Iñaki Anasgasti bere blogean
Ha fallecido a los 88 años Julen Madariaga, uno de los fundadores de ETA. Su abuelo republicano fue contendiente con José Antonio Agirre cuando a éste le eligieron Lehendakari los concejales en Gernika. Hubo dos candidaturas y una de ellas fue la de Ramón de Madariaga. Julen, hijo de militante de ANV no venía pues de estirpe jelkide por lo que puede ser entendible que junto a un grupo de estudiantes vascos fundara EKIN y pusiera en marcha el trasvase de jóvenes inquietos de Euzko Gaztedi hacía la nueva marca. Nada de lo que podría sentirse orgulloso.
Ante el fallecimiento, respeto, sobre todo cuando tuvo el coraje con Patxi Zabaleta de fundar Aralar y tras los asesinatos de Joseba Goikoetxea y de Gregorio Ordóñez denunciar estos crímenes cosa que la actual Sortu sigue sin hacer. Si ahora tanto le ennoblecen deberían hacer por lo menos lo que hizo él. Ya, ya.
Hoy en Gara, Iñaki Iriondo le dedica dos páginas y pone un titular que es todo un editorial al reproducir una de sus reflexiones “Estoy orgulloso de haber creado ETA”. Pues vaya.
Una de las causas que aducía para crearla en los años sesenta fue que el EAJ-PNV no hacía nada. Un día le pregunté a Juan Ajuriaguerra por esta afirmación y me contestó “Si hacer algo consistía en matar, secuestrar, extorsionar, evidentemente no hacíamos nada, pero si hacer algo era mantener la resistencia, enarbolar la legitimidad de un gobierno en el exilio, emisoras clandestinas, trabajar en el mantenimiento del euskera, pasar el testigo de una generación a otra, organizar clandestinamente los Aberri Egunas y mil cosas que se hicieron en política internacional y con la democracia cristiana la respuesta fue la que dio el pueblo en las elecciones de junio de 1977. Ganamos. Funcionó la Memoria histórica. ETA ha sido una tragedia y ha sido un gran fracaso. No sabemos cómo sería hoy la historia vasca de no haber existido ETA”.
Lo decía alguien que había estado condenado a muerte, hecho una huelga de hambrea ante el incumplimiento del pacto con los italianos, seis años de prisión, cinco detenciones y una vida de clandestinidad. Y encima que no había hecho nada.
Y la pregunta, a pesar de Iñaki Iriondo y de la dirección de Gara es sencilla ante esa obsesión cobarde que tienen de justificar esta existencia. Nunca contestarán a esta cuestión: ¿para qué sirvió ETA además para matar y extorsionar, robar la representación de una causa, enviar la peor de las imágenes al mundo?. Que nos diga ese mundo que logró ETA. Lo único que pueden argumentar es que fue un inmenso fracaso. Jóvenes muertos, torturados, rotas sus vidas por la obcecación de un grupo de iluminados dogmáticos, algunos muy generosos, que nos iban a liberar de una dictadura y de España matando gente. Franco murió en la cama y Euzkadi es una autonomía, perdón Euskal Herria, que es lo único que han cambiado por puro antisabinianismo.
Ya lo hemos visto con el décimo aniversario de Bildu.
No quieren hablar de ello y nos argumentan que Bildu cumple diez años como la gran noticia. Si tan orgullosos están de la historia de sangre, muerte y sacrificio de ETA pondrían como la fecha de nacimiento de la Izquierda Abertzale en 1960 o cuando mataron a Etxebarrieta o a Melitón Manzanas o trataron de descarrilar un tren de excombatientes. Pero no lo ponen ni lo dicen. Son más sutiles, como Iñaki Iriondo que nos colocan de manera desafiante titular que es lo que piensa él y su periódico no vaya a ser que les llamen traidores los que todavía siguen creyendo que ETA fue de verdad un Movimiento de Liberación Nacional de los vascos.
De eso nada.
Fue una tragedia y un inmenso fracaso.
“para qué sirvió ETA además para matar y extorsionar, robar la representación de una causa, enviar la peor de las imágenes al mundo?”
Exacto Iñaki, la pregunta a la que tienen que responder es esa.
Aunque algunos en su batalla del relato, tal y como van las cosas, al final terminarán diciéndonos que incluso el Athletic y la Real ganaron sus trofeos deportivos gracias a su existencia. Lo cierto es que solo ha servido para amargarnos la vida a la mayoría de los vascos.
