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La receta de jarabe de palo contra el nacionalismo de la Junta Carlista de Guerra de Navarra de septiembre de 1936

Fernando Mikelarena bere blogean

JuntaDeGuerraCarlistaEn una entrada anterior hablamos de la participación navarra en la represión acaecida en Gipuzkoa en el otoño de 1936. Como se recordará, en aquella entrada se apuntó a que con posterioridad a la toma de San Sebastián el día 13 de septiembre y durante ese mes y los dos meses siguientes se producirían las cifras más altas de asesinatos por parte de los ocupantes franquistas. Si entre julio y septiembre los franquistas asesinaron en Guipúzcoa a unas 150 personas, muchas de ellas tras la entrada en Beasain, Oyarzun y Tolosa, en octubre fueron fusilados otras 150 y en noviembre unas 90 personas. De 25 fusilados en diciembre se pasó a una decena de fusilados al mes en los meses siguientes, con oscilaciones al alza en algunos de ellos, pero sin superarse nunca la treintena de asesinados mensuales.

En aquella entrada se manejaron testimonios, como el del doctor Gabarain, que podían haber hecho pensar en una mayor responsabilidad falangista en la represión registrada. No obstante, allí también había indicaciones acerca del importante papel desarrollado por los requetés en dicha represión. No hay que olvidar que, al igual que la Falange, los carlistas también dispusieron de centro de detención propio en San Sebastián, tal y como se citaba en aquel artículo. El mismo Arteche conoció a un requeté que participó activamente en los piquetes, según narra en su obra El Abrazo de los Muertos, siendo sus referencias a dicha persona reproducidas en aquel texto nuestro.

Recientemente hemos localizado un documento que Miguel Sánchez Ostiz cita parcialmente en su última novela El escarmiento (Pamplona, Pamiela, 2013) y que algunos apologetas del Requeté, obligados por su fidelidad a la militancia paterna, han obviado. Ese documento es un informe elevado el 24 de septiembre de 1936 por la Junta Central Carlista de Guerra de Navarra “a los señores generales y jefes de la Junta de Defensa Nacional de Burgos”.

La Junta Central Carlista de Guerra estaba presidida por Joaquín Baleztena Azcárate, presidente de la Junta Regional de la Comunión Tradicionalista; pero su auténtico director era el vicepresidente, José Martínez Berasáin, director del Banco de Bilbao y responsable de toda la actividad carlista en Navarra durante la República y en el verano y otoño de 1936, al ser el verdadero «hombre fuerte» en la nueva situación, según se desprende de la documentación conservada a pesar de los expurgos sufridos. (…) Desde dicha Junta Central se conformaron también Juntas de Merindad. Además de encargarse de las cuestiones ligadas a la movilización carlista y a las tareas relacionadas con la participación de la Comunión Tradicionalista en el golpe de estado militar, la Junta Central Carlista de Guerra asumió papeles represoras, impulsando la limpieza política efectuada por los carlistas en la propia Navarra.

El informe que hemos localizado demuestra que la Junta Central Carlista de Guerra de Navarra, no contenta con la represión llevada a cabo en Navarra (y que para el 24 de septiembre se había llevado consigo centenares y centenares de vidas, sobre todo de votantes de izquierda), se animó a aconsejar en la fecha indicada sobre la conveniencia de adopción de una política de mano dura contra el nacionalismo en Gipuzkoa. Recordemos que para entonces se había conquistado San Sebastián y que la mayor parte del territorio guipuzcoano estaba en manos franquistas. El Punto F) relativo a las medidas a adoptar en el ámbito de lo político decía lo siguiente:

“Con el mayor respeto tenemos que declarar que en Guipúzcoa se está siguiendo una política de lenidad tan acusada que constituye una alarma para las gentes que han padecido los horrores rojos y nacionalistas. Si esa política responde a una norma directiva con vistas a hacer más fácil la rendición de Vizcaya, esperamos que cuando ésta se logre se rectificará radicalmente”.

