Koldo San Sebastián
Cuando comenzaron a llegar noticias sobre la abstención en las sedes de los partidos saltaron todas las alarmas. Donde más fuerte sonaban fue en Sabin Etxea, sede del Euzkadu Buru Batzar (Consejo Nacional) del PNV. Ortuzar y Urkullu solo superaron las horas de tensión cuando se fueron confirmando los resultados. A algunos, la escena les recordaba la noche electoral de mayo de 2001. Pero, una semana después, las cosas parecen calmarse, aunque lo viene necesitará de mucho temple y poca demagogia, aunque la prensa afín a Podemos (ElDiario y Público) ya han comenzado la campaña electoral para las próximas elecciones, digo yo. Por otro lado, hoy quiero analizar lo ocurrido ayudado por el buen criterio de dos amigos y una amiga.
Nos comentaba uno de esos amigos que atesora la sabiduría que corre por el cauce del Urola:
“Fuimos a votar tras 121 días de bombardeo mediático sin parangón en la historia en la que se metió el miedo hasta el tuétano. Todavía hay miles de vascos que no se atreven a salir de sus casas por miedo a morir, las interminables homilías de Sánchez y los «héroes» de Osakidetza -los que vociferaban en las puertas de los hospitales- han creado un clima cuasi irrespirable. HB (Bildu) se encargó desde el primer minuto de plantear una falsa ecuación, salud o economía, y optaron por querer parar todo, lo cual tiene su predicamento ‘estos protegen la salud por encima de los intereses económicos del PNV’. Y la última semana de campaña tuvimos mala suerte con el foco de Ordizia, y la manipulación bastarda de su alcalde, no estuvimos muy acertados cuando se amenazó con sanciones a los positivos que fueran a votar”.
“Hemos vivido una de las mayores manipulaciones demagógicas con el vertedero de Zaldibar, -sigue mi amigo- con un PSOE agazapado (alcaldía de HB -Bildu-, departamento del PSOE, dueño amigo de Arriola, y todas las hostias para el Partido. Llevamos más de 120 días con más de 100 operarios trabajando en la búsqueda de 2 cuerpos, con más de 12 millones de euros de gasto realizado en una EMPRESA PRIVADA, hemos sucumbido a esta asquerosísima manipulación. Es cierto que HB donde mejor se mueve es con las basuras”.
“Tenemos un grandísimo reto por delante -concluye mi amigo-. Este año, faltarán 4.000 millones en los ingresos de las Haciendas Vascas (sin contar Nafarroa). Esto no se parece a la crisis de 1983, ni a la de 2008. ¿Cómo lo afrontamos? ¿Volviendo a cargar en las espaldas de la juventud mejor preparada el peso de esta crisis?, ¿Como se hizo con la devaluación de los salarios a partir del 2008, sin tocar nada a los jubilados? ¿Sin tocar apenas a los funcionarios? ¿Recurriendo solamente a deuda?, ¿Manteniendo la misma política de vivienda para que la juventud no pueda abandonar la casa de sus padres? ¿Sin enfrentarnos a los sindicatos? En función de lo que hagamos, tenemos PNV en el poder para varias décadas. Y así volviéramos a insuflar ilusión en el Partido, con más facilidad”.
El otro buen amigo -este desde la Llanada alavesa- también aportaba su siempre acertado punto de vista:
“Podemos estar razonablemente satisfechos porque seguimos siendo partido cosechadora. En las peores situaciones la gente nos ve como fiables. PERO y el PERO es con mayúsculas, esta crisis nos ha afectado mucho. Gente que se movía por nosotros no lo ha hecho esta vez, algunos por miedo y otros por cabreo. Si se llegan a mover y hay un cinco por ciento más de participación nos hubiésemos ido a 34 o 35 y Bildu se hubiese quedado en 19 o 20. En realidad leyendo los movimientos del eje de los proclaman izquierdas y los que dicen que somos de derechas yo que Bildu me preocuparía. En 2016 sumados Bildu y Podemos les sacábamos solo en Bizkaia 15.600 Esta vez 29.000”.
