Ion Gaztañaga
Hace ya casi un mes que Gara publicaba una entrevista con Itziar Aizpurua, Anjel Alkalde y Santi Kiroga en su especial 30 aniversario de Herri Batasuna, con su significativo título «Sin HB hoy no estaríamos aquí, todos admiten ya que este marco no sirve». Tan jugosa entrevista no podría más que iluminar a los siervos de los españoles («EAJ espainolen morroi») de las grandes cosas que los 30 años de la creación de HB nos han obsequiado.
La mayoría de los entrevistados confirma la frase visionaria de Jon Idigoras que decía que «el nacimiento de HB era lo mejor que le había pasado a Euskal Herria» y Santi Kiroga, a la pregunta de «HB surgió como apuesta por la ruptura democrática frente a la reforma (…) a la que se apuntaron otros como el PNV. Treinta años después, ¿creen que se acertó?» responde humildemente: «Que el tiempo te dé la razón es muy importante en política».
La historia de HB más bien parece el remake del famoso plan de Mao, que una vez purgados a los «burgueses» y partidarios del Kuomintang (nacionalistas chinos) se lanzó a un gigantesco plan económico a través de la colectivización y el trabajo en masa con el objetivo de que la producción china de acero sobrepasara la del Reino Unido en quince años. La idea era industrializar el país y aumentar la producción agrícola haciendo uso del trabajo en masa, evitando así tener que importar maquinaria pesada y minimizar la dependencia y deudas con los soviéticos. Aquél plan tomó el nombre de «Gran Salto Adelante».
Sin embargo, para disgusto de los actuales dirigentes de los ultras vascos, las autoridades locales chinas (por miedo o por lealtad) compitieron para informar de lo bien que se estaban cumpliendo las ordenes, generando informes falsos de éxito, que a su vez incrementaban los objetivos y alimentaban la espiral de la gran farsa. Y seguramente por mimetismo, los miembros de la ultraizquierda vasca compiten en demostrar los inmensos éxitos obtenidos en cada etapa de la izquierda abertzale, que alimenta nuevos objetivos inalcanzables a los que dentro de 10 años darán cuenta como otros diez años de éxito ininterrumpido.
¿No será que como el acero producido por estos hornos colectivos, que era en gran parte inservible debido a la mezcla de diferentes metales durante su elaboración, las profecías de nuestros entrevistados sean acero de muy baja consistencia?. Tendrán que estar atentos, pues cuando en 1958 comenzó un periodo de malas cosechas en el campo chino, las estadísticas procedentes de las diferentes provincias mostraban un aumento de la producción agrícola. Con base en estas estadísticas falsas, el poder central exigió grandes cantidades de productos agrícolas al campo lo que provocó una hambruna de grandes proporciones, transformando el Gran Salto Adelante en la Carrera del Cangrejo.
En estos 30 años, en el que parte del movimiento revolucionario como EE ha terminado en el españolismo jacobino, y una HB cuyo espacio electoral ha ido disminuyendo, con un desprecio cada vez mayor de una abrumadura mayoría de la ciudadanía a sus tésis no parece que pueda calificarse de éxito. Su liderazgo en Nafarroa se ha visto reducida al 5% debido a Nafarroa Bai y un Abertzaleen Batasuna en Iparralde que se negó a integrarse en Batasuna no ofrecen una estampa triunfal que digamos.
Su última gran oferta de paz es una autonomía para los 4 territorios, una posibilidad que ya existe mediante el Estatuto de Gernika, la Disposición Adicional Primera y la Transitoria Cuarta, pero que choca machaconamente con la realidad política de la Comunidad Foral. En la entrevista nos mandan otro informe triunfal diciendo que «Todo lo que estamos viviendo ahora es consecuencia de Lizarra-Garazi, como en su día era fruto de Txiberta. Entonces hubo una enorme oportunidad de hacer un frente abertzale y de avanzar. Telesforo Monzón hizo un trabajo impresionante, pero el PNV lo estropeó.». Ahhh… el PNV, ese enemigo principal, garra del imperialismo a eliminar.
Quizás sería mejor que para la siguiente propuesta «democrática» simplemente tomaran el Estatuto de Gernika, la Transitoria Cuarta y la Disposición Adicional Primera y le cambiarán el nombre por «Nuevo Marco Democrático». Y ante la pregunta de «¿Pero tántos muertos y sufrimiento para lo mismo?» añadieran un Artículo Definitivo que rezara «Queda establecido por ley que el PNV se equivocó en el 77». Y con esa felicidad del trabajo bien hecho, podrán proclamar como sus maestros que «Gato blanco o gato negro, lo importante es que cace ratones».
30 años no pasan en balde. Y es de esperar que todavía tengamos muchos años con impresionantes informes de las grandes cosechas que se han obtenido en la aplicación del Gran Salto Hacia Ninguna Parte.
+ k 1 salto hacia ninguna part, es 1 salto al vacio. Xo en 1 cosa estoy d acuerdo: Lizarra es la causa d muchas d las cosas k han ocurrido ultimamente. Y 1 cosa es cierta: los Batasunis condicionan la politica mucho + de lo k deberian. Y alg1 responsabilidad tendremos nosotros en este tinglao.
Lo que hay que reconocer a la Unidad Popular (HB, EH, SA, ANV..) durante estos 30 últimos años, triunfalismos y autobombos a parte, es la capacidad de haber tenido engaañada a la sociedad vasca respecto a su verdadero proyecto (revolución en el Estado español)y a su verdadera esencia (revolucionarios españoles); desde luego, son verdaderos maestros del engaño y el disfraz. A pesar de sus disparatadas propuestas, estoy convencido de que si se dieran las condiciones adecuadas el nacionalismo volvería a un Lizarra II, III etc…precisamente porque todavía no se ha hecho el «auto de contricción» de reconocer a este mundo como AJENO y CONTRARIO al nacionalismo vasco, a pesar de pronunciamientos puntuales sobre «ni fines ni medios».
Respecto a pérdidas de apoyo, yo no soy tan optimista como Ion Gaztañaga: es evidente que las cifras «cantan», como en el caso de Nafarroa, pero, la base social que soporta este mundo, con sus vaivenes (muchos de ellos producidos por la propia violencia del MLNV), sigue manteniéndose firme, o cuanto menos MUDA ANTE ETA. Y, cosa a tener muy en cuenta, siguen engañando/enganchando a la juventud (como muestra, solo hay que ver los lamentables sucesos de hoy en el campus de la UPV en Bizkaia, por ejemplo), lo que augura mano de obra dispuesta para otro largo ciclo de lucha.
En cuanto al desapego de la unidad popular respecto a la realidad, hay que tener en cuenta que la realidad vasca es un objeto a transformar y ¡ay de la realidad vasca como no se transforme al gusto del MLNV!