Mikel Ubillos
Según informaciones periodísticas, el alcalde de Donostia ha decidido bajarse el sueldo un 3%. De 83.200 € brutos, va a dejar de percibir 2.500 €. Según sus declaraciones se trata de un gesto simbólico. Creo que en períodos de crisis, los gestos de los políticos no deben ser sólo «simbólicos», sino deben ser acciones que realmente conecten con la gente.
El hecho de bajarse el 3% más que dar a entender que él quiere compartir los costos de la crisis, puede ser interpretado como que se está mofando de los nuevos parados o de la gran cantidad de mil euristas que no llegan a fin de mes.
Un gesto de un alcalde socialista, que se cree lo de socialista, sería el hecho de bajarse el sueldo, un 50%. Teniendo en cuenta que mensualmente (repartido en 14 pagas) tiene un sueldo bruto cercano a 6.000 € (un millón de pesetas antiguas), tiene un amplio margen para no tener que apretarse el cinturón para llegar a final de mes. Un gesto así, sí sería creíble, y marcaría un hito. Lo de bajarse el 3%, al no representar para él ningún esfuerzo, es un gesto inútil, más cercano a la propaganda que a la ciudadanía.
Si realmente se quiere mojar por los ciudadanos con problemas de la ciudad, y quiere hacer un verdadero gesto, que sea valiente y nos sorprenda con una bajada del sueldo del 50%. Entonces creeré que se toma en serio lo del ahorro, porque esa bajada si le supondrá un esfuerzo, y entonces podrá solicitar a los trabajadores del ayuntamiento sin sonrojarse que ahorren lo más posible. Eso sí sería un ejemplo honorable, que le llenaría de razones ante los demás.
Yo le pediría a Odón, que sea un alcalde honorable, y no propagandístico, y que si quiere hacer gestos que los haga seriamente.
Lo k tienen k hacer Odon y otros alkalds es djar d subir impuestos. Donosti, x ejemplo, tiene el impuesto d cirkulax + karo dl estado.
Encima nos amplian la OTA (seg1 algunos koncejales dl gobierno xk los vecinos lo pidn a gritos, tokatlas!) y d+ putadas.
Klaro, komo estamos en krisis y el pelotazo inmobiliario no da + leche, pues a subir impuestos toka.
El «socialismo» de Odón es curioso: está convirtiendo Donostia en una ciudad-balneario para viejos con pelas.
Con respecto a la noticia, así es él: un alcalde mediático que maneja muy bien la demagogia y la imagen.