En la Nota 9ª del Anexo se ahondaba en la cuestión y se aconsejaba la conveniencia de la aplicación de una dura represión del nacionalismo vasco en Gipuzkoa:

“La dureza del castigo aplicado en Andalucía, Extremadura, parte de Aragón y parte de Castilla, contrasta con esa lenidad apuntada. Pero ha de advertirse que el nacionalista ha atentado de manera más directa a la Patria y de modo más reflexivo que los rojos que defendían un estado de derecho que les favorecía y no tenían en su ánimo ir contra la Patria misma, sino únicamente contra un orden de cosas representado por el Ejército, que no les convenía. Mientras que los nacionalistas, que son los que han dado lugar a la resistencia que ha motivado la guerra, han pretendido con su alianza criminal aniquilar a la Patria. En vano se dirá que han evitado muchos males, porque esos que han evitado y los que no han podido evitar, hubieran dejado de suceder si en el primer momento hubieran cumplido sus obligaciones de católicos y de españoles. La política con los nacionalistas debe ser la de la aplicación de las penas del Bando a los que estén incursos en él y aquéllos a quienes no les sea demostrada su participación activa pero que sean destacados nacionalistas, debe serles impuestas penas de orden económico y destierro”.

No en preciso insistir en que dicho llamamiento no fue en vano. Así, por ejemplo, según los datos aportados en la obra dirigida por Mikel Aizpuru, «El otoño de 1936 en Guipúzcoa. Los fusilamientos de Hernani» (Irún, Alberdania, 2007), de más de cuarenta fusilados en el cementerio de Hernani a las semanas siguientes a la redacción del informe mencionado consta su militancia y sus simpatías hacia partidos o sindicatos nacionalistas. También hay que señalar que pocos días después de redactarse el texto comentado fueron fusilados cerca del puente de Lesaka los tres vecinos de Ituren, todos ellos militantes del PNV, Pedro Gorostidi Imaz, Miguel Hualde Gorosterratzu y Juan bautista Iriarte Azpíroz. Por su parte, la Nota 11ª del Anexo se refería al clero nacionalista.

“Especialmente urge actuar contra el clero nacionalista; contra los que estén comprendidos en el Bando, imponiéndoles sin contemplación las penas, contra aquellos otros, destacados, pero que no se les demuestra su actuación con los rojos desterrándolos. Para no dar pretesto a protestas que puedan perturbar las conciencias de algunos timoratos y en todo caso porque en conciencia debe hacerse, bueno será dirigir un escrito a Roma declarando que en extricta aplicación de las leyes y dentro de la excepcional gravedad y urgencia de la guerra hay que actuar en juicios sumarísimos (subrayado en el original) contra clérigos amparados de ordinario por el fuero personal del canon 120 y que no siendo factible dirigirse a los Prelados siendo uno de estos -el de Vitoria- el que comprende el mayor número de los clérigos nacionalistas y él no ajeno de responsabilidad, no podrían solicitar la licencia canónica, que se solicita genéricamente para todos aquellos clérigos comprendidos en el Bando de guerra. La comunicación oficial suple a la petición de licencia y no puede ser lícitamente negada ésta o sea que sin esperarla se considera canónicamente autorizada la actuación judicial contra los clérigos sin lesión de ser privilegio amparar la impunidad. La comunicación a la Santa Sede reportará el bien de que cese la intriga que allí se forja contra el movimiento. A la petición de separación del Obispo de Vitoria, deben seguir otras en especial la del Cardenal de Tarragona”.

Como es sabido, la llamada al castigo del clero nacionalista de dicho informe fue prontamente ejecutada. Así, por ejemplo, en Hernani en octubre de 1936 serían fusilados los sacerdotes Antonio Bombín, Gervasio Albisu, Martin Lekuona, José Adarraga, Jose Ariztimuño (Aitzol), Alejandro Mendikute, José Otano, José Ignacio Peñagarikano y Celestino Onaindia; y en Oyarzun serían ejecutados en las mismas fechas José Joaquín Arin, Leonardo Guridi, José Marquiegui y Joaquín Iturricastillo. Por otra parte, Mateo Múgica, obispo de Vitoria, sería expulsado de España en el mismo mes de octubre de 1936. Él, junto con el cardenal de Tarragona Vidal y Barraquer y el cardenal Seguram serían los únicos miembros de la alta jerarquía eclesiástica española que se negarían a firmar la Carta Colectiva de los obispos españoles a los obispos del mundo, que se publicó el 1 de julio de 1937 y fue firmada por 48 prelados, de los que 8 eran arzobispos, 35 obispos y 5 vicarios capitulares.

