Jon de Irala
Resulta increíble como algunas personas acaban creyéndose las majaderías que dicen. Para ellos parece que todo vale con tal de desprestigiar al contrincante. Ahí tenemos la salida de tono de Leopoldo Barreda cuando le llamó al Lehendakari “Indiana Ibarretxe” en el parlamento antes del verano. Nuestro Lehendakari como cualquier persona a veces se equivoca, pero se le debe el máximo respeto por ostentar las responsabilidades y puesto que tiene. Hay que saber mantener las distancias de prudencia.
Bochornosos me han parecido los comentarios que ha realizado el “nuevo” vasco Pachi López. Me da mucha pena sobre todo pensando en la juventud más o menos afín al PSE y al PP entre los cuales tengo varios amigos y desde luego menos mal que se están dando cuenta de quién juega a que. Y aquí Sr. López las lentejas nos las tenemos que conseguir nosotros y a base de batallar mucho (qué vergüenza, aún 37 transferencias sin traspasar en cumplimiento riguroso de lo prometido, jurado, pactado en su día). Eso en mi pueblo es cualquier cosa pero ser un vasco serio.
Creo que aquí uno se delata y le pueda más su Nacionalismo Español que el ser vasco. Madrid NO solo no nos va a intentar no dar nada sino que intentarán quitarlo (LOAPAzo). Por ello hago un llamamiento a la sociedad vasca en general que se tomen las cosas en serio: temas como la recesión económica, las hipotecas, el paro, el mileurismo, sacar lo mejor de nuestra juventud en multitud de proyectos, todo eso Sr. López lo tenemos que hacer aquí en casa y ni ha venido ni vendrá de fuera. Ya son muchos años de mentiras y de paripé como usted dice, la gente cada vez sabe mejor quién está haciendo las cosas y menos hablar y todo ello a pesar del MLNV que ha intentado y sigue intentando destruir los logros de estos últimos 40 años que están a la vista.
Qué preocupado está Pachi que desea que nuestro Lehendakari (suyo también) nos ahorre el «bochorno» de verle a él y a los miembros de su Gobierno haciendo el paripé en Europa, donde los vascos tenemos fama de gente seria. ¿Desde cuando Sr. López le preocupa a usted lo que diga o haga el Sr. Ibarretxe? ¿Acaso desde que se le ha metido entre ceja y ceja a usted que tiene que sentarse en el trono en Lakua como sea?
Para paripé Sr. López el que usted nos brindó en el parlamente en la sesión sobre el asunto de la consulta a los ciudadanos y que nos sorprendió leyendo en Euskera. Del acento muy castizo, no se preocupe usted, eso le pasa a cualquiera, pero se le vió el plumero, lo hizo muy mal intentando vender la moto que ahora es mas vasco que los demás. Le recuerdo que el SER vasco entre otras cosas consiste en hablar poco e intentar hacer mucho y bien. El Sr. Ibarretxe se empeñó y aprendió el Euskera con bastante soltura en poco tiempo. Ello requiere capacidad mental (que imagino que usted tiene) y sobre todo querer, sentir, amar, desear, sino ni en cien años aprenderá nuestra lengua ni ninguna otra.
También comenta usted que «los vascos tenemos fama de gente seria». Esa afirmación a mi modo de ver contiene una verdad pleniparcial. A mi modo de ver deberíamos de distinguir entre dos tipos de vascos:
1) El que siento lo vasco como suyo (haya nacido o no aquí). En este caso se trata de un perfil de persona que sus valores se identifican con los principales valores positivos con los que se han identificado los vascos.
