Jon Elgezabal, Tomás Abendaño
Hace unos cuantos días, un líder social que responde al seudónimo de Kolitza, decía en su twiter que “valen más dos mil o tres mil jóvenes militantes comunistas, ‘militantes estratégicos’, bien organizados, disciplinados y con una base ideológica y crítica bien fundamentada, que grandes movilizaciones de masas sin objetivo alguno y desprovistas de todo contenido comunista”. Kolitza no se refiere a un futurible o un grupo por crear ni a unas movilizaciones inexistentes sino trata de una realidad efectiva, con miles de jóvenes, la que representa Gazte Koordinadora Sozialista, que dispone de su propio blog-red de blogs y amplia presencia en las Gazte Asanbladak y gaztetxes de toda Euskal Herria así como con un protagonismo esencial en los últimos actos de la así llamada “mozkorra-kale-borroka”.
Kolitza fue protagonista de un famoso debate en Zumaia en noviembre de 2016 con un representante de Sortu, Eneko Compains, antiguo miembro de EKIN, actual profesor de la UPV, al cual acudieron cientos de jóvenes. ¿Qué se trató en aquel debate? Cada cual pretendió mostrar a la numerosa platea que era más leninista que nadie: Compains propugnando que la toma del Estado, o, en este caso, la toma del poder institucional, era el camino que Lenin bendijo para la revolución. Kolitza reprochando a Sortu su falta de fuste y planteando que el movimiento de los Gaztetxes era un intento de crear, desde el segmento juvenil, “el partido del proletariado” que, mediante la lucha de masas, generaba “espacios de poder socialista”.
Varios años más tarde, estas dos vías (la de Kolitza-GKS-lucha de masas y la de Compains-Sortu-Bildu-lucha institucional) siguen empeñadas en sus dinámicas paralelas que, como dimos a entender en nuestro artículo anterior, han convergido en el tema de la gestión de la pandemia y el papel de la Ertzaintza dentro de la misma. Para ello, el conjunto de la izquierda aberzale ha pretendido instrumentalizar esta coyuntura con la intención de generar el síndrome de una represión generalizada. Así, la becada de Emakunde, profesora de la UPV, Jule Goikoetxea, afirma que “estamos entrando en una fase represiva feroz y pre-dictatorial. Recordemos, lo que mas teme el poder, el estado y el capital es el odio organizado y politizado a la dominación”. Mientras ella, desde la seguridad de su despacho funcionarial, describe la situación en esos términos, “el odio organizado” de GKS se pone las pilas.
GKS y la gestión del odio organizado
A finales de octubre del pasado año GKS realizaba un anuncio de movilizaciones a través de las redes sociales, consistentes en concentraciones “en protesta por la situación de excepcionalidad” frente a sedes de PSE/PSOE y EAJ-PNV. El lema utilizado fue “Burgesiaren zuzeneko diktadura gelditu” (Parad la dictadura directa de la burguesía). Todas ellas trascurrían sin incidentes y cumpliendo las normas de distanciamiento, con una puesta en escena, dicho sea de paso, que recordaba las apariciones del equipo olímpico de la extinta URSS. Este ciclo de movilizaciones, frente a los partidos considerados culpables de la opresión, ha de ser considerado como la presentación en sociedad de la Gazte Koordinadora Sozialista. Hasta el momento, además de su primera aparición pública, habían realizado actos de carácter interno, de consumo propio. O presentaciones de sus diferentes ramas sectoriales (enseñanza, redes de autodefensa proletaria, ITAIA) que no tenían impacto social alguno, más allá que su reflejo en su medio de comunicación (Gedar) y en redes sociales.
Lo interesante de la cuestión es que, mientras las movilizaciones en público se desarrollaban dentro de lo marcado por la ley, con nocturnidad y alevosía la militancia de este movimiento emergente se dedicaba a sabotear sedes de los partidos políticos señalados. Y además con desparpajo, puesto que los lemas utilizados para redecorar las citadas sedes no se diferenciaban mucho de los usados en las convocatorias públicas, como se puede apreciar en las fotografías publicadas por diversos medios.
Toda una demostración de las intenciones que tiene GKS, que comienza su andadura “política” dando pasos que superan de largo la acción política estandard, como no puede ser de otra manera por tratarse de un movimiento revolucionario. En apenas dos semanas, la Gazte Koordinadora Sozialista pasaba del señalamiento de responsabilidades al sabotaje directo contra los agentes señalados. No hace falta decir que no se trata de un movimiento creado ex novo. Recogen la tradición activista madurada en el seno del MLNV durante décadas y no van a perder demasiado el tiempo en poner en práctica (atacar) aquellos agentes considerados como enemigo en cada sector.
Y a pesar del descaro en las pintadas realizadas, al parecer nadie ha reparado en la paternidad de las mismas. Ni los medios de comunicación, ni los partidos políticos y, por lo conocido, tampoco la Ertzaintza, encargada de velar por la seguridad pública en Euskadi. Y esta impunidad no hace sino reforzar la natural determinación de un movimiento revolucionario a ir consolidando espacios de activismo. Que quizás ahora puedan parecer nimios, si se comparan con los años de plomo y fuego padecidos durante décadas. Pero la permisividad ante estas acciones “nimias” es la condición para que se den saltos cualitativos tanto en los medios empleados como en la extensión de las tácticas de sabotaje a otros colectivos.
