Igor Zulueta
Después de pasadas unas fiestas más bien satisfactorias y sin ningún incidente, diríamos que casi a continuación de ellas, hemos leído en los medios de comunicación la intención de crear una mesa de negociación por parte de la Diputación de Gipuzkoa. Observamos cierta actitud de prisa por parte de la corporación municipal, y no entendemos como desde la Diputación se prestan a esta maniobra de dudosa intención conciliadora.
Lejos de situarse ante una posición que vaya abriendo caminos y pasos de entendimiento, la Diputación de Gipuzkoa está entrando en una dinámica de dar oxigeno a aquellos grupos que pretenden la imposición de un Alarde único y paritario. Abotsanitz junto con Bildu de Hondarribia, están presionando acompañadas de los medios de comunicación y algunas oficinas de asuntos sociales y de igualdad para imponer una decisión que atenta contra la libertad y la voluntad del pueblo de Hondarribia.
La Diputación ha accedido a promover unas reuniones dirigidas a ello. ¿Qué pretende nuestra Diputación con esta maniobra? ¿Plegarse a la voluntad de una minoría para que imponga su criterio sin más? ¿No sería labor de la Diputación promover y facilitar la convivencia y la consecución de dos Alardes y que cada uno decida cómo, cuándo, y dónde se celebra cada uno?
Arritxu Marañon deja algunas perlas que habría que tenerlas en cuenta. Nos dice en una frase: “no es posible entender por qué el hecho de que quieran participar en las fiestas de su municipio de la manera que quieran, consideren o deseen pueda ser motivo de la ruptura de la convivencia, de agresiones, de insultos o de rechazo”. Se supone que estas palabras se dirigen a todo el pueblo de Hondarribia, tanto a los partidarios de Jaizkibel Konpainia como a los del Alarde Tradicional.
Si verdaderamente es eso lo que quiere decir, parece una actitud de equidistancia y de intentar la buscar la convivencia. En cambio, ¿Dónde está el PNV en este caso? ¿En qué posición se coloca? ¿Ya sabe en qué jardín se está metiendo? ¿Ya se ha informado correctamente de las verdaderas intenciones de Jaizkibel Konpainia? ¿Es que Jaizkibel Konpainia está decidida a respetar lo que la mayoría del pueblo de Hondarribia decida?
Los últimos artículos de Igor Zulueta así como el esclarecedor libro de Mikel Arriaga del que hemos hablado en esta misma web apuntan e indican lo contrario. No es baladí la celeridad con la que la corporación de Hondarribia, Jaizkibel Konpainia y los medios de comunicación se están poniendo de acuerdo desde hace algún tiempo en promover e incentivar estas reuniones o mesas de negociación.
Recordemos por un momento el origen de Jaizkibel Konpainia. Fue en febrero de 1996, en Anoeta, Donostia, en un mitin de Herri Batasuna, la entonces Bildu, cuando su uniforme desfiló por primera vez así como algunos de los componentes de ese colectivo. En esos tiempos el empresario Aldaya estaba secuestrado por la rama militar de la Izquierda Abertzale, ETA. No olvidemos que la penúltima capitana de Jaizkibel Konpainia era la diputada de Bildu, Oihana Etxebarrieta.
Está claro que lo único que se debería plantear en la mesa de negociación es la forma en la que cada visión del Alarde desfila sin que se molesten ambas opciones. Sin embargo, parece que no es la posición de Jaizkibel Konpainia y por ello está tratando de presionar a las instituciones, llevar a todos los participantes a la mesa de negociación con la intención de forzar un único Alarde paritario.
Si de verdad quisiéramos llegar a una posición que no fomentara enfrentamientos, la solución verdadera debería de ser que cada visión del Alarde fuera respetada de forma independiente. Si no fuese así, caeríamos en el peligro de llegar a una supuesta solución que todavía generara muchísimos más problemas que los que hemos tenido hasta ahora. La araña teja su tela y su trampa despacio, pero de forma inexorable; deberíamos tener cuidado de no caer en esta trampa que pudiera abocarnos a un enfrentamiento de peores consecuencias.
Por último, un mensaje al PNV y al PSOE. A los primeros recordarles que perdieron el ayuntamiento de Hondarribia aunque en la Diputación sacaron mayoría. Al llegar a este tipo de acuerdo, que va en contra de la voluntad de sus votantes en ese pueblo, está favoreciendo a su enemigo político, Bildu, que utiliza la “política de género” para pisotear y humillar a la mayoría de la gente de Hondarribia. Aquí el principio que se dirime es el de la libertad de opción, que Jaizkibel Konpainia y Bildu pretenden destruir. Al PSOE -a Arritxu Marañon- le diría ¿es que está en contra de la solución tal como se lleva en Irún, donde no hay ningún problema? ¿Es que va a presionar al alcalde Santano para que impida que los alardes desfilen cada uno por su lado? Rogaría a ambos partidos que no echaran gasolina a un fuego que estaría apagado si no hubiera este tipo de lamentables intervenciones.
Muy de acuerdo con el texto. Me parece a todo punto lamentable que teniendo a Bildu como máximo adversario, el PNV de Gipuzkoa convenga con esta formación políticas que perjudican al jeltzalismo, además de alentar la «política de género» que es una lacra promovida por la extrema izquierda.
El empecinamiento de Bildu de destruir la convivencia en las fiestas de un pueblo insumiso a sus mandatos tendría que ser motivo suficiente para no hacerle caso. Pero mucho me temo que nuestros políticos, a veces, derrapan con criterios impuestos por el enemigo. Una pena.
Me gustaría añadir a lo de Nestor. Lo peor de todo, dentro de un año tenemos elecciones. El PNV no puede confundirse con la línea de Genero de Yolanda Díaz. Menos con la de Maddalen Iriarte y la del próximo candidato de Bildu para Lehendakari.
Como dice el refranero español, el acuerdo de la Diputación en este tema es para el PNV «tirar piedras sobre su propio tejado». Favorecer objetivamente a su enemigo.
Kaxo lagunak:
Me viene una información para aclararme que el sentido de la iniciativa de la Diputación de Gipuzkoa no tenía que ver con ninguna decisión sobre el Alarde sino por la formación de una Mesa compuesta por los ayuntamientos a los que la Diputación les da simplemente ayuda.
Aceptando esta aclaración, y alegrándome de la atención, viendo que la corrección del artículo resulta imposible sin su supresión total, lo dejo ahí, junto con esta nota aclaratoria. En todo caso, viendo la negativa actitud del actual alcalde de Hondarribia de Abotsanitz, Igor Enparan, porque Betiko Alardea llevaba la bandera del pueblo (como si esta fuera propiedad del ayuntamiento) se puede temer lo peor.
Doy desde aquí gracias por la aclaración y, con esta, doy por modificadas las consideraciones que puedan ser injustas en el artículo.
Eskerrik asko Igor Zulueta; por el artículo, por la sinceridad y por la pertinente corrección del artículo.
Mas el mensaje, su intención fundamental, y el objetivo principal de éste queda claro:
Lo importante es la lucha contra la imposición por parte de unos pocos, contra el totalitarismo (de Jaizkibel Konpainia), contra la intolerancia del «solo lo mío y lo de los demás se pliega a mis ideales», y apoyar la resistencia contra esta corriente opresora de lo políticamente correcto.
Mila esker.
Dominar la calle es una vieja extrategia de HB y de sus sucesores, luego esto no debiera de extrañar a nadie que mire al pasado para comprender el presente. Ninguna manifestación popular debe de quedar fuera del control de un marxista.