2) El que (naciendo o no aquí) no quiere saber nada no de nuestra patria, sino ni siquiera de sus valores positivos. En esta categoría una persona se siente vasco como un accidente geográfico. Suele ser el caso de personas de ideologías jacobinas cuyo nacionalismo, ramplón y avasallador (español, francés o vasco), no va unido a la asunción de los citados valores, sino de apariencias y paripés según de el viento. Cada uno es libre de hacer lo que quiera, pero pienso que cada persona tenemos que ser coherentes con nosotros mismos primero y desde luego no ir por la vida como dice usted haciendo el paripé, intentando aparentar lo que uno no siente, no vibra. Y no hace falta que se le ponga la carne de gallina de gozo cuando escuchar hablar euskera o el baile acompañado del txistu y tamboril entre otros instrumentos, sino de practicar con el ejemplo dichos valores.
Cada persona es libre de elegir pero desde luego para mí está claro que una cosa es SER vasco, definición 1) y la otra es ser vasco, definición 2).
En ocasiones, para los vascos de tipo 2 lo importante es escribir Pachi con tx como parece que a usted le gusta o acusar que los nacionalistas son excluyentes porque dicen que hay que tener RH del tipo negativo y demás simplezas. Eso es el claro ejemplo de ser un vasco de paripé y bochorno, «ser» vasco en lugar de SER.
Diario de Noticias de Gipuzkoa
Lunes, 08 de septiembre de 2008
Batasuna busca marca electoral
Los socialistas no ven claro el camino a Ajuria Enea y empiezan a preparar a la opinión pública para la posibilidad de que una marca de la izquierda abertzale se presente a las autonómicas. Ahí aparece la figura de Rafa Díez
Marije Diez de Lera, de Aukera Guztiak, y Nekane Erauskin, de EHAK, flanquean a Rafa Díez en un mitin celebrado en Gasteiz en la campaña electoral de las autonómicas de 2005.
El PSE-PSOE tiene ya abiertos todos los frentes de cara a las elecciones autonómicas de la próxima primavera. También el de la prospectiva electoral que le permite empezar a vislumbrar lo despejado o angosto que puede ser para los socialistas de la CAV el camino hacia Ajuria Enea. Las primeras señales de alarma parecen haberse encendido en las sedes socialistas y los números no parecen dar a la dupla PSE-PP la mayoría necesaria para convertir en lehendakari a Patxi López. En el mejor de los casos sólo cuadrarían si la izquierda abertzale oficial pudiera presentarse a las urnas y así impedir una mayoría del tripartito y Aralar.
Los socialistas se ponen la venda antes de la herida. Han sido los primeros en abrir la espita de las especulaciones sobre la presencia de la izquierda abertzale tradicional en las autonómicas. Fue el dirigente vasco del PSOE, Ramón Jáuregui, el que esta pasada semana aludió a un movimiento de personas alineadas sobre los principios del Acuerdo de Lizarra y partidarias de reclamar a ETA el fin de la violencia, que podría estar preparando una «expresión blanca» para la cita electoral de marzo del próximo año.
Ni siquiera los socialistas son refractarios a la tentación de gobernar a golpe de encuestas y, en base a ellas, modelar a la carta escenarios futuros. Las elucubraciones de Jáuregui no son gratuitas. lanza un globo sonda a la opinión pública española y a la vasca para prepararla ante una posible legalización de una marca heredera de HB.
La inminente ilegalización de EHAK -y de ANV- por parte del Tribunal Supremo deja una posibilidad abierta para que, quienes tienen la palanca de la ilegalización, tiren de contabilidad electoral y no vuelvan a caer en la tentación de modificar a su antojo el mapa electoral vasco ilegalizando a los herederos de Batasuna en función de sus propios intereses. El último precedente fueron las elecciones municipales de mayo de 2007 en las que el Gobierno socialista instó la ilegalización de más de 130 candidaturas locales de ANV, dando luz verde a otras tantas planchas.
Más allá de las intenciones de los socialistas, en el ruedo político vasco la comidilla de cara a las elecciones vuelve a ser la fórmula que utilizará la izquierda abertzale tradicional para concurrir a las urnas y sortear la Ley de Partidos y los tentáculos judiciales del juez Garzón. Esa fórmula pasará en todo caso por configurar una lista blanca de candidatos al Parlamento Vasco, en la línea de lo que preconizó Jáuregui. Y ahí es donde sale a la palestra la figura de Rafa Díez.