GKS y la formación-entrenamiento en el odio organizado
Hay que tener muy en cuenta que en el momento actual en el seno de la Gazte Koordinadora se está produciendo un ciclo de formación sobre las “fuerzas policiales” . Aquí emerge con claridad el que, a buen seguro, vaya a ser un objetivo viable para el nuevo movimiento revolucionario. Y decimos viable en cuanto a digerible, tanto para su propia militancia como para los compañeros revolucionarios del “oficialismo”. Un objetivo señalado, que además está entrando al “choque” identificando a los militantes de GKS que, saltándose todas las restricciones inherentes al Estado de Alarma, vienen reuniéndose en gaztetxes a lo largo de toda la geografía de Euskadi para llevar a cabo la citada formación.
Dicho lo anterior y atendiendo a los precedentes la pregunta es la siguiente ¿de que manera puede avanzar GKS en el hostigamiento a la Ertzaintza?. Nos inclinamos a pensar que, a pesar de la celeridad observada en cuanto al señalamiento-ataque a las sedes de partidos políticos, en el caso de la Ertzaintza quizás traten de reproducir el esquema seguido por las redes de Autodefensa Proletaria (Langile Autodefentsarako Sareak).
Aquí podemos apreciar como dicha Red de Autodefensa Proletaria se dedica a fiscalizar e intervenir en la lucha laboral de una taberna de la Parte Vieja de Bilbao, en la empresa de limpieza Arana-Aguilar, así como pide el boicot contra la cafetería Jardin Secreto de Deusto. GKS diversifica las labores de sus militantes con la vocación de convertirlos en aparatos coactivos-represivos. Recordemos las tabernas, tiendas, empresas que no pagaban impuesto revolucionario o tasa de presos o no hacían caso de los delegados sindicales de la izquierda abertzale: sujetos a amenaza también lo eran de la represión.
Este esquema de señalamiento en lo concreto también esta siendo puesto en práctica en el ámbito de las enseñanzas medias, y según lo publicado por Gedar, con pequeñas victorias en diferentes centros educativos en los que los “estudiantes” han conseguido doblegar al sistema. Pequeñas batallas y un cúmulo de pequeñas victorias que son la mejor pedagogía revolucionaria.
Así, en la cuestión de la Ertzaintza serían de esperar también tácticas de hostigamiento similares. Señalar que el MLNV pasó a presionar al colectivo de ertzainas en el ámbito privado tras haberles atacado y hostigado en el ámbito laboral. Pues bien, las huestes de GKS no tienen necesidad de recorrer ese camino, lo que posibilita desde ya una línea de acoso en lo concreto, en lo privado: pintadas en portales, en puertas de domicilios de agentes de la ertzaintza, sabotajes de baja intensidad a sus vehículos, etc. Incluso muchos de ellos pueden no ser reivindicados o efectuados bajo el acrónimo ACAB (All Cops Are Bastards) por ejemplo.
Junto con lo anterior, en las ocasiones en las que se den unidades de acción (huelgas generales, huelga estudiantiles, etc.), sí se podrían desplegar tácticas de guerrilla urbana más contundentes, con el uso de medios más destructivos. La aparición de cohetes y tornillos en las espontáneas manifestaciones de mozkorra borroka de la parte vieja de Donostia señalan, en cierta medida, el camino. Un camino en constante evolución en cuanto a formas ritmos y que, según parece, ha podido encontrar a la Ertzaintza y a su dirección política con el paso cambiado.
https://gedar.eus/aktualitatea/biolentziaestrukturala/espainiako-poliziak-komisariara-deklaratzera-eraman-ditu-bilboko-laseko-lau-kide-2020/
Pues parece que los disciplinadores de GKS no se van a ir de rositas. Manda narices que sea la policía Nacional la que se tenga que encargar del asunto…
https://www.elnacional.cat/es/politica/incidentes-saqueos-tiendas-barcelona_585297_102.html
Quinta noche de incidentes y tensión en Barcelona y el resto de Catalunya por el encarcelamiento de Pablo Hasél. Unas 6.000 personas, según la Guardia Urbana, se han concentrado a las 19h en la plaza Universitat de la capital catalana y han iniciado la marcha una hora después.
https://elpais.com/espana/madrid/2021-02-17/incidentes-y-tension-en-la-manifestacion-en-madrid-por-la-encarcelacion-de-pablo-hasel.html
Las protestas contra el encarcelamiento del rapero Pablo Hasél se han contagiado la tarde de este miércoles a Madrid. Un centenar de policías ha cargado esta tarde al menos cinco veces contra centenares de personas que se concentran en el centro de Madrid para reclamar la puesta en libertad del cantante, arrestado este martes en Lleida. Entre un fuerte olor a pólvora por los petardos que han lanzado los manifestantes, la Policía cercó la plaza y tuvo que controlar seis de los ocho accesos de las calles aledañas.
https://www.cuatro.com/todoesmentira/black-block-manual-grupos-violentos-manifestaciones-risto-analiza_18_3095670261.html
Los angelitos de Barna tenían hasta manual. Los comunistas locales seguro que no necesitan.
Literalmente me estáis comparando una actividad sindical corriente con el impuesto revolucionario… Me parece de un sinvergüencerío descomunal propio de franquistas que añoran los tiempos donde el sindicalismo era ilegal y la policía entraba a reventar las asambleas. Si tan demócratas sois, deberíais abandonar los sueños húmedos donde fantaseáis con detenciones masivas de gente que organiza protestas y huelgas. Leeros la constitución y percataos de que el sindicalismo es un derecho constitucional, que no puede ni debe ser comparado con la actividad de grupos armados. Por semejante demonización del movimiento obrero ocurrió la matanza del 3 de marzo de 1976 en Vitoria, cosa que no debería repetirse nunca más en Euskadi. Lo único que conseguimos creando fantasmas de ese tipo y poniendo a las nuevas generaciones en el punto de mira es legitimar los extremismos.
