Gabriel Otalora

love_bigger_than_moneySEN es considerado el rostro humano del economista y uno de los más influyentes pensadores contemporáneos en temas de desarrollo ligado a la economía y a la justicia social. Hablar de “economía del bienestar” es casi como hablar de Amartya Sen, porque ha demostrado que la miseria y las desigualdades son evitables. De sus reflexiones surge la demostración de que el hambre no es consecuencia de la falta de alimentos sino de las desigualdades injustas en su distribución.

La muerte fue una constante en su niñez a partir del recrudecimiento del conflicto entre hindúes y musulmanes, poco antes de la partición entre India y Pakistán. Cuenta él mismo que durante su adolescencia en Bangladesh fue testigo de escenas de violencia extrema nacidas de la pobreza, lo que le hizo tomar conciencia de los efectos de una economía injusta.

Sus investigaciones sobre la prevención de la hambruna y sobre las injusticias enormes evitables, que trabajó desde la ética práctica, son memorables. Pionero en los estudios socioeconómicos sobre las causas de la pobreza y sus mecanismos subyacentes en las zonas más desfavorecidas de la Tierra, se mantiene de actualidad ante los millones de seres humanos famélicos abandonados a su suerte. Cuando él tenía nueve años, la hambruna que asoló Bengala provocó tres millones de muertos ante la pasividad de los ingleses, que no hicieron nada hasta que la prensa pudo librarse del embargo informativo. Su actitud recuerda a Aristóteles en el sentido de pretender integrar los dineros en la ética; y a Kant por el imperativo legal de reparar una injusticia cuando se tienen medios para ello.

Las hambrunas más graves siguen sin tener ninguna relación con las variaciones en la producción agraria o el número de población de la Tierra, lo que deja en evidencia a los muchos malthusianos que insisten en frenar la natalidad pero sin atreverse a decir por dónde empezamos: ¿Por África subsahariana? ¿Por los países que más consumen derrochando? No sirve medir el progreso a partir de los fríos números de los PIB estatales o de otros parámetros del crecimiento, la renta o similares. Estos datos, por sí solos, no indican desarrollo. Las investigaciones pioneras de Sen cambiaron las percepciones y el fundamento de un boom económico: con frecuencia, los pobres no reciben nada aunque aumente el PIB. “Y un boom económico que no llega a la mayoría es frágil”.

La visión debe ser más amplia porque el desarrollo humano no se preocupa tanto por los productos y bienes que se poseen sino por el tipo de vida que logra la gente: cuánto tiempo vive, su calidad de vida, si son pobres, analfabetos… este tipo de cosas. Los ingresos se toman en cuenta, pero como un factor más de entre otros muchos que se utilizan en la elaboración de las políticas económicas.

La pregunta fundamental de Amartya Sen es cómo identificar la injusticia reparable en lugar de teorizar sobre la justicia perfecta. Lo que cuenta es el esfuerzo que podría representar un avance de la justicia: contra la opresión (“la esclavitud o el sometimiento de las mujeres”), contra la negligencia médica sistemática (“la ausencia de facilidades médicas en regiones de África o Asia, o de la falta de cobertura sanitaria universal”), contra la tortura, contra la tolerancia silenciosa del hambre crónica…

Una conclusión evidente es que la pobreza es una forma de esclavitud por la incapacidad de las personas para satisfacer sus necesidades más básicas, de nutrición, salud, vivienda, educación, participación social y desarrollo humano. Así, reducir la pobreza tiene que ver con devolver a las personas su propia capacidad de autodeterminación. En su insistencia para reformar la economía, Sen hace años que propuso una revolución filosófica bajo el nombre de “capability”, capacidad o capacitación de cada persona para convertir sus derechos en la libertad real de ejercerlos. Esta propuesta fue la que le valió el Nobel de Economía. El término “capability”, tan importante para Sen, es muy cercano al “dynamis” que utiliza Aristóteles, que en inglés se traduce por “capacity”.

Estamos ante un revolucionario aporte en el desarrollo de indicadores económicos y sociales. A partir de su concepto “capacidad”, se evalúan las posibilidades que tienen realmente los individuos para ejercer su libertad y se ve si disponen de medios para obtener los bienes primarios que todos deberíamos disponer para alcanzar un mínimo nivel de bienestar. Una persona discapacitada -por ejemplo, con parálisis cerebral- no tiene las mismas posibilidades que una persona sin minusvalías con los mismos ingresos y sin ayudas complementarias. En las hambrunas de Bengala, los campesinos murieron de hambre porque no eran libres para alimentarse o escapar de la muerte. Un gobierno, por tanto, debe tener como objetivo obligatorio la creación de dichas condiciones. Y tiene que ser juzgado en función de las capacidades concretas de sus ciudadanos que logran desarrollar en la práctica para ser o hacer algo.

