Joxan Rekondo Pyrenaeus-eko Talaian
El Plan de Paz y Convivencia del Gobierno Vasco parte de sanos fundamentos. El primero, que el eje en torno al que busca desenvolverse sea la sociedad vasca, a la que considera muy capaz en materia de principios éticos, cívicos y democráticos. Asimismo, la idea de que no se puede construir el futuro sin clarificar el pasado de violencia y vulneraciones de derechos humanos. Finalmente, que hay que lograr la desaparición de esa violencia quebrantadora para llegar a la normalización social y consolidar la convivencia.
Junto a esas ideas clave, no es muy acertada la imagen de un ‘ahora’ apremiante como oportunidad para invertir en convivencia. El apresuramiento inversor desemboca en que, en muchos tramos del documento, predomine la superficialidad conceptual del consenso sobre la profundidad ética de la clarificación. De tal manera que la búsqueda de consensos puede llevar a limitar el acceso a la verdad completa de las responsabilidades. Este es el gran problema del Plan, la subordinación del resto de los principios al consenso que necesita para ser operativo.
Algo le falta al Plan del Gobierno para responder plenamente al requerimiento parlamentario de articular una memoria no neutral. Posiblemente autolimitados por conseguir que todas las tradiciones políticas vascas compartan microconsensos, o impelidos por una pretendida neutralidad institucional, la demanda parlamentaria no llega a consumarse.
Las declaraciones del secretario general de Convivencia, Jonan Fernández, no ayudan a la mejor comprensión social de esta dimensión del Plan. Es desconcertante que recurra al ejemplo del franquismo para significar la imposibilidad de interpretaciones compartidas. ¿Quién absuelve a ese régimen en este país? La condena social es tan generalizada que las pocas voces que hoy excusarían tal dictadura son inaudibles. ¿Puede negarse que sea ésta una situación de interpretación social compartida?
Afrontar la paz y la convivencia no es tramitar un expediente administrativo. Tal y como determinó la ponencia de paz, no cabe la neutralidad. Para quienes gustan de precedentes (y por acudir a la justificación a la que se aferra Jonan Fernández), podemos recordar que la Ley española de la Memoria Histórica del 2007 condena explícitamente el franquismo. O que la Ley catalana del Memorial Democrático (también del 2007) subraya el origen del sistema democrático vigente en la memoria democrática y en el antifranquismo. De la misma manera, el Gobierno Vasco simboliza en sí mismo un principio activo de no neutralidad, tanto en relación con el alzamiento y la guerra contra la república y la posterior dictadura franquista, como por su oposición abierta a las violencias ilegítimas terroristas y antiterroristas.
El Plan prevé la creación de un Instituto de la Memoria que gestionará el patrimonio colectivo de memorias democráticas, desde la última guerra hasta nuestros días. ¿Se conformará este patrimonio sin un relato político debido a que se cree que no son posibles las interpretaciones compartidas? ¿Permitirá el Gobierno Vasco que la legitimidad de su trayectoria quede cuestionada en el marco de la Memoria Democrática de nuestro país, por la equiparación con otras interpretaciones subjetivas que escurren sus responsabilidades en el inevitable curso del enfrentamiento?
El problema del Plan, interpretado a la luz de lo que declara el responsable directo de su gestión, es que no aclara nada en relación con el alcance de la verdad a la que quiere acceder. Verdad que se quiere que componga la memoria compartida, inscrita en la cultura democrática del país, y que podrá ser expresada mediante un relato dominante. Verdad que deberá corresponderse con los hechos, pero que será más pobre o más rica para fertilizar el ‘nunca más’ que busca el documento. Será más pobre si la verdad demandada se queda en un inventario de daños lamentables, y más rica si se incluye la exigencia de que los responsables de los crímenes admitan la injustificabilidad de los mismos. Compromiso de reconocimiento que debería obligar más a los colectivos (sean ETA o el estado) que decidieron cometerlos que a los individuos concretos que los ejecutaron.