Gartxi, a lo concreto, nadie habla de actividad sindical corriente sino actividad sindical no corriente, la de LAB en los tiempos de plomo, por ejemplo, trasladada ahora a unos cuantos jóvenes con el cerebro lleno de estalinismos que van haciendo ruedas de prensa denunciando condiciones laborales determinadas con la intención ulterior del uso de la coacción, como ya se hizo anteriormente. Unos tíos que además se autoerigen en los protectores del proletariado. Comprendo que vengas a intoxicar pero hazlo con un poco más de estilo, hombre.
La Kale Borroka con excusa de la revolución, de las condiciones laborales y otras cosas no es fantasía, es realidad, pero para tu vienes con el discurso de que todo eso no existe y si existe es admisible (para un pendejo como tu se nota que eso es así).
Eso es, sigue comparando secuestrar a un industrial con dar ruedas de prensa para denunciar condiciones laborales.
Por coacción se puede entender presionar a un jefe que no quiere pagarle el sueldo a una trabajadora que está sin contrato, o las circunstancias mismas en las que se encuentra esa trabajadora. Depende por dónde se mire.
Aquí los únicos que tienen el cerebro lleno de estalinismos sois los que os gustaría detener a todo cristo por denunciar cosas. Sois vosotros los que buscan excusas de tiempos pasados para justificar su totalitarismo en el presente.
Denuncian condiciones laborales unos tíos que se erigen en protectores del proletariado, se dedican a hacer pintadas en los locales de los partidos y luego hacen kale borroka. Tengamos un poco de historia, en los tiempos de plomo todo iba en el mismo pack, te ponían en un cartel, te ponían la diana, te atacaban la tienda o al fábrica… Vamos Gartxi, no te hagas el orejas.
Pues claro que hay condiciones laborales que son muy malas pero que de repente unos tíos se autoproclamen los héroes del proletariado y den ruedas de prensa, eso me parece muy peligroso. Sobre todo si después atacan con tuercas y cohetes a la Ertzaintza.
Totalitarios son los que se llaman «comunistas» y no denuncian que la pandemia viene de la China comunista.
Si taaanto te molesta que unos tíos que se erijan protectores del proletariado y den ruedas de prensa, la próxima vez vas tú y lo haces en su lugar.
Si cartel/pintada = plomo, supongo que los miles de chavales que han salido a la calle en Barcelona y en Madrid serán también de los grupos Y, se habrán entrenado en el Líbano o les habrá poseído el espíritu de Txomin Iturbe, porque sino no se explica, ¿no?
Lo malo, te lo repito una vez más, es que con la rueda de prensa encima te veas con el derecho de coaccionar a las personas, que es lo que les ocurre a los mesías de esas ruedas de prensa, se dedican a pintar las paredes no con mensajes de amor y luego, hala, a enfrentarse con la poli, que es muy mala. ¿Quién les manda hacer eso? Una ideología totalitaria, la misma que exporta la pandemia de China a occidente.
Te cuento lo último que dijo en la tele un mosso de squadra, aislaron a una furgoneta con 6 mossos en la pza urquinaona, con barricadas por delante y por detras. Luego les metieron un artefacto con disolventes y no acertaron con los mecheros encendidos. Conto q fue una accion preparada y q no les salio porque fallaron en el encendido.
Ahora no hace falta ir al Libano, se entrenan aquí y lo de la mozkorra borroka es también entrenamiento.
Menos mal que en el Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco hay mentes menos embrutecidas y más prudentes que algunas que se pronuncian aquí, porque si por vosotros fuera, GKS tendría sus propios Pablo Hasels en cada comarca. Lo del fin de semana pasado en Pamplona y Bilbao parecería Disneyland comparando con la que se iba a liar. ¿Es eso lo que queréis?
¿Pero qué me dices, Gartxi? ¿Qué las cosas pueden ir todavía a peor que lo de Pamplona y Bilbao? ¿Qué esto es una escalada? ¿Qué van a ocurrir emboscadas del tipo de la plaza Urquinanona en Barcelona? Entonces la cosa es pero muy grave.
Me alegro que estés de acuerdo con la política policial del Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco. Sin embargo, los del GKS y otras gentes de la izquierda abertzale comentan la terrible represión de la Ertzaintza. ¿en qué quedamos?
Efectivamente, si detienes a cientos de personas por realizar actividad política de baja intensidad, no esperes que se queden de brazos cruzados. No sé lo que ocurriría, lo que sí sé es que los simpatizantes de GKS se cuentan por miles, y están mucho mejor organizados que los catalanes.
La política policial del Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco me parece la más inteligente, sí, y no la estrategia mcarthysta que planteáis algunos. Perjudicaría gravemente a los comercios, al mobiliario urbano, a los agentes de la policía vasca y a miles de ciudadanos vascos que tendrían que ver a sus hijos en la cárcel… a la paz y la convivencia de nuestro país, en definitiva. Contención, proporcionalidad y templanza, en eso quedamos, Xurxuri.
Por otra parte, aunque ni de lejos comulgo con GKS, me parece legítimo que protejan a trabajadores sin contrato que no tienen sindicato al que afiliarse. No comparto ni sus objetivos, ni las pintadas en las sedes, ni los disturbios, pero a la vez estoy orgulloso de que en Euskadi haya tantos jóvenes preocupados por ayudar a los más desfavorecidos. Mira éste vídeo:
https://www.youtube.com/watch?v=HNMdxwR2c6o
Nadie debería ir a prisión por esa labor tan noble, y el que piense lo contrario que se quede con Rodolfo Martín Villano. Me parece excelente el memorial a las víctimas del 3 de marzo de Vitoria que se está impulsando, y por eso creo que la memoria histórica ha de estar presente, para no cometer los mismos errores que se cometieron en el pasado.