Las malas prácticas han convertido la alimentación en una inversión especulativa más, los precios son altos y fluctúan por intereses financieros ajenos a cualquier otra realidad. Estamos en un sector para nada liberalizado, sino todo lo contrario: un sector sobreprotegido, subvencionado y manipulado en el sentido de que no hay un mercado realmente libre para los productos del Tercer Mundo en manos de inversores transnacionales. Los países más necesitados no piden subvenciones -como ocurre con los productos de EE.UU.- lo que piden son mercados libres para sus productos.

En la misma línea, el desarrollo sostenible es otro objetivo fundamental de Amartya Sen si lo que se quiere es lograr esa justicia que permita esa libertad de trabajar para la subsistencia desde un reparto equitativo al menos en los mínimos vitales. El cambio necesario consistiría en pasar del mero crecimiento económico al desarrollo de verdad que logre el equilibrio de los objetivos sociales, económicos y ambientales. En otras palabras, el desarrollo, para serlo de verdad, debe conjugar eficiencia económica, equidad social y preservación medioambiental.

El profesor Sen es un ejemplo de insistencia en preguntarse cuestiones de valores humanos que son ninguneadas en los grandes foros económicos. Pero es posible una economía humanitaria, como lo demuestran sus estudios sobre las hambrunas, las economías del bienestar, las fuentes de la pobreza y la desigualdad de género. Sus investigaciones chocan con los neocons y teocons, que prefieren ignorarlas porque sitúan al individuo en el centro de sus preocupaciones, lejos de todo dogmatismo utilitarista. Por eso me he alegrado del interés que suscitan las nuevas voces que inciden en el mensaje de Sen, como Gaël Giraud o Thomas Piketty. Y de que Angus Deaton, otro medidor de la pobreza mundial y experto en el verdadero desarrollo económico, fuese el ganador del Premio Nobel de Economía 2015.

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29 comentarios en «¿Es posible humanizar la economía?»

  1. Claro que si, contratando portugueses y rumanos.

    Hay que tomar nota de la Dipu de Bizkaia !

  2. Pierdan cuidado , nunca verán a Amyrta Sen en los foros de nuestros plurales medios de comunicación. Ahí solo tienen cabida , las veinticuatro horas del día , todos los días , los economistas de la teología neoliberal y su eslogan favorito , puesto de moda por su heroína , Margaret Thatcher:
    There is no alternative.

  3. Los currelas vascos pueden trabajar y cobrar «mentalmente» desde su casa mientras los rumanos y portugueses lo hacen fisicamente.

    La independencia mental vasca da para eso, y mas.

    Y el humanismo hamaikabaturro tambien.

  4. Sin cooperación , con el individualismo más feroz instalado en cada individuo , directos a la extinción.

    Homo homini lupus

    Qué poco hacemos para cambiarlo.

  5. Bueno Liztor, si somos politicanente burujabeak, por que no serlo tambien economicamente?

    Basta con una sesiones de yoga…

  6. Ejemplo real en el primer mundo:

    Érase una vez un aplicado estudiante que quería ser admitipo en un conocido colegio de pago de la zona. Presentó el papeleo y todo era correcto. La mensualidad a abonar en el colegio era, por decir una cifra, de 120€.

    Sus padres, que vivían en un piso de renta antigua a cambio de mantenerlo en unas mínimas condiciones, le negaron la posibilidad puesto que no disponían de medios. El chaval no fue al colegio pero sus padres continuaron alquilando diariamente dos películas en el videoclub de la zona a una media de 2€ por película.

    Cuando devolvieron el piso lo devolvieron destrozado, dejaron un grifo abierto y pretendían dejar todos «sus muebles», etc… en él porque no era suyo. Además de haberles cobrado una renta ridícula, haberles sacado de más de un aprieto y buscado un trabajo para el hijo… se han enfadado y la dueña de la vivienda quedó por la mala. Personalmente he aprendido la lección.