Unos días después de la ocurrencia de la Champions, la empresa Euskaltel, cuyo presidente no ejecutivo era Xabier Iturbe, un antiguo vendedor de la telefónica vasca, militante del PNV que llegó a ser director de Kutxa, no por sus valores en la gestión sino por su afiliación, vendía sus activos a un grupo especulador. Como en una venta anterior, los miembros del consejo de administración se forraban con solo estampar una firma. Dinero del erario público vasco, recaudado a través de las diputaciones que son las que engordan al Gobierno Vasco, hacia empresas privadas. Y por la transmisión, los consejeros, entre ellos militantes del PNV, solucionan sus vidas y las de sus familias de forma legal.
La deslocalización y la entrada de fondos buitres en nuestra economía, no es algo nuevo. Euskaltel no ha sido ni la primera empresa, ni desgraciadamente será la última. La compañía de telefonía siempre ha ido un paso por delante en el desarraigo, marcando las pautas de lo que va a suceder con Kutxabank, precisamente su antiguo socio mayoritario. El eje de la cuestión es que, incluso en un escenario liberal, la posición del PNV se sitúa en la derecha de la derecha, a años luz de otras regiones y Estados europeos que intervienen para resguardar su tejido. El objetivo político es saquear lo público para engordar lo privado, donde se encuentran algunos de sus afiliados
JELen agur
El plan previsto por Julen Madariaga era el sistema de la destrucción de todo tipo de empresas, desconfianza y hartazgo de las inversiones y la incapacidad final de conseguir un mínimo de riqueza para la solidaridad social.
Mientras tanto, eso sí, los dirigentes del MLNV viviendo como crapulas a costa del esfuerzo del ciudadano vasco.
Menos mal que el PNV genera esa confianza en la inversión, promueve la iniciativa empresarial, la apuesta industrial y fomenta el bienestar común, ante la protesta desesperada de la izquierda cutre y patética, que más allá de los tópicos absurdos recurrentes que solo una minoría se cree, no aportan nada más que bulos y estupideces.
Seguimos en la apuesta. Y lo hacemos bien. Y el vasco lo valora.
Agur ETA Ohore.
Tuvo que ser muy triste para Julen Madariaga morir y antes de eso ver como aquello que había creado, ETA, se autodisolvía, su proyecto fracasaba y cientos de presos de ETA seguían en las cárceles. Es como ver que todo por lo que has trabajado no sirvió para nada.
JELen agur
Me imagino que lo mismo que pensarían Hitler o Ceacescu.
Toda una frustración.
Hoy a los que critican la falta de perfección en los planes empresariales, industriales, que ha promovido el Gobierno Vasco habría que recordarles que, más allá del debate de quién es el propietario, el bien común que han producido es evidente. La comparación entre el bien producido por la línea del Auzolan (en este apartado todavía queda mucho que profundizar, mucho que aprender, mucho que lograr) y su matxinada es claramente favorable a la primera línea.
No es fácil saber si la ideología marxista leninista fue la que les llevo a plantear la acción sin límites éticos, o fue al revés. Lo que hay que dilucidar es si la actividad que promovieron, ¿su “gintza” debe de ser considerada Auzogintza o Herrigintza?; aunque, como sucede con la burujabetza, últimamente todos se apunten a estos términos, ¿la acción que provoca la destrucción (Auzo-Kalte) puede considerarse Auzolan?
matxinada = auzo-kalte = auzo-hilketa
Estos días estoy viendo que algunos amigos y amigas caen muy fácil en la condena de la sociedad en el tema del terrorismo, no estoy de acuerdo.
Una cosa es analizar el grado de responsabilidad con la que funcionó la sociedad en relación a las víctimas y otra culpabilizarla. La Pandemia nos puede valer de ejemplo, la responsabilidad de la sociedad en la propagación del virus hay que medirla desde lo cercano; su práctica hay que evaluarla analizando la vida de las personas en casa, su actitud en los puestos de trabajo, su relación en la vida vecinal etc.; lo que no es justo es culpabilizar a la sociedad de la acción de los responsables sanitarios, de su falta de previsión, de la tardanza en las vacunas etc., son planos diferentes. Es lícito analizar como respondió la sociedad en su ámbito de responsabilidad: casa, trabajo, barrio etc., pero culpabilizarla, inconscientemente, solo sirve para que algunos aprovechen la condena social para liberarse de su culpabilidad. Las declaraciones de Arnaldo Otegi son un claro ejemplo:
«Yo sé que Felipe González es la X de los GAL y el responsable de lo que pasó, pedimos que todo el mundo reconozca lo que ha hecho, nosotros lo hemos hecho, pero no pido una persecución penal ni quiero que vaya a la cárcel»
Lo que tienen que hacer todas las X es asumir que son los culpables de la “pandemia” de la violencia que padecimos y que en adelante además de no practicarla la van a condenar.
Arni se regocija en el fango de la bajeza moral. Un cínico difícil de igualar.
No condenará, sería super contra-reboltiarra.