Gartxi ¿a qué llamas actividad política de baja intensidad? ¿a pintarrajear locales con insultos amenazantes? ¿a montar ruedas de prensa a cuenta de lo que pasa en una empresa? ¿atacar con tuercas, piedras y cohetes a la Ertzaintza? Te hago otra pregunta ¿quiénes decretan esa la que tu llamas «actividad política de baja intensidad? ¿Son partidos? ¿Son movimientos? El señor Kolitza nos habla de movilizaciones de miles de personas y de enfrentamiento puro y duro, convertir las movilizaciones en maniobras militares.
Hay una cosa clara y es que al lado de movilizaciones con contenido determinado hay gentes que las usan de parapeto para armar temibles cifostios. ¿Es que eso no es responsabilidad de nadie?
Lo que tu me dices es algo muy grave, que es que no hay que juzgar a las personas por delitos porque si no se meterían a cientos de personas en la cárcel. Pero si cientos de personas, miles dice Kolitza, quieren dar caña a tutiplé ¿entonces que hacemos? ¿no te parece que la ley de la impunidad que tu propugnas no hace más que extender el campo de esas gentes que tu dices que hacen actividad política de baja intensidad?
También me parece un doble juego el que la izquierda abertzale, GKS y toda la mantra universitaria de la izquierda caviar se dedique a criminalizar la acción de la Ertzaintza y tu me digas aquí que te parece de perlas la política del Departamento de Seguridad del Gobierno Vasco. ¿Con los blandos duros pero con los que señalas como duros es que te pones blando?
Y macarthysmo nada, ellos mismos se proclaman, los de GKS, Kolitza, comunistas. Comunistas al viejo estilo totalitario. Es decir, gente contraria a la democracia y que además hacen el juego al comunismo chino que crea la pandemia. Es una pena para ti que la realidad sea lo que tu llamas macartista.
Los jóvenes de GKS no ayudan una micra a los más desfavorecidos, simplemente se visten con la chaqueta de los salvadores. Pero, ¿cuántas fábricas o actividades económicas con justicia social producen los de GKS? ¿es qué el dinero público se gaste en borrar sus pintadas y sus desaguisados callejeros es lo que tu llamarías gasto social?
Esos jóvenes son fanáticos al servicio de una ideología oscurantista y que en todas las partes del mundo sólo ha creado sangre y miseria. Aquí también en Euskadi.
A los de GKS les parece muy bien recordar a los obreros de Vitoria asesinados durante el franquismo ¿Y los 850 asesinados de ETA? ¿A esos que los zurzan porque los mataron en hombre del socialismo de GKS?
Señalar al enemigo de clase y coaccionar le o sea que es actividad política de baja intensidad. O sea que también la hay más alta. O sea que en función de que os aprieten la respuesta será proporcional. Gartxi tú quién eres, el ministro de la propaganda de GKS o qué? Sabes perfectamente que la escalada contra la Ertzaintza está planificada, y más pronto que tarde en alguna de vuestras respuestas se «os irá la mano», pero planificadamente. A mí no me sorprenderá, a ti tampoco. A los pánfilos que dirigen el departamento de dar abrazos (perdón, de Seguridad) seguramente sí.
Lo que estamos viendo y ratifican algunos comentarios es el rotundo éxito de ETA y su entorno que no solo ha creado un síndrome de Estocolmo que ha degradado moralmente a la sociedad vasca –y en cierta medida a la española. Ya no necesitan matar. Les basta con alimentar el recuerdo y como el PNV no ha planteado una batalla moral ante auténticos genocidas veremos el resurgir del chantaje físico. De hecho el Post de Gartxi sirve perfectamente como carta de extorsión a toda la sociedad.
Este cáncer es mortal y no tiene más freno que darles lo que pidan.. Al tiempo.
Hemos comprobado a nuestra costa que la violencia funciona y cuanto más funciona más valiosa resulta.
Dejame inferir, Manu, o sea que pintan batzokis, atacan a la Ertzaintza y la culpa la tiene el PNV… no sé a que me suena esa musiquilla… A los tiempos de plomo cuando ETA mataba y los más españolazos le echaban la culpa al PNV. Ahora la tiene de que le pinten los batzokis…
Dices que «ha creado un síndrome de Estocolmo» ETA en la sociedad vasca… Pues miro la tele y veo que en España y en Cataluña las cosas están bastante peor… pero que bastante peor, en España uno de los partidos del gobierno, Podemos, incluso jalea a los que ponen barricadas y echan piedras a la policía. A eso se le llama el síndrome de Caracas?
Desde luego ETA de rotundo éxito nada sino rotundo fracaso y del rotundo fracaso nace Gazte Koordinadora Sozialista, tratando de convertir en éxito lo que es un fracaso, entre otras cosas porque el PNV no cedió ni moral ni políticamente a ETA. Ahí se ve la diferencia entre Euskadi y Cataluña, que van detrás de la extrema izquierda radical de la CUP mientras aquí Bildu ladra a las farolas.
Dilecto Manu, comprendo que los de la megaderechona como tu tengan que estar un poco deprimidos por el espectáculo que canta del país español y la diferencia con Euskadi en todas las facetas, incluido el enfrentamiento callejero y la imagen que dan los líderes. Pero que eso sea excusa para que vengas otra vez con que el PNV tiene la culpa que le ataquen, me parece el colmo.
Apreciado Txankete, tienes razón.
La culpa siempre la tiene el asesino y el matón. Es decir ETA.