Me repito, hay que tener el rostro como el hormigon armado para tratar de colar que la «memoria neutra» es la que exige que los otros, solo los otros, renieguen de si mismos.
Bien, eso no va a pasar. Ahora que hacemos?.
Es normal que Victor se repita, la memoria es un tema peliagudo, bombas, muertes, secuestros, todas las fechorías de los héroes presos de la izquierda abertzale puestas ahí, a la vista, para que el mundo pueda juzgar lo que la izquierda abertzale ha traído a este país, sangre y encabronamiento.
¿Renegar de sí mismos? Claro ¿cómo va a renegar la izquierda abertzale de su patrimonio de crímenes? Eso debe de ser pedir peras al olmo.
La izquierda abertzale tiene un gran problema de clarificación de principios humanos básicos y no debemos frenar el desarrollo de nuestra sociedad porque estas personas todavía no sepan reconocer los derechos humanos más elementales. Pero nuestro pueblo, que rechaza de forma tan generalizada el franquismo como a ETA, necesita una memoria, donde todos estos estén en su sitio.
JELen agur
Nosotros seguiremos haciendo.
La IR es la que tiene el problema. Parece como si la IR quisiera hacer creer que es un problema compartido, co-responsabilidad de todos. Y esto no es así. La dictadura la vencimos, la tortura ha quedado desacreditada y tambien anulada. Estos son pasado. En el presente quedan retazos (el MLNV) de esa época siniestra.
Es la IR la que tiene que resolver su problema interno.
¿Que qué le van a decir ahora a los presos, a los jóvenes que idealizan esa lucha descerebrada?
Todo un papelón para un grupo que perdió el norte desde el momento mismo que se inició.
me parece bien el intento de urkullu pero me temo que va a ser altamente contaminado por las partes revanchistas españolas.
el mejor plan de paz es el paso del tiempo. estos planes de paz, suelos eticos, etc… sirven para lo contrario: la gresca diaria y el enconamiento. ademas me parece muy egomaniaco y pretencioso por parte de la clase politica pensar que generaciones venideras van a tener presente un escrito en forma de plan de paz que unos politicos de despacho vayan a emitir un buen dia. vete a saber que cosas pasan en un futuro que pudieran hacer parecer a ETA unas ursulinas.
Es increible como en vuestra obcecacion contra la Izquierda abertzale llegais a alinearos con el ministro de interior de España en su cruzada contra el Plan de paz y convivencia del gobierno de Lakua. Tambien apoyareis la reforma de la LOMCE que pretende adoctrinar al alumnado con «Historia del terrorismo»?.
Siempre con el mismo rollo, que estamos con el ministro del interior de España, un señor al que ni conozco ni he leído sus opiniones ni Victor las cita. Ese señor a lo mejor dice verdades igual que las puede decir la propia Laura Mintegi. Lo importante no son las personas que las digan sino las razones.
Me repito: es normal que la izquierda abertzale, con esa ejecutoria, con esas «ganancias» para Euskadi, con ese reguero de cadáveres que le acompaña y con cientos de presos en la cárcel, no quiera recordar el pasado, que le dejaría fatal. ¿Es esto lo que dice el ministro del interior?
Txilibitu no se como esperas que tome en serio el analisis politico de alguien que ignora las declaraciones del gobierno de España. Chico, no se, lee mas.
JELen agur
Sólo faltaría que por dar satisfacción al MLNV tuviéramos que hacer un Plan de Paz chapucero que a la larga nos desacreditaría.
No.
La IR es la que se tiene que mover lo que no ha querido hacer en 40 años. Si no la hace, se sublimará solo. Y quedará en el recuerdo como una pesadilla de unos hispanizados marxistas que en nuestra tierra quisieron implantar por la fuerza su risueño ideal totalitario.
Victor, no se como esperas argumentar sin aportar otras razones que el ministro del interior de España dice algo que tu no citas.
Pero me repito, no me extraña que gente como tu y como la izquierda abertzale no quiera ni hablar de la memoria y del recuerdo de los tiros, bombas y tal de la izquierda abertzale. Aparte de los cientos de presos que gimen en el trullo después de haberlos embarcado en una aventura como esa.