En medios cercanos a la izquierda abertzale a los que ha tenido acceso este diario, se apunta que la opción del ex secretario general de LAB suena con fuerza para liderar la candidatura. Su perfil es inmaculado. No tendría tacha alguna para superar el filtro de una impugnación por parte de la Abogacía o la Fiscalía del Estado, al no estar contaminado por haber participado en alguna lista ilegalizada.
RAFA DÍEZ Pese a que su carrera estrictamente política ha sido nula, Díez es un referente político, intelectual y popular para buena parte de la izquierda abertzale tradicional. Su pose templada, su discurso medido y alejado de la crispación, y su amplio bagaje como líder de un movimiento sindical numeroso e influyente le convierten en una referencia ineludible para las bases y en un interlocutor contrastado y aceptado por el resto de los partidos. Y, lo que es más importante, digerible para buena parte de la ciudadanía. Díez sigue activo y con ganas de contribuir e influir en el debate. Prueba de ello es el artículo publicado el pasado sábado en Gara en el que abogaba por retomar el espíritu y el acuerdo de Lizarra como inicio de un nuevo ciclo político en Euskal Herria.
Tras muchos años al frente del sindicato, el pasado verano cedió el liderazgo de LAB a Ainhoa Etxaide y ahora está libre para cualquier llamada a filas . Pero la dificultad para que su candidatura prospere estriba en la complicada situación de la izquierda abertzale histórica. Sumida en serias contradicciones acerca de la ruptura de la tregua tras el fracaso de las conversaciones de Loiola, los diferentes frentes se encuentran en pleno debate interno y en una dura pugna entre los posibilistas -que apuestan por las vías políticas- y los partidarios de mantener todos los frentes de lucha abiertos en el camino de la independencia, incluido el militar. «El debate entre los duros y los que apuestan por las vías exclusivamente políticas va a determinar la fórmula y el perfil de la candidatura que presenten», afirman las fuentes consultadas.
El debate se está produciendo entre las bases. Las palabras de Arnaldo Otegi a su salida de prisión el 30 de agosto, en las que abogaba por el «diálogo y la negociación» para resolver el problema político de fondo sin resolver en este país», lejos de cerrar las fisuras, certifican la encrucijada en la que se encuentra ese mundo de puertas hacia dentro. La ofensiva policial y judicial que está sufriendo supone un serio obstáculo para el debate y arma de argumentos al ala radical. «El quid de la cuestión es si los duros permitirán que un mirlo blanco como Díez lidere el cartel o se decantan por una lista más afín a sus tesis aunque los candidatos tengan un perfil más bajo», señalan las fuentes contactadas.
EUSKARIA En medios políticos abertzales a los que ha accedido este diario también se comenta el nombre de la Fundación Euskaria como palanca que impulsaría «un movimiento de personas cuyo fin último sería concurrir a las autonómicas y dar expresión electoral a la izquierda abertzale ilegalizada». Este colectivo se constituyó en 1986 como asociación independiente y en 2003 se transformó en fundación.
Carece de vinculación orgánica ni referencial con la izquierda abertzale oficial y aboga por combinar la construcción nacional y la social en pos de la independencia de Euskal Herria. Este año impulsó la Mesa de Maltzaga con el objetivo de acumular fuerzas abertzales para la construcción nacional, en línea con los postulados de Lizarra. En cualquier caso, fuentes conocedoras del asociacionismo del mundo de la izquierda abertzale afirman que Euskaria no es un colectivo «referencial para ese mundo».
HB surgió el 27 de abril de 1978 como una amalgama de siglas que aglutinaba a diferentes sectores de izquierda y abertzales. A la muerte de Franco numerosos partidos y grupúsculos pululaban por la escena política vasca, formando una verdadera sopa de letras. Cuatro de ellos -ESB, LAIA, HASI y ANV- unieron sus fuerzas para alumbrar un movimiento que aún pervive bajo el paraguas semántico de MLNV o izquierda abertzale oficial y sobre la que desde 2003 pende la espada de Damocles de la ilegalización.