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23 comentarios en «La receta de jarabe de palo contra el nacionalismo de la Junta Carlista de Guerra de Navarra de septiembre de 1936»

  1. De todos modos con los nacionalistos los franquistas fueron indulgentes. En definitiva eran católicos y de derechas, como ellos…………

  2. JELen agur

    Parece, segun la nota 9ª, que la izquierda era más próxima a la ideología del alzamiento que la nacionalista….
    Cosa esta muy repetida por mí en este foro.

  3. Los franquistas no fueron nada indulgentes con los nacionalistas a los que fusilaron, expropiaron de sus bienes y mandaron por miles al exilio. Por no hablar de la persecución del euskara y todo lo que oliera a cultura vasca por el franquismo. Hay gente del PSOE como Hamaikatimo que tendría que estar peinando canas en las FAES.

  4. Para quemajetesestospeneuveros…
    Tus palabras son dignas de los mismísimos Mola, Franco, Hitler o Mussollini. Tu odio hacia el nacionalismo vasco es tal que llegas a decir, falseando la historia, como hacen los franquistas españoles, que los carlistas fueron indulgentes con los nacionalistas en el 36.
    Que asco tener que leer esto 80 años después de eso, y tener que leerlo en un foro vasco.

  5. Magnífico artículo. Es increíble que gente como el autor del segundo mensaje de este post que ni siquiera lea lo que el artículo pone. Pone que los carlistas en ese bando dicen que hay que fusilar a aquellos nacionalistas comprometidos y a los no comprometidos hay que quitarles los bienes y desterrarlos. A continuación, hay una nota sobre el «clero nacionalista», al que recomiendan mano dura. Y finalmente Mikelarena nos da un botón de muestra de este «espíritu», como es el fusilamiento de curas por parte de los alzados. Es evidente que el franquismo supuso un plus de opresión nacional sobre los vascos que sobre todo lo tuvieron que soportar los nacionalistas.

  6. Excelente artículo en el que una vez más se pone de manifiesto que la guerra civil en Euskadi fue una guerra de vascos contra vascos.

  7. Es verdad que hubo algunos momentos iniciales en los que los franquistas fueron más «indulgentes» con los nacionalistas… pero tampoco demasiado- «sólo» cerraban sus sedes y periódicos y los mandaban a la cárcel mientras que a otros los mataban. Esto tenía su lógica puesto que estaban intentando maniobrar para que el PNV se pasase a su bando. Como el PNV no hizo lo que los fachas querían luego les aplicaron la misma mano dura que al resto, incluidos por supuesto los fusilamientos. Esto lo sabe cualquier historiador mínimamente informado. Lástima que todavía haya analfabetos que hagan caso del franquismo revisionista.

  8. Hay que tener jeta para hablar de «indulgencia» con tantos fusilados abertzales que hubo. Eres un miserable hamaikatimo.

  9. muy al contrario, fuimos nosotros los demasiado compasivos con el bando franquista. y en la transicion ya ni te cuento. aun queda pendiente un ajuste de cuentas aqui.

  10. Martin Lekuona apaiza,kulturgillea,euskalzalea,abertzalea,sozial gaietan lan ikaragarria egin zuena….putaseme españolistak erahil zuten,Errenderiko karlista kabroi batek eraman zuen Hernanira,beste apaiz euskaldun asko bezala fusilatzera,Bitartean bere arrebak ,etxetxiki Oiartzungo baserrian gertutu edo prestatutako janariak,eramatera joaten zan Ondarretako ezpetxera, bere anaia Martin han zegoela esaten ziotelako.
    MARTIN LEKUONA ETXABEGUREN apaiz oiartzuarra Agur eta ohore Aberri Berriko txoko hontatik.