  7. O del Pp? Y el hijo a lo mejor de Bildu… casos más raros se han visto incluso en «la ETA».

  8. Pero lo mas logico es que fuera del PSOE y que como de costumbre, pues eso…que os la han endiñao.

  9. Nunca lo sabremos, las ensoñaciones y conjeturas agrestes son propiedad exclusiva de la baturrada. Jamás he tenido la omnisciencia necesaria para saber qué es lo que piensan los demás.

  10. Ni lo que piensan los demás ni saber qué es lo que va a pasar. De los pactos con el PSE/PSOE se puede tener una probabilidad del resultado de los pactos con la baturrada una certeza.

    Por la caridad viene la peste.

  11. Bueeeeeno vale, entonces lo mas probable es que fueran baturros gallegos de HB, ya te lo dije al principio.

  12. Repito al contrario que la baturrada ni soy omnisciente ni tengo obsesión alguna contra «el enemigo». Enemigo, en el caso de la autodefinida izquierda ficticiamente abertzale, que no es otro que el PNV (ilusos quienes creen que es el Estado Español).

    Para muestra un botón, se trate el tema que se trate en este blog os marcáis un puerta a puerta gipuzkoano. Es decir expandir, sea o no necesario, vuestra porquería por doquier.

  13. ¿Sesiones de Yoga?, algunos con los reveses electorales que tienen últimamente seguro que les vendría bien.

    Polideportivos, hospitales, carreteras, museos, ikastolas …. es lo conseguido por los burujabes. La acción de los revolucionarios: cientos de asesinatos, miles de personas a las que se han conculcado sus derechos humano; todo ello bajo la nueva forma del viejo y casposo socialismo científico, la independencia socialista.

  14. Polideportivos como el de Leioa, hospitales como el de Urduliz, carreteras como la variante desierta de Bilbao, museos…Balenciaga?, coches eléctricos, incineradoras….el PNV ha hecho cosas bien, incluso muy bien, pero también cosas mal, incluso muy mal.

  15. La baturra da, por contra, todo mal. De hecho únicamente acierta cuando rectifica.

  16. Pero mucho peor que el ladrillo de Abian son las paridas que se inventa la agencia de vividores jeltzale para entretenernos otros 4 años.

    Interdependencia
    Independencia mental
    Nuevo estatus
    Nacion foral
    Pase foral

    Con esto tenemos entretenimiento para otros 4 años. Despues ya se sacaran algo de la chistera…

    Teniendo a estos jetas vividores a costa de la causa, para que queremos mas ?

  17. «Jetas vividores»?, el nivel argumentativo va en aumento.

    Solo le falta llamarles feministas, aunque tal vez sea más acorde llamarles mujeriegos.

    Les recomiendo este video del mantela vasco. Habla de lo importante que es acabar con la independencia mental burguesa y del error que se comete llamándoles nacionalistas.

    https://www.youtube.com/watch?v=3H1Gkuw9S9Q

  18. Con ser vascos ya nos vale, por encima de etiquetas que nuestros amados lideres politiquillos nos quieran colgar, bien sean nacionalista, abertzale, independentista o cual fuere.

    De todas formas si lo del PNV es nacionalismo….mejor no seamos nacionalistas.

    Y eso de «Nosotras»…anda Arnaldo, tomate un cafe ….ya solo falta que nos etiqueten el sexo tambien.

  19. Políticas de identidad arma del neoliberalismo para seguir precarizando a la gente.

    En el pais vasco sabemos bien que es verdad;

    » El resultado es lo que Zaslavsky ha denominado una “explosiva división del traba.jo”, en la que la élite autóctona copa las posiciones dominantes. Por eso, sostiene Kaldor, pese a la omnipresencia de las invocaciones al pasado esta nueva política de la identidad responde a factores contemporáneos. En particular la globalización neoliberal. La política de la identidad va asociada con la “economía paralela”. Corrupción, especulación y delitos financieros forman parte del lote de las rece.tas neoliberales. Como el desempleo y la des.igualdad. Las redes de corrupción se han dado cuenta de la funcionalidad del lenguaje de la política de la identidad para construir alianzas y legitimar sus actividades. Los oasis sociales no medran sin cloacas.»

    Ya lo siento,eh.

  20. Curioso el análisis de MARTÍN ALONSO, vale para atacar a los intelectuales Catalanes pero no vale para denunciar el silencio de la intelectualidad española ante la imposición «natural» de la identidad del imperio.

    El españolismo neoliberal es igual de patriotero y populista que el socialismo del siglo XXI

    Por cual de los dos lo sientes?

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