Pero el resto también tenemos la responsabilidad moral de no plantar cara. No solo el PNV, todos tenemos esa responsabilidad, pero reconocerás que el PNV no es un actor cualquiera. Es quien ha gobernado.
El PNV es el que ha gobernado, es cierto, y bajo su gobierno ETA se suicidó. Y se suicidó porque si no la izquierda abertzale no iba a tener nunca la posibilidad de ganar unas elecciones, porque la sociedad vasca no tragaba a ETA. Y pese al suicidio, Bildu tampoco gana.
Del cadáver de ETA surge GKS. Son los que echan en cara a la izquierda abertzale su fracaso y dicen que van a ganar. Es otro problema aunque derivado del primero.
https://kronika.eus/hernani/1614106429000-ertzaintzaren-gehiegikeriei-ateak-ixteko-eta-erantzuteko-unea-da
Demostración palmaria de como dos se combinan en uno. A unos (oficiales) y otros («disidentes») no les deja vivir la opresión/represión. Les recomiendo el sistema chino de una cámara/sensor en cada puerta para controlar que no salgas de casa. Y un poli en cada portal. Ah no, que eso no es represión, que son medidas eficaces contra la pandemia…
En su ofensiva contra la Ertzaintza GKS y Bildu son como culo y mierda, inseparables.
Mao decía: «Yang Hsien-chen cree que dos se combinan en uno, y que la síntesis es el vínculo indisoluble entre dos opuestos. ¿Qué vínculos indisolubles hay en este mundo? Las cosas pueden unirse, pero al final tienen que separarse. No hay nada que no se pueda separar» (tomado de Zizek, sobre la práctica y la contradicción).
La crítica de Mao a la formulación de ‘dos se combinan en uno’ o ‘dos se unen en uno’ pone el foco en la unidad (que se da en la acción, pero está sujeta a la duración de esa acción, por lo tanto es transitoria), y elude evaluar la división que es lo permanente en la concepción dialéctica.
Por eso, contra el ‘dos se combinan en uno’, él se refería al ‘tres se combinan en uno’ como eslogan equivalente al ‘uno se divide en dos’, puesto que incluía el 1 (unidad provisional) y el 2 (oposición constante), en el conjunto estratégico del movimiento revolucionario.
El artículo que incluyes, Arkupe, tiene los dos aspectos. En mi opinión, mirado desde la perspectiva del diamat maoísta, no sería correcto identificarlo con ese ‘dos se combinan en uno’.
Kaxo Markel
Independientemente que Arkupe te responda, quisiera intervenir en este interesante debate.
Me alegra mucho encontrar alguna persona que sepa algo del materialismo dialéctico. Yo también me he coscado que el artículo menciona la disputa filosófica sobre el uno se divide en dos y dos se combinan en uno.
Me gustaría plantear la cosa en términos más concretos:
1) GKS y Sortu se dividen (acto de Zumaia) y además lo hacen públicamente. Hacía tiempos que en la izquierda abertzale no se daba un «desdoblamiento» como dios manda. Pues bien, esto es uno se divide en dos.
2) GKS inicia una ofensiva contra la Ertzaintza como representante de las «fuerzas armadas» de la burguesía. Y Bildu se apunta al carro de la denuncia de la Ertzaintza. Aquí dos se combinan en uno.
Dices, con gran razón, que el análisis de Arkupe prescinde de un aspecto crucial del materialismo dialéctico estilo Mao: para Mao no hay síntesis. Una vez dada la división en dos del sujeto de la revolución no hay síntesis posible entre los dos sujetos.
Veamos lo que pasó en la Gran Revolución Cultural. China se dividió entre el partido y los «guardias rojos». Efectivamente no hubo síntesis. Los guardias rojos acabaron con el antiguo aparato del partido, Liu Shao Chi y Chen Boda, y el partido acabo con los guardias rojos, que fueron llevados a los arrozales.
Aquí en Euskal Herria ¿cómo describir un paralelo?
Primero, he entrado en el debate de Argia entre Compains y Kolitza. Compruebo que el debate, más allá de las circunstancias, se refiere a la cuestión de quien va a ser el sujeto revolucionario.
En grandes términos y simplificando, si ese sujeto va a ser GKS o Sortu. No hay síntesis entre ambas posturas. Pero hay combinación. Es lo que dice Arkupe.
En cuanto a ¿quién es el sujeto revolucionario? Me parece que hay que tener en cuenta que es verdad que GKS ataca una cuestión crucial para un Estado, como es el del monopolio de la violencia. Y es verdad que está inyectando en nuestra sociedad dosis homeopáticas de violencia revolucionaria, con la intención de hacer morder el polvo a la Ertzaintza.
Pero ¿dónde está su representación política? ¿cuál es el instrumento de GKS para conquistar el Estado? Ahí me parece que el camarada Compains tenía toda la razón. La lucha en la calle tiene mucha épica y es útil pero no es nada sin la continuidad de una estrategia sostenida por un partido, como Sortu, que es el de la revolución porque puede tomar el poder. Sólo por eso.
Sólo por eso, la lucha de GKS, con toda su utilidad revolucionaria, es secundaria respecto a la toma de las instituciones. Sortu tiene estrategia: ¿cuál es la estrategia de GKS? No la veo.
Eskerrik asko, agur bero bat
Interesante debate.
No se menciona en el una cuestión que me parece muy importante. Y es el paradigma creado con el caso de George Floyd en Estados Unidos, donde una organización subvencionada por China como el Black Lives Matter ha sabido arrastrar a miles de tontos utiles detras de una reivindicación justa como el antiracismo y en el mismo viaje hacer una kale borroka por todo el territorio de Estados Unidos, que representa todo un modelo de actuación.