“Nos ha faltado también prestar más atención a los problemas emocionales que ha generado la pandemia -continua-. Estábamos muy centrados en los asuntos puramente epidemiológicos, pero los emocionales hay que tratarlos también. El que acierte en eso va a ganar un montón de puntos. Si no te metes ahí te robotizas y eso aleja a la gente. Hay que hablarle a la gente con sinceridad y empatía sobre ese sufrimiento hay que hablar del propio, porque creo que nos ha faltado hacer entender a la gente lo que han vivido los que estaban al frente de la crisis, solos y criticados por todos y hay que reforzar el sistema de salud en lo que se refiere a salud mental. (…) Personalmente otro tema que creo que nos ha perjudicado es el “buenismo”. Mucha gente mayor asustada se ha sentido completamente desprotegida por la permisividad con el tema de las no mascarillas, fiestones, etc. Creo que en las próximas semanas hay que poner orden ahí por dos razones. La primera epidemiológica y de salud. Así vamos de cabeza a otro confinamiento. La segunda porque mucha gente mayor necesita creer que sigue existiendo la autoridad”.
La euforia de Bildu resulta como poco curiosa. Así lo resalta mi amigo el de la Llanada:
“Bildu echa cohetes, pero no tiene por qué. Siguen sin captar nada nuevo que lo que alguna vez han tenido y que se fue a podemos o los jóvenes que entran por primera vez a votar y que luego se marcha de allí en cuanto tienen que pagar facturas. Su única esperanza es la grieta de confianza a la que me refería antes y se van a poner a trabajarla. Pero si se leen los resultados con calma hay que constatar que tienen un suelo sólido, pero también un techo que les limita y que jamás van a superar mientras sigan en su actual discurso catastrofistas y anti nosotros (PNV). Para ellos, con esta participación, ver que no nos caíamos ha sido un gran disgusto. Así lo constaté hablando con algunos apoderados suyos que, espantados, decían que contra nosotros había poco que hacer. Los más conscientes, como tenemos que hacer nosotros, lo celebrarán, pero non tropo”.
Mi amiga -la única mujer del grupo- que pernocta a orillas del Bidasoa y que conoce muy bien el mundo en que se mueve, le dio un espectacular repaso a una eufórica Maialen Iriarte tras el discurso de la noche electoral:
“Y terminamos por hoy… ‘Los valores que EH Bildu representa son los valores que van a traer el cambio para empezar a construir un nuevo país…’ (decía Iriarte). Vamos a ponernos serios, fuera soflamas: de un lado, Euskadi no es una falacia a la espera de que venga nadie y la redima y de otro. EAJ lleva construyendo país, con responsabilidades de Gobierno -primera fuerza una y otra y otra vez- desde hace 40 años, por ceñirnos únicamente al tiempo post-dictadura, franquista digo; ese tiempo en el que, mientras tanto, sus mayores de usted, Sra. Iriarte, jaleaban las acciones de ETA -dictadura donde las haya- o se sometían a ella. El terrorismo de ETA, y usted lo sabe a pesar de que ahora toque hacer como que no, ha supuesto además de un horror desde cualquier perspectiva humana y personal, la principal rémora, un lastre demoledor, para el desarrollo, el avance de Euskadi como sociedad y como nación… ¿de qué valores nos habla??? ¿de qué nuevo país??? Tengan la dignidad de llamar a las cosas por su nombre y, llegado el caso, los conversos a la puta cola. Que a algunos, y algunas, ya les vale…”
Y mi amiga durmió toda la noche de un tirón.
Muchas cosas bien y sin embargo…50.000 votos menos con abstención de record.
Autocrítica ?… ni está ni se le espera
JELen agur
Con es abstención, es menos relevante el número de votos absoluto.
En cierta manera el buen resultado del Bildu no lo es tanto.
Primero por el resultado de PNV que es el mayor problema histórico del MLNV (y lo seguirá siendo) y el segundo porque no consiguen superar un techo que parece que se les va a venir abajo (probablemente de ahí su euforia).
Su estrategia ha sido promover el miedo a salir a votar y, simultáneamente, sacar el cornetín legionario para mandar a todos a las urnas. Esto les funciona. Pero es pan para hoy y hambre para mañana.
Autocrítica de quien?
Si se hubiera alcanzado la participación de otros comicios como bien pone antes, se habrían conseguido 34-35 diputados y Bildu caído a 19-20 o menos.
Está claro que Gipuzkoa es nuestro reto. Con los maravillosos nacionalistas que ha dado Gipuzkoa… Pero es que ahí, el cornetín legionario se oye con fuerza.
