Joxan Rekondo Pyrenaeus-eko Talaian

Logotipo-cabeceraLos estudios de opinión muestran, una y otra vez, que la mayoría ciudadana está cada vez más lejos de la política. Esto, sin embargo, contrasta con la creciente dependencia que mostramos respecto de los servicios que ofrece la Administración pública. ¿Es posible que sean dos caras de la misma cosa?

En invierno pasado, el DeustoBarómetro Social preguntó a un espectro representativo de la sociedad vasca acerca del modelo de sociedad en la que les gustaría vivir. Un 12% de los sondeados dijo apoyar un modelo de sociedad liberal en el que cada persona sea la responsable de su propio bienestar. Un segmento algo más amplio (15%) señaló su preferencia por un modelo participativo basado en la ayuda, solidaridad y colaboración cívica, al que quedaría supeditado el papel del poder público. La mayoría (60%) de los encuestados, por su parte, defiende un modelo en el que los poderes públicos sean los encargados de garantizar el bienestar de la ciudadanía.

Aunque algunos puedan llamar social a esta visión dominante, creo que es muy individualista. Que responde a un tipo de individualismo, en cuanto demandante activo de derechos, que muchas veces confunde bajo esta demanda necesidades ineludibles con deseos o aspiraciones de carácter más voluble. Este individualismo estatizante termina por anestesiar la principal característica de las personas que es la capacidad de hacer y de cooperar en sociedad. La salud democrática de las instituciones públicas se ha deteriorado con el telón de fondo de esta dinámica de paternalismo estatal creciente, frente al que solo parece admisible movilizarse en clave de exigencia de respuesta. Estamos ante un Leviatán bienhechor. Pero, que también ha mostrado sus límites: enormidad administrativa, espesura burocrática, derroche y redes de corruptela. Es lo público, sí. Pero, está privado del dinamismo de lo común.

¿Es esto lo que ocurre en Euskadi? Es posible que tan pequeña muestra no sea un reflejo exacto de lo que ocurre. Pero, hay una erosión de nuestra cultura social que sí es muy perceptible. Hoy es muy complicado salir de la espiral de confrontación protagonizada por la lucha entre el modelo privado y el público, que en lo político se expresa a través del enfrentamiento entre los partidarios de la estatalización y los de la desregulación. Ambas corrientes son continuadoras de la tesis de la ‘tragedia de los comunes’ de Hardin. Al mismo tiempo (1968) que éste recitaba el obituario de lo común, mucha gente de este país demostraba el potencial creativo y de desarrollo (cultural-educativo y socio-económico) de lo popular y lo comunitario, con el resurgimiento de las ikastolas y las empresas cooperativas.

Ahora se reivindica el compromiso social. Para activarlo, Arizmendiarrieta nos aconsejaría luchar contra nuestra proclividad interior al ‘individualismo feroz’. Y dejar de ver a “la persona como templo de todas las apetencias y derechos, sin contrapeso que dirija su mente a aceptar la limitación de tal postura, ya que la satisfacción de tales apetencias no es posible más que con la comunitarización de servicios y en ese darse a los demás, que es condición vital de la propia esencia del hombre”.

Ésta no es una afirmación abstracta. Los países que mejor salud política y económica están mostrando en Europa muestran valores sociales de tipo cooperativo, altos índices de confianza social y autorresponsabilidad cívica. Incluso en el Estado español, pese al declive que se percibe en la encuesta de Deusto, las sociedades que mejor están afrontando la crisis son las todavía mostramos un mayor sentido comunitario o una estructura más articulada de capital social. He aquí la opinión de Joan Subirats, catedrático de Ciencia Política de la UAB:

“En Euskadi hay una tradición organizativa. Por ejemplo, el famoso ‘Auzolan’ o la tradición cooperativa. Incluso hubo una época que el partido que tenía una proporción mayor de militantes y de votantes era PNV… El País Vasco y Navarra son de las sociedades más organizadas que existen, lo que ha hecho que el colchón de la crisis haya sido un poco mejor que en el resto de España. Esta organización es un capital que no puede perderse, es decir, que una sociedad que cuida sus estructuras de reciprocidad y de solidaridad, es una sociedad mejor preparada para el futuro.”

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16 comentarios en «¿Declive de lo común?»

  1. en euskadi lo que sucede es que los jovenes se nos van, la natalidad es pauperrima y el acceso a vivienda un imposible incluso para jovenes que tienen un trabajo «decente».

    pero estos problemas gravisimos es mejor no comentarlos no vaya a ser que tengais que despertar de vuestra autocomplacencia onanistica.

  2. Este artículo de Rekondo me ha recordado a uno de Juan Manuel Sinde que leí hace unos meses.

    “..¿Por dónde buscar una salida válida a largo plazo, distinta de la alternativa colectivista cuya ilusión terminó también simbólicamente con la caída del muro de Berlín?
    Quizás en este contexto merece recordar la insistencia de Arizmendiarrieta de que la actividad económica y la creación de riqueza no debían de servir para enriquecer a sus protagonistas sino para que, una vez retribuídos adecuadamente el capital y el trabajo, sirviera para ofrecer oportunidades de desarrollo a otras personas y comunidades.”