Aquí, Pablo Hasel, representaría el Floyd catalán que logra aglutinar la lucha popular con la kale borroka, que a la vista de los actos de Barcelona, está claro que va directamente contra los Mossos de Esquadra, la policia que representaría el sistema. Alucinante situación la de unos antisistema atacando una policía catalana, mientras los supuestos politicos nacionalistas se ponen al lado de los atacantes.
Hasel es importante, porque ha representado un icono para una semana de kale borroka en todo el estado, mientras el Segundo gobierno del Gobierno, es decir, el de Podemos, ha pasado toda la semana haciendo declaraciones a favor de los luchadores callejeros.
Detras de la reivindicación de la libertad de expresión, de repetir hasta la saciedad de que a Hasel le meten en la carcel por cantar rap -no es verdad, le meten por reincidencia-, existe toda una campaña de acoso y derribo callejero ante los tiempos que se avecinan en el futuro, con la troika europea que es la que tiene que dar el cheque del rescate a ESpaña, que va a poner como condición el ajustar y recortar el gasto público, lo que supondrá, entonces sí, la salida del gobierno de Podemos y la caída del gobierno de Sanchez.
Veo que Markel cita a Zizek, ese gran amante de la libertad.
comunistas del siglo XXI que entrais a este foro, me gustaría haceros unas preguntas (y sobre todo a los nuevos eusko jhemeres rojos):
-¿Cuantos kilometros de alambre de espino necesitareis comprar para en la Euskal Herria independientes y sozialista tan añorada, para hacer 7 campos de concentración, uno en cada herrialde?
-¿Cuantos campos de deportación?
-¿Cuantas irrupciones y detenciones en casa de madrugada?
-¿Cuando empleareis vuestros nuevos mecanismos digitales de lectura de conciencia que vigilarán que soñemos lo correcto?
-¿A que escuelas de reeducación nos mandareis para aprender de memoria el pensamiento correcto?
-¿Cuantas conductas calificareis de antirevolucionarias?
-¿Los perros y los gatos podrán ser condenados a muerte?
-¿Podrá ser el hamster de mi hija sospechoso de ser un confidente de la CIA?
-¿Cuanto valdrá el «bolivar» esa moneda que implantareis en Euskal Herria?
-¿Podré seguir yiendo a pescar al río -una de mis pasiones favoritas-, o será una actividad perqueño burguesa?
-Establecereis como verdad oficial: «En la Euskal Herria Sozialista no se pasa hambre». Y al que diga que tiene hambre lo calificareis de agente desmoralizador y derrotista?
Hermanos de GKS que maravilloso el paraíso en el que soñais. Pero el los tios Mao, Pol y Josef os han dejado alto el pabellón: 100 millones de muertos. Venga a ver si lo superais, que queremos ser libres…
(Ahora mismo me estoy acordando de Torrebruno cantando «Rocky carambola»….)
Vaya txapa Markel, se nota que te gusta demostrar que eres el que la tiene más larga en materialismo dialéctico. Pura erudición, te imagino al calor de tu despacho en la universidad demonizando a esta injustísima sociedad y calentando la cabeza a los tontos útiles (toda revolución necesita soldados, carne de cañón) para que se lancen contra el enemigo de clase. Y tú seguirás al calor, bien cobijado. No te veo partiéndote la cara ni con la Ertzaintza ni con los socialdemócratas de Ernai. Que lo hagan otros si eso, no?
Este intercambio de impresiones con gente de la izquierda es aclaratorio.
Gazte Koordinadora Sozialista no responde a todos los aspectos de la lucha anticapitalista. Es, por decirlo de alguna manera, un organismo unilateral.
Se diversifica dentro de un campo de lucha. Le falta visión panorámica. Por eso su función práctica es la de ser un factor más dentro de la estrategia general de Sortu-Bildu.
Por continuar con mi intervención anterior. La principal ley de la filosofía marxista es la de la contradicción. En el análisis político de lo que ocurre entre los que la tienen como fundamento para la acción lo importante es cómo se desarrolla la llamada ‘unidad de contrarios’. La interpretación Txuribeltz me parece correcta, si se entiende que la combinación de dos en uno se refiere a la unidad y a la división entre los dos contrarios, y se manifiesta como unidad en la acción concreta. En el caso de GKS y Sortu, esto se está produciendo sin duda. Aunque mantengan una división en lo estratégico-táctico evidente, que en los términos en los que se está desarrollando recuerda las rupturas de ETA al filo del 70 del siglo XX. En fin, creo que este tema ya ha sido tratado en Aberriberri en alguna ocasión, hace ya algún tiempo.
Me interesa subrayar la necesidad de tener en cuenta tanto la unidad (que es precaria) como la división (que es la tendencia), porque de ver solo unidad (son uno y solo uno) o de ver solo división (no tienen nada que ver el uno con el otro), la forma que se tiene de responder al fenómeno revolucionario será parcial y desacertada. El que solo ve unidad cree que hay que combatir la revolución a bloque. El que solo ve división se expone a ser utilizado al servicio de la revolución.
Es conocida la frase de Suntzu, ‘conócete a tí mismo, conoce a tu opositor, y podrás librar 100 batallas sin ser derrotado’. Demostrado en obras anteriores el conocimiento de ambos, Irala y su grupo escribieron el libro ‘Revolución-represión o burujabetza’, en el que trazaban una línea socio-política de trabajo que buscaba que Euskadi cayera en la acción-reacción de la revolución (con la que puede colaborar el que solo ve división)-represión (en la que puede terminar confiando exclusivamente, el que solo ve unidad). Por supuesto, que hay que abrirse al cambio político y social, lo mismo que hay que combatir con la ley en la mano al que quiebra la paz y la convivencia sociales. El Estado posee el monopolio legitimo de la fuerza y debe ejercerla con eficacia; pero posee también atributos democráticos realizar políticas que alimenten permanentemente la integración social.