EAJ-PNV, con 2 legislaturas en la espalda y entrando en una tercera, teniendo en cuenta:
.- El desgaste que supone estar de cabecera, a las duras y a las maduras.
.- El vuelo incesante de los buitres del MLNV (EHBildu, ELA, LAB … Ahal dugu) continuamente al acecho y del trío rojigualdo; PP, Cs, Vox.
.- El aprochamiento sin escrúpulos por parte de la oposición de tragedias como Zaldibar, la pandemia, … .
.- La difícil tarea de combinar exitosamente la gestión económico-social y la pandemia.
Es quien más garantías nos da a TODA la sociedad de salir airosos de tiempos que prometen ser muy dolorosos y difíciles.
Va a ser que ahora perder 50.000 votos es ganar
Y ganar 23.000 votos es perder.
Ver…para creer
Ganar el PNV mayoría absoluta con el PSOE es ganar. Perder votos en coalición con Podemos que pierde más de lo que Bildu gana es perder. ¿O es que bildu iba a gobernar solo?
JELen agur
Es indudable que Bildu ha tenido buenos resultados. Pero hay que ponerlo en contexto. Y dar las razones que orientan la evolución previsible en el futuro.
Bildu va a continuar con su deformación interesada anti-PNV con su fortaleza en la oposicion. Pero oposición minoritaria frente a un gobierno que ahora sí consigue mayoría absoluta. Mayoría absoluta a pesar de que sin duda han sido perjudicados por la abstención.
Bueno, cada uno ve el vaso como le interese, sobre todo de cara al público. Pero internamente salvo que algo no previsible ocurra, el castrochavismo aberchale y no aberchale ha tenido un resultado preocupante. Para ellos. Porque aún con 50.000 votos menos, hemos aumentado nuestra presencia institucional. Que es donde queremos estar. En las instituciones.
Aquí, el que tiene que poner la carne en el asador socialista, es el PSE que si se descuida, le comen la tostada por la izquierda.
De momento, confianza del pueblo en la gestión de 4 años y mantener esa confianza para el futuro. La ciudadanía exige honestidad, equilibrio y estabilidad. Los de enfrente sin posibilidad de acción institucional, activarán la presión callejera.
La profunda soberbia del PNV les traerá consecuencias durante toda la legislatura. Ortuzar predice que «EH Bildu irá a una oposición destructiva tanto en el Parlamento como en la calle». Adjudicar a EH Bildu desde ya toda la resistencia a sus anunciados recortes será su perdición
Los partidos del gobierno (PNV y PSE) han perdido 54.000 votos, y es el peor resultado en votos para el PNV desde el 1994. Yo creo que tiene que ver con lo que ha pasado en este país durante los últimos meses»
¿Cuántos votos han perdido los partidos de la oposición (Bildu y Podemos)? Como decía San Agustín, si me miro no soy nada pero si me comparo…
Bildu va encaminada a seguir la misma línea de oposición destructiva sin desmayo y sin aportaciones positivas. Cuatro años más. Ocho años más… Incansables en lo negativo.
JELen agur
Sí, sí….
50.000 votos menos.
Pero pretender comparar semejantes comicios atípicos, con todos los previos normales, es pretender hacerse trampas al solitario.
Me conviene destacar 50.000 votos menos en mis adversarios? Pues vale. Pero ya sabes porqué ha sido y qué es lo que va a ocurrir en el futuro.
Para el PNV no solo es presente es un premio del ciudadano. El futuro es aún más halagüeño a poco que podamos hacer las cosas bien y las actitudes castrochavistas no cambien. Y los comicios sean más normales.
Lo que es totalmente incierto es que 50.000 votos menos tenga la lectura de un castigo electoral al PNV y premio al adversario que es lo que pretende insinuar Bildu. Se queda con las ganas.
Anasagasti, dónde estabas cuando tu partido, el PNV -junto con el PSOE y PP- se ha negado a declarar como personas “non gratas” a la “familia real” española, la misma que te sirve para utilizarla para aparentar ser un “rebelde” con causa?
Sin embargo, Patxi Ruiz, el asesino de Tomás Caballero, es una persona muy grata a la izquierda abertzale. No digamos nada del secuestrador de Abaitua, Arnaldo Otegi. A esos ongi etorri de honor.