  11. Oiga Fernando, osea ke la junta carlista eran unos asesinos, que querian mas sangre, mas represalias, mas fusilamientos, mas escarmiento.

    la junta carlista todos ellos o al 90 por ciento vascos, cree Vd en realidad que eran unos asesinos desalmados, una especie de estalinistas que querian acabar con la oposicion?, osea Vd con quien estaria con los fueristas o con los de la internacional.

    Cree vd en realidad que eran mas asesinos que Dolores o Santiago Carrillo,cree Vd que los democratas no fusilan y no borbandean, a la poblacion civil, cree vd que en la guerra civil, se enfrentaron los democratas contra los antidemocratas, es esa su opinion acaso.

    Cree vd acaso que un catolico, apostolico, que comulgaba antes de entrar en combate era peor que uno que mataba curas y monjas y queria abolir la propiedad privada y los fueros de Euskalerria.

    Acaso cree Vd, que en la guerra civil, se luchaba dictadura contra democracia, entonces le hago una pregunta, porke agirre estaba con unos, anicatolicos frente a otros catolicos y euskaldunes, catolicos como el, dejando aparte a moros de marruecos.

    Para Vd es mejor un socialista marxista de 1.936, que apoyo la revolucion de asturias, frente a un euskaldun, fededun, jaungoikoa eta lagi zarra, se lo pregunto.

    Saludos.

  12. Fernando Mikelarena, aporta vd unos nombres de sacerdotes fusilados aki en Euskalerria, los datos son ciertos, ahora bien, se ha preocupado vd en indagar cuantos, frailes, curas y monjas asesinaros los aliados de Agirre?,

    Creo que agirre no estaria en nada de acuerdo con esos asesinatos y fusilamientos, pero imajinese Vd que tampoco estarian de acuerdo mutxos catolikos karlistas con esos fusilamientos, de curas o no curas.

    Si denunciamos, denunciamos todo, no solo una parte.

    Lo ke esta claro es ke Agirre era un aliado del psoe, ke entonces era marxista, Largocanallero etc.

    Saludos.

  13. La junta carlista escribió lo que escribió, que había matar nacionalistas y curas nacionalistas y además había que tratarles con un rigor especial. Es lo que dice Fernando Mikelarena. No dice que los republicanos españoles y que los aliados de Agirre no mataran. Con la diferencia de que los requetés y los falangistas instauraron una dictadura de cuarenta años, cuarenta años de falta de libertad, de régimen militar, de opresión.

  14. victor te lo pregunto de otrsa forma, ke te gusta mas la democracia cubana, o la democracia alemana, de ahora,a ke lado estabas en el telon de acero. o ditxo d otra forma, a ke lado estabas en el muro de berlin, con alemania occidental o kon la stasi, de los alemanes orientales.

    ya ke haces preguntas transcendentes, que te parece que Putin apoye al regimen del gobierno sirio actual, y ke te parece ke la otan y las democracias, suministren alos sublevados, misiles antitanke, y misiles tierra aire para deriibar aviones vendidos por los rusos, al parecer pronto para ekilibrar las fuerzas, esta muriendo mutxa gente..

    Ke kieres en Siria una dictadura, apoyada por Putin, una democracia de la otan, o una teocracia de los integristas.

    Tu discurso en ke konsiste, con kienes estas, con los estalinistas de albacete, o kon los kristianos del vaticano, de albacete o de Gernika.

    Kon kienes estas

    Saludos viktor.

  15. Arrano ni una ni otra son democracias. La pregunta es absurda.
    Responde por favor a lo que te preguntaba antes y no me marees con divagaciones chorras de kristianos Kon Kapucha y estalinistas murcianos.