Kaxo Markel:
Me gusta mucho una cosa de este último post tuyo pues recuerda una línea de reflexión que ilumina esta situación de forma pristina. El último párrafo en concreto. También leí ese libro que tu citas, que es la continuación del libro del Lehendakari Agirre «Entre la libertad y la revolución». Los vascos nos hemos encontrado muchas veces atravesados por las contradicciones del marco español. El nacionalismo de Agirre y de Irala pretendió superar esa disyuntiva defendiendo la ley, en contra de la represión, y combatiendo la revolución, planteando la integración social.
Tiene su lógica interpretar el desdoblamiento de GKS respecto a Sortu en referencia a las rupturas de ETA en los 70. Habría que precisar más y veríamos la ruptura entre ETAm y ETApm, que se realizó amigablemente desde la cúpula (¡qué paralelismos con la ruptura entre amigos y casi carcajadas de Kolitza y Compains!). Cada rama de ETA quiso que la práctica fuera la que decidiera la justeza de la línea revolucionaria respectiva.
En el caso de GKS y Sortu pasa lo mismo. Después de casi un lustro nos encontramos con el balance de cada una de las prácticas. GKS consigue formar un colectivo de gente, bien organizada, con excelente formación política, que ataca el monopolio de la violencia del Gobierno Vasco en un momento crítico, como es el de la administración de la situación causada por Covid-19.
Y además conecta con otros colectivos revolucionarios de España y de Cataluña en un momento de crisis de legitimación del Estado, en el marco del primer gobierno de coalición-progreso de toda la transición. Eso está muy bien, pero eso es «táctica», no estrategia.
Por ahora (hasta que veamos lo contrario) la acción de GKS no alcanza el rango de «estrategia» por no contemplar, en sí mismo como sujeto, el punto leninista crítico: la toma del Estado por parte del partido revolucionario como primer escalón de ruptura.
Le leo a Kolitza, alude a «espacios de poder socialista» pero estos, por sí mismos, no llegan a cristalizar el partido del proletariado, que es su exigencia a Compains y la base de su denuncia a Sortu.
La coincidencia del dos (GKS-Sortu) en el uno (deslegitimación-erosión del GV y Ertzaintza) que tu apuntas va más allá de la coyuntura, con el partido del proletariado Bildu-Sortu en el disparadero de la toma del poder.
Operaciones como las de ayer noche y hoy en el campus de la UPV en Ibaeta:
https://gedar.eus/aktualitatea/langilemugimendua/ertzaintza-sartu-da-ibaetako-campusera-eta-astelehenean-berreskuratutako-gunean-erresistentzia-egiten-ari-dira-ikasleak/
https://gedar.eus/aktualitatea/langilemugimendua/manifestazioa-egingo-dute-gaur-ibaetan-bart-polizia-indarrak-campusera-sartu-izana-salatzeko-eta-askatasun-politikoak-aldarrikatzeko/
¿A quién realmente benefician? Ese «espacio de socialismo» creado en el aula no iba a durar mucho, no iba a convertirse en la Comuna de París, y cuando los grupos de GKS sean disueltos por la Ertzaintza, lo único que quedará será el establishment de profesores de UPV de la izquierda abertzale oficial, que podrá sacar pecho y postularse como alternativa a un sistema que permite que esos jóvenes idealistas tengan que exponerse en esa situación.
No basta con la voluntad de romper, hay que romper realmente, y para eso se tienen que dar dos líneas efectivas de «estrategia» y no una táctica que por muy voluntarista que sea (y por muchos efectos que produzca) a la postre beneficia al que está posicionado, Sortu-Bildu, para pasar al siguiente escalón de toma del poder institucional.
GKS ni siquiera está posicionado, se mueve en la calle, en los campus, pero ¿dónde va a dar el salto a la toma del poder? ¿cuánto duran sus espacios de socialismo?
Eso lo harán Sortu-Bildu-Izquierda abertzale oficial si consiguen debilitar lo suficiente al gobierno de Urkullu. En eso, que es estrategia, GKS les resulta de una gran ayuda. Su táctica es complementaria a la estrategia de Bildu. Dos se combinan en uno.
Eskerrik asko, Markel, oso gustora zurekin.
Ondo ibili
Pues vamos bien si lo de Ibaeta es el socialismo liberador del futuro: un espacio liberado de las mínimas precauciones contra la covid (todo quisqui sin mascarilla), juntos sin respetar la distancia(solidaridad proletaria supongo) y la peña fumando como si de un after se tratara. Pues que viva la revolusión! (pero que viva lejos que decía el otro). Ah, y si los neo boltxes quieren un local para realizar su «actividad política» que se lo paguen, como hace el resto del proletariado. Jetas.
Por aviso de un lector me he dado cuenta que había un error en mi último comentario:
Donde dice: «Irala y su grupo escribieron el libro ‘Revolución-represión o burujabetza’, en el que trazaban una línea socio-política de trabajo que buscaba que Euskadi cayera en la acción-reacción de la revolución (con la que puede colaborar el que solo ve división)-represión (en la que puede terminar confiando exclusivamente, el que solo ve unidad)».
