la que acusado de «demagogia, mentiras, falacias» y ha calificado de «vergonzosas» las acusaciones contra el PNV utilizadas por el resto de portavoces. «Venceréis pero no habéis convencido», le ha reprochado Gordillo a la parlamentaria nacionalista en el cierre del debate parlamentario que abre la investigación iniciada en Euskadi para aclarar el fraude de los contratos de las admnistraciones con las consultoras.
País Vasco Podemos desvela que Alba Urresola encargó a Sabin Azua las «líneas de acción» de la Competencia vasca
País VascoLas dos principales consultoras del cartel vasco ‘compitieron’ por un estudio de la SPRI de 105.000 euros
País VascoPP+C’s pretenden que el Gobierno vasco demande al cártel de las consultoras y no sea su «abogado defensor»
Fue dual la ofensiva de guerra popular declarada por el MLNV hace ya más de 60 años:
1.- ofensiva anti franquista para vender su apariencia de liberadores …
2.- necesaria esa ofensiva para calentar motores hacia la máxima ofensiva que consistía y consiste en atacar política y militarmente (kale borroka con especial virulencia coordinada en contra de la policía municipal y ertzaina) a las instituciones vascas soberanas, democráticamente elegidas.
Hoy, el MLNV no secuestra, no asesina, no tortura porque no puede …
El despilfarrador tren de «nunca jamás»…se infiltra en el oasis…
Anasagasti , Kfd , Irala etc..le marcan el vamino…
Aburto: «El plan B de Arriola para la llegada del TAV a Bilbao es absolutamente inaceptable»
El alcalde asegura que rechazará cualquier propuesta que no sea que el tren de alta velocidad llegue soterrado
JELen agur
Bueno, si al final Corrugados no se instala en Azpeitia, es porque la alcaldesa no ha posibilitado tal opción. La decisión final la toma la empresa, como el lógico. Es la que se juega su dinero. Y se lleva su producción a sus otras plantas. Corrugados lo ha intentado y se ha comprometido con sus criterios.
Pero lo que faltan son explicaciones. ¿Ha hecho la alcaldesa todo lo que está en su mano para posibilitarlo? Es lo que hay que analizar. Y no satisfacen ni una frase repetida mil veces ni un copia-pega. Es un tema lo suficientemente serio como para pedir un esfuerzo a su señoría. Si no se puede, pues no se puede. Lo que está claro es que no se quiere.
Porque lo que se está analizando es si la actitud de ciertos partidos es realmente promover el esfuerzo y el trabajo en lugar del desanimo y la crispación.
ETA no fue nunca antifranquista. Era anti-todo lo que no fuera desarrollo de revolución socialista, lo que no fuera castrismo. El franquismo ya languidecía cuando Etxebarrieta se lió a pegar tiros. La democracia era inevitable y lo sabían.
Noticia sobre el aniversario de la fundación de Bilbao. Sale Aburto haciendo declaraciones con un notorio sonido de bocinas y sirenas, sin duda una protesta de trabajadores. Enfoque cerrado a Aburto para que no aparezca la protesta en imagen. Un día más de censura en Teleberri.
Cargas y golpes, método habitual
La concentración de ELA se ha celebrado un día después de que la Policía autonómica cargara, una vez más, contra trabajadores en huelga, en este caso los de Petronor. Durante los últimos meses, ha sido habitual ver a la Ertzaintza actuar violentamente contra piquetes y manifestaciones, como en la concentración de los trabajadores de Tubacex ante el Parlamento de Gasteiz, la huelga de PCB en Barakaldo –que terminó con un representante de CCOO con la nariz rota– o la convocatoria de Ernai contra la precariedad juvenil en Bilbo, que se saldó con dos participantes hospitalizados.
Es necesario que Teleberri/Pnv nos enchufe casi todos los días las opiniones del PP y Vox(irrelevantes en nuestro país)sobre los indultos a los presos políticos de Catalunya ?
O hay un objetivo político para hacerlo?
Y por lo tanto no hay interés informativo y si partidista.
Ojo!
JELen agur
¿De verdad serán trabajadores? ¿Irán como trabajadores o como peleles de sindicalistas?
Porque la mayoría de los trabajadores prefiere el gobierno actual.
Los demas montarán saraos para consumo interno, agitación y propaganda.
Piquetes que, aunque legales, transgreden la ley cuando saltan cordones, destruyen patrimonio vasco, apedrean a la policia, intimidan a otros trabajadores, etc, ejerciendo actividades ilegales dentro de una convocatoria legal.
La policia, como es habitual, aguanta al maximo, hasta que la situación se vuelve insostenible y no tienen otra opción que cargar contra los delincuentes y macarras disfrazados de trabajadores.
No me siento representado por esa bazofia.
Hoy, el asunto del proces y los indultos es noticia continuada. El ocultamiento de noticias relevantes, actuales, es propio de republicas bananeras castrochavistas.
Ya hablaremos mas adelante de todo esto….Ojo!