  16. *Avancemos en aclarar y denunciar, en AJUSTICIAR públicamente (quedará para la Historia, pues se han muerto todos en la cama) a LOS MATONES y a sus inductores, pueblo a pueblo: pura justicia, nos lo deben. En esta Navarra aún hay que ver a familiares de matones que los siguen protegiendo…sólo por ser familia (p. ej. en Larraga, inauguración de MEDIA calle para la pobre Maravillas Lamberto). Los matones tienen pendiente un JUICIO moral y el figurar en una LISTA pública de asesinos.
    *Años he trabajado con las cajas de esa «Junta de Guerra Carlista» y pudo ser facilísimo el robar o destruir documentación. Años sin fotocopiarla o/y informatizar ese tesoro. Recuerdo haber topado con un minúsculo papel, tipo octavilla, del cura de Urzainki (Erronkari), del cual no ponía su nombre: «Hoy sale para Pamplona fulano de tal-no recuerdo el nombre del delatado-. QUE NO VUELVA». (Por cierto no volví a ver ese papel).
    *Victor EUSA, el arquitecto, también tuvo la jeta de formar parte de esa macabra Junta, no se cortó. ¿Qué impulsaría a estas mentes a creerse el fuego Purificador?. O sea que no todos eran unos desgarramantas. Fijaros, Berasain, todo un banquero, haciendo y desaciendo a su antojo en aquella pequeña Iruña, como el dueño de un Saloon del Oeste.
    * En Navarra conspiraron demasiado fácil (éso hay que estudiarlo) y la legítima República fue pusilánime ante los conspiradores (p. ej. con Sanjurjo y luego en Iratxe ni p. caso al aviso del gran Fortunato Agirre, alkatea). Dejaron hacer al cerebro de todo y en su laboratorio (Mola y en Pamplona).
    * Y MATARON FACIL, en Navarra no hubo guerra, era pura retaguardia y el FOCO de los traidores, bien bendecidos ellos. Hacían instrucción en el monte (hay fotos publicadas), escondían armas en iglesias y conventos,…Fue una carnicería, como pescar en una bañera . Del asesinato hicieron incluso ESPECTACULO matutino en los fosos de la Vuelta del Castillo. Y., mediante el asesinato, podían hacerse con los bienes o tierras del asesinado. Y via libre a la violación.
    *77 años después «todos reconciliados, todos callados»…pero las cunetas llenas, tirados como perros, ¡viva esta p. democracia podrida!
    *Y a ese «Arrano» españolazo de pega le dice su monarca franquista: «¿por qué no te callas?».-

  17. Siempre nos estan contando la murga de que los crímenes de guerra los cometieron los falangistas . Eso es cierto, pero los requetés tambien los cometieron. Posiblemente en menor medida que los grupos anteriores, pero ¿que pasa con la Junta de Estella y las sacas del Tejar de Monreal?, por ejemplo. Fue el tercio móvil requeté. Benito Santesteban, de la Junta de Guerra de Pamplona, presumia de haber matado 15.000 ·rojos, posiblemente es una gran exageración pero si consta que estuvo en muchisimas ejecuciones-Tambien se dice que salvó algunas vidas..La cárcel de los escolapios estuvo en manos de los carlistas y fue un gran matadero. Eugenio Perea, capitan de requetes, en Alava fusiló montones de prisioneros. Siguen yendo de buenos, pero no. Aunque los defiendan algunos escritores que siguen deformando la realidad de aquellos hechos terribles.

  18. Tambien se ha dicho que Santesteban no dio un solo paso que no estuviese previamente ordenado por la Junta Central de Guerra de Navarra. Consta que salvo la vida de varias personas: De José Aguerre, de un directivo de la CNT al que bajo del camion cuando iba a ser fusilado porque iba a misa a con el y a otras personas de que queda cpnstancia. Santesteban era el ejecutor de las ordenes de la Junta y punto.

  19. Andreas shared a flat with my brotehr, Neil Richmond and myself in Primrose Hill in the late 60’s/early 70’s, the flat rented from Randy Bernstein who had been convicted at the Rivonia trial with Nelson Mandela. After completing a course at the London Film School he decided to record his songs with Neil, who worked as a recording engineer at Abbey road. The album was one of Neil’s first forays into producing. In about 1971/2 Andreas had a nervous breakdown and returned to Greece. He contacted Neil and myself in 1986 on a visit to London, which led to my family enjoying a holiday in his family’s flat in Spetse…..

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