Debe decir: «Irala y su grupo escribieron el libro ‘Revolución-represión o burujabetza’, en el que trazaban una línea socio-política de trabajo que buscaba EVITAR que Euskadi cayera en la acción-reacción de la revolución (con la que puede colaborar el que solo ve división)-represión (en la que puede terminar confiando exclusivamente, el que solo ve unidad).
Perdón, aunque creo que se puede entender atendiendo al contexto.
Kaxo Markel, como tu dices, el contexto da el verdadero significado de esas gloriosas palabras. Veo que eres una persona informada y eso es bueno.
La segunda parte de mi intervención, la más desarrollada, tocaba un aspecto que tu aludiste como era el de la supuesta quiebra estratégica entre GKS y Sortu-Bildu. Yo te argumento que no hay tal quiebra, ya que GKS no es ni el sujeto-partido del proletariado y además no tiene estrategia de toma del poder.
Me gustaría saber tu opinión sobre esta cuestión.
https://www.diariovasco.com/economia/sella-alejamiento-priorizar-20210226193723-nt.html
Ojo cuidau que a ver si ELA va a ser el referente sindical de GKS y compañía.
Txuribeltz, creo que ambos estamos en el mismo plano de reflexión. Me haces una pregunta y me explico a continuación, aunque seguro que para tí no habrá novedades en lo que voy a decir. Hay una ruptura estratégica, bastante bien explicada en estos artículos de Aberriberri, con los que coincido en lo fundamental, aunque discrepe en algunos puntos que son accesorios y que supondría abrir otra discusión.
https://aberriberri.com/2019/04/15/catarsis-ideologica-2/
https://aberriberri.com/2019/04/17/catarsis-ideologica-y-3/
En alguno de ellos hace referencia a un artículo de Mota que, en debate con Compains, legitima la aparición de GKS bajo la perspectiva de impulsar un proceso que culminaría en la materialización de una subjetividad revolucionaria, pretensión que según él Sortu habría abandonado. El sujeto es acción operativa. La pregunta sobre el sujeto, por lo tanto, sería quién está en la acción revolucionaria concreta.
Elgezabal y Abendaño inician su artículo con la referencia a unos tuits del mismo Mota, en los que precisamente perfila el núcleo del ‘sujeto revolucionario’. Parece desdeñar la crítica de desafección respecto de las ‘masas’, que le imputan desde las filas de Sortu. Por ahora, los radicales de Kolitza no tienen partido-vanguardia, aunque sus textos apuntan a que se disponen a crearlo mimetizando las directrices de Lenin: núcleo duro y monolítico, militancia consciente, disciplina cerrada… La crítica a Sortu incluye, precisamente, que el desmantelamiento del MLNV ha llevado al desdibujamiento de la vanguardia.
Mao definía la estrategia con ‘1 (socialista o comunista revolucionario) contra 10 (adversarios de la revolución o no revolucionarios’). La táctica, sin la que es imposible gestionar un avance revolucionario, sería definida por el mismo Mao, como ’10 (el núcleo duro revolucionario + 9 aliados transitorios) contra 1 (el enemigo principal, el mayor de los enemigos).
El radicalismo revolucionario (GKS+IK+otros grupúsculos…) están en el punto de la acción y la organización estratégica, tratando de generar el núcleo duro de la subjetividad revolucionaria. Por ahora, no buscan amigos. La división entre ese entorno y Sortu emerge en el ‘opuesto’ diagnóstico sobre la realidad: Kolitza y los que le siguen creen que es tiempo de choque directo contra todo aquel que sea ‘enemigo estratégico’. No es tiempo de ‘gradualismo revolucionario’, ni de perderse en particularidades de ‘escala nacional’ que se orienten hacia alianzas de tipo transversal. Lo táctico es lo estratégico.
Sortu, por el contrario, subraya la necesidad táctica de construir una amplia línea de frente, que levante la bandera de la pluralidad nacional de la península. Y ahora, prioriza el cerco de las izquierdas periféricas a Madrid en apoyo del choque que se está produciendo allí, que es la línea de corte más dinámica hasta el momento. Una unidad de acción táctica que busca desarrollarse con la mayor amplitud posible en el seno del ‘marco de lucha’ que es el Estado (con todas las baterías políticas apuntando al ‘régimen del 78’). Pero que, como todas las acciones tácticas, tiene un riesgo: es volátil. Y los Kolitzas apuntan a que esta vocación proclive a la táctica desemboque en puro tacticismo u oportunismo que lleve al progresivo abandono de la referencia revolucionaria. Su crítica a la evolución socialdemócrata de Sortu iría por ahí.
No sé si he respondido a lo que me has pedido.
Con vuestro permiso voy a repetirme. La captación y adoctrinamiento de jóvenes por la izquierda revolucionaria para su causa es una constante. Y su periodo de prácticas lo hacen en los innumerables organismos populares que proliferan entre nosotros. Tengo una seria duda: ¿No lo vemos o no somos capaces de contrarrestarlo?
Si no lo vemos … no tenemos remedio
Si lo vemos, ¿por qué no hacemos lo posible por contrarrestarlo?
El mejor remedio para ello es la educación. Como se dice en el artículo 26 de la declaración universal de los derechos humanos: “La educación tendrá por objeto el pleno desarrollo de la personalidad humana y el fortalecimiento del respeto a los derechos humanos y a las libertades fundamentales”
Deberíamos ser capaces de superar el viejo marco de discusión público-privada referido al modelo de enseñanza y sustituirlo por un nuevo marco de discusión en torno a los valores humanos con los que debemos enriquecer la personalidad de nuestra juventud. Y de nuestro pueblo.
Arkupe lo borda superando la vieja teoría del Uno se divide en Dos
ELA y GKS van al unísono, seguirle la pista…