Txilibitu ya has utilizado esta misma tactica antes, te pongo el enlace, te emperras en alguna coma, debatimoslo una hora y acabamos perdidos. Paso tio.
Tanto Rekondo como tu no quereis avanzar en ningun consenso de pacificacion, tanto tu como Rekondo y su amigo el ministro Fernandez pretendeis una convivencia basada en l apaz de los cementerios que parta de un relato en la que habia españoles muy buenos y comunistas muy malos. Un potaje que no se traga nadie, aunque lo intenteis meter con calzador a los chavales de la mano de Wert.
Menos cuento, Victor, cita las palabras del ministro del interior donde diga lo que yo digo o lo que diga Joseba. Ya es el tercer/cuarto correo en el que no dices otra cosa de que defendemos la postura de ese hombre. Con lo que se ve claro que lo tuyo no es más que otra táctica habitual de pringar al contrario sin aportar razones.
Y luego descalificas a REkondo y a mi sobre no se que consenso de pacificación. Sin embargo, ¿Josu Ternera y toda ETAm está a favor de un consenso de pacificación? Los violentos que van de buenos, esa es la copla que oigo en tus palabras.
¿Paz de los cementerios? De los cementerios que ha llenado la izquierda abertzale, querrás decir. Hay que recordar a los verdugos y a las víctimas y llamar a las cosas por su nombre y con eso no estás ni estais de acuerdo, Victor, es vuestro problemón, de empezar a ser personas normales y no unos fanáticos obcecados que niegan la realidad de lo que han hecho.
Victoriii quete quede claro una cosa. Los crimenes cometidos bajo la estrategia político-militar de la Izquierda Radical (MLNV) son de su exclusiva responsabilidad. No nos repartiremos entre todos el peso de los cientos de muertos de ETA.
JELen agur
No cabe ni cabrá ninguna duda que nos posicionaremos en contra de los grupos que utilizaron la violencia criminal.
En eso no hay dudas. ¿Wert coincide con nosotros en eso? Mejor para él. A lo mejor es más listo de lo que parece.
Pero no por eso se establece confusión ninguna entre él y los nacionalistas. Por lo visto, confusión que tienen y pretender extender los militones de la IR. Pues lo teneis claro.
Lo dicho, lo mismo mismuito que el ministro que deja bien clarito que el centro ese por la memoria sera no un eslabon de una cadena iniciada en 1936, no, sino un centro de parte, en definitiva otro mas monumento a los caidos.
Esta claro. La IR es responsable de sus actos, incluida la estrategia político-militar. Por tanto, la IR, solita,cargará sobre sus hombros los cientos de asesinatos cometidos por ETA.
¿Lo mismito que dice el ministro? ¿Pero que dice el ministro? Victor no nos lo aclara. El eslabón de una cadena iniciada en 1936… ETA comienza a matar en 1968. Menuda caradura tienen estos blanqueadores de crímenes de la IA. No es de extrañar que el tema de la memoria les meta repelús.
Los exintegrantes de ETA y componentes de la vía Nanclares Rafa Caride Simón, Carmen Gisasola, Joseba Urrusolo Sistiaga y Andoni Alza aseguran en un artículo publicado en el último número de la revista de Gesto por la Paz Bake hitzak que «ETA debería reconocer el sufrimiento causado, pedir disculpas en nombre de sus militantes, escenificar unilateralmente su desaparición y dejar que la izquierda abertzale gestione el tema de los presos». A su entender, hacerlo de esta manera «facilitaría el posicionamiento de los propios presos».
En el artículo conjunto aseguran que «lo más sensato y efectivo sería que la izquierda abertzale asumiera su responsabilidad e hiciera una reflexión profunda, sincera y crítica sobre lo ocurrido». Creen que «continuar haciéndolo a pequeñas dosis, con pequeñas frases calculadas, es un insulto para los que lo han sufrido y supone más tiempo de cárcel para los presos».
ESTO LO DECÍAN EN NOVIEMBRE DE 2012.