    “…En el ámbito empresarial, va ganado adeptos progresivamente la aportación de Arizmendiarrieta de que una empresa que trata a todos sus componentes de acuerdo con su igual dignidad humana y fomenta la participación de los mismos en la gestión, los resultados y la propiedad, lejos de ser una utopía idealista es una fuente de competitividad empresarial.” (Juan Manuel Sinde)

    http://www.canonizacionarizmendiarrieta.com/es/noticias/99-anos-de-arizmendiarrieta_48.html

  3. Joxan, esta muy bien lo del Auzolan, pero porfa mira los problemas reales que tiene Euskadi y vamos a intentar poner soluciones imaginativas mas alla de las veredas o el auzolan. Es que siempre nos hablas de lo mismo. Y es que el azulan esta bien pero no es suficiente

  4. Si nos fijamos en lo que ha ocurrido con las cajas vascas y su proceso de bancarización , no parece que el modelo auzolan o cooperativista haya tenido la más mínima incidencia en los que han dirigido dicho proceso.
    Es más fácil predicar que dar trigo y además distrae mucho al personal.

  5. Kutxabank y el Gobierno Vasco, a través de la sociedad pública Alokabide, han suscrito un convenio de colaboración por el que la entidad financiera cederá un máximo de 100 pisos para su arrendamiento en régimen de alquiler social.

    Para los nuevos inquilinos de estos inmuebles se fijará una renta de alquiler que ascenderá como máximo al 30% de los ingresos anuales ponderados de la persona o unidad familiar, que se calcularán conforme a la normativa sobre viviendas de protección oficial.

    Esto indudablemente no es suficiente pero es bastante mejor que hacer convenios con BANKIA.

  6. Ahi le has dado Larburu. Ya se empiezan a notar los resultados de las rogatorias de hoy.
    Plan para hoy:
    18:00 Santa Misa.
    19:00 Rosario.
    19:30 Platica a cargo del padre reverendo Don Iñigo.
    20:15 Cena – Sopa de Fideos
    21:00 Reflexion, oracion y se apagan las luces.

  7. Animado debate.
    Y fácil conclusión todo lo arreglará la canonización de Arizmendiarrieta.

    Bueno todo no.
    Las subordinadas de Fagor y la pérdida de tejido industrial más el patrimonio de muchos socios por culpa de algunos iluminatis.
    Y ello sin contar con Eroski que sigue dependiendo de los tiburones bancarios españoles.

  8. JELen agur
    Y todos estos batusis sin dar soluciones.
    Será que auzolan no tiene ventajas, o el cooperativismo vasco sobre los modelos hispanohomofobicos?
    A lo mejor los modelos ultra liberales o ultra soziatas están llenos de soluciones. Pero ni las muestran, ni se las espera.
    Nada. A decir paridas que para eso están.
    Claro que tenemos dificultades. Pero además de las fórmulas universales debemos aprovechar algunas características nuestras que nos protegen o nos permiten la protección mutua mas allá de lo común.

  9. Tenemos fórmulas nuestras , pero los magníficos administradores las ignoran olímpicamente como la evidencia del día a día nos muestra.

  10. HOMENAJE
    Casualidad hace pocos días se publicó en el blog de anasagasti el escrito de JM Sendi sobre la creación y gran desarrollo del modelo cooperativista-vasco Mondragon gracias a Aita JM Arizmendiarrieta.
    Sin duda un modelo (a pesar de sus fallos como todos…) que da y dará mucho que hablar e inspirar por los cuatro rincones del mundo.
    Dicho modelo tiene la capacidad de adaptarse a los tiempos, enfrentandose a y resolviendo amenazas presentes y futuras.

    KAPITAL+TRABAJO
    Mondragon deberá cuidar en todo momento la remuneración justa y suficiente de las fuerzas de desarrollo «sine qua non»: capital + trabajo.
    Solamente de esa manera podrá seguir creciendo de manera sostenida y duradera, creando a su vez nuevos proyectos, nuevos puestos de trabajo, nuevos horizontes.

    SOFT VS. HARD
    Siempre equilibrando el «soft-power» con el «hard-power».
    Es sabido hasta la saciedad que los modelos capitalistas salvajes y socialistas salvajes fundamentan su mantenimiento/crecimiento a veces en la instigación del «hard-power». Pan para hoy, hambre para mañana.
    La clave está en mantener en equilibrio esas dos fuerzas mutuamente excluyentes (que se complementen) cuales don el poder duro y el poder blando.

    JUVENTUD
    Ojalá que en paralelo nuestra juventud sea capaz de auto-realizarse profesionalmente.
    Los tiempos de un trabajo, una empresa,…,para toda la vida, son ya cosa del pasado en gran parte.
    Por mucho que queramos aferrarnos a ello, no solamente no podremos sino que además estoy convencido que nos es bueno ni para la persona contratada ni para la empresa que le contrata.
    La movilidad, capacidad polivalente, de las personas sea por cuenta ajena (cada vez menos), sea por cuenta propia (incluyo aquí a las cooperativas de Mondragon) son ingredientes, valores en alza.
    JELen,

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