La sopa de siglas de la izquierda abertzale oficial
HB: Coalición abertzale fundada en Altsasu en 1978 tras unirse cuatro partidos hasta su refundación en Batasuna, en junio de 2001.
Batasuna: Formación sustituta de HB que surgió tras el fracaso del Acuerdo de Lizarra y que tuvo una existencia de dos años, hasta que Garzón decidió suspender sus actividades en 2002.
EH: Euskal Herritarrok fue la plataforma creada en 1998 para las autonómicas que aglutinaba a HB, Batzarre, Zutik y otros. Logró 14 escaños en la Cámara vasca, su máximo histórico, y firmó un pacto con PNV y EA, que permitió a Ibarretxe ser lehendakari. El pacto se rompió tras la ruptura del Acuerdo de Lizarra. Fue ilegalizada en 2003.
SA: Sozialista Abertzaleak fue el grupo parlamentario de EH en las Cámaras vasca y navarra. La ilegalización de HB, EH y Batasuna por el TS trajo también su disolución.
AuB: Autodeterminaziorako Bilgunea fue una plataforma electoral creada para las elecciones municipales y forales de la CAV y Nafarroa de mayo de 2003. Fueron ilegalizadas 241 de las 249 plataformas municipales presentadas.
HZ: La izquierda abertzale se presentó a las elecciones bajo la marca Herritarren Zerrenda. La candidatura fue anulada por el Supremo.
Aukera Guztiak: Agrupación electoral nacida en 2005 para las autonómicas de abril de ese año. El Supremo anuló las listas, por lo que pidieron el voto para EHAK.
EHAK: Partido de orientación marxista que trajo la recuperación electoral de la izquierda abertzale. Logró nueve escaños y ofreció representar a Batasuna y AG.
ASB: Abertzale Sozialisten Batasuna se presentó a las municipales de 2007. Fue prohibida por el TS.
ANV: La histórica formación fue el tercer señuelo que guardaba la izquierda abertzale para las municipales de ese año. El Supremo anuló las candidaturas de 133 municipios y permitió la concurrencia de 123.
Para derrotar a Pachi, lo mejor es establecer el camino correcto. Por eso recomiendo el articulo de hoy de Erikenea:
http://erikenea.blogspot.com/2008/09/dos-amigos-dos-caminos-un-nico.html
Los amigos montañeros, las parejas que salen a pasear por el campo, a manudo discuten sobre la conveniencia o no de tomar uno u otro camino como el más indicado para llegar antes y en mejores condiciones al lugar previa y comúnmente consensuado. ¿A quién no le ha pasado?
Pero las discrepancias en un momento puntual y pasajero, difícilmente pueden concluirse con un acuerdo intermedio que contente a ambas partes. O se va por uno u otro camino, bien porque no existe el del medio, o bien porque es claramente peor.
Lo lógico y razonable suele ser, primero dejar claro que por eso no vamos a separar nuestros pasos, hemos salido a pasear juntos y juntos llegaremos. Primera conclusión acertada. La segunda suele ser que mantendremos el sentido común, es decir, nada de precipicios peligrosos ni de sendas prohibidas. El camino tiene que permitirnos llegar cómodamente a la meta. Hay gente que sale a hacer escalada, rafting y otros deportes de riesgo, pero nosotros ni somos de esos, ni estamos preparados para eso.
Y una vez que llegamos al callejón sin salida, nos decimos una sola vez, para no machacar, aquello de “ya decía yo”, “fue ¿bonito? mientras duró”, “mira que eres cabezón, pero si estaba claro”, y cosas así, nos sonreímos, y nos damos la vuelta conjuntamente, para llegar por el otro camino tranquilamente a la meta prefijada y dejamos a los del rafting y la escalada que “disfruten” ellos «a su manera».