Ander Muruzabal Nafar Herria blogean
La semana pasda, tras 2 meses, sesenta y dos días, de asueto municipal, el Ayuntamiento de Pamplona empezaba su nuevo curso político, y como no podía ser menos el problema no fue que el gobierno municipal lleve tres años sin presupuesto, es decir todos desde que Maya accediese a la Alcaldía, no que los servicios públicos municipales estén en su punto más bajo desde que Pompeyo acampase sus tropas a las orillas del Arga, no que la última inversión productiva fuese de aquellas mismas fechas, no que el patrimonio histórico de la ciudad haya encontrado asiento definitivo bajo un talud de tierra en Lezkairu o que el Gobierno de Navarra, con su presidenta a la cabeza, trate de pasarse por el forro de los caprichos la autonomía municipal a favor de una Institución privada que lleva siendo bendecida por los poderes públicos pamploneses desde que su santo fundador tuviese a bien cenar con el Caudillo y a la que no contentos con haberle regalado media Pamplona hay quienes quieren cederle la otra media, no, el problema fue como siempre; la ikurriña, una inmensa ikurriña de humo.
¿Los argumentos? Los de siempre, los que lo más cutre-caspa de nuestra sociedad viene exhibiendo desde que el tiempo es tiempo y se empedró la Estafeta; la Navarra floral diferenciada, la Ley de símbolos, como si esta hubiera sido parte integrante del Código de Hammurabi descubierta en el mismo talud de Lezkairu, en vez de una imposición a más de un tercio de la sociedad Navarra en una más que curiosa interpretación de lo que es la democracia.
Nada que nos pueda sorprender a estas alturas por parte de quienes llevan la friolera de ochenta años excluyendo sistemáticamente una buena parte de su propia sociedad en un ejercicio maniqueo de buenos y malos, de cuerdos y locos…
Tampoco nada que nos pueda sorprender en la actitud del PSN, presuntos socialistas navarros, que llevan unos cuantos lustros bailando el agua a los anteriores sin darse cuenta que eso les ha llevado de cabeza de león a poco más que grano en el culo en el Consistorio pamplonés.
Pero tengo que reconocer que algo si me ha sorprendido esta vez, tanto por la personalidad de su portavoz, viejos buenos tiempos de Euskadiko Ezkerra, pecadillos de juventud, como por la frase que utilizó para sumarse a la condena, bendita palabra que lo mismo sirve para un roto que un descosido, «la ikurriña, como todo, se puede reivindicar durante todo el año, pero no se puede reivindicar como se hizo».
Como si la política y la fiesta fuesen cosas ajenas. El Concejal Mori, como político, debería saber que la política es la organización de la Polis, de la ciudad y de la convivencia de sus ciudadanos y que en la fiesta, como máxima expresión de esa convivencia, no solo no está demás reivindicarla sino que probablemente sea el mejor momento para hacerlo.
La convivencia nunca puede estar basada en la imposición, por muy legal y mayoritaria que sea, y la democracia es tanto el gobierno de la mayoría como el respeto a la minoría y, por supuesto, a sus símbolos. Me puede gustar más o menos la forma y la estética usada para reivindicar un símbolo pero no puedo olvidar nunca que es el mío y que esta prohibido porque sus propios compañeros de partido se encargaron de desalojarlo del balcón municipal donde ondeó con toda normalidad, igual que en el de su sede, unos cuantos años.
No parece que sea un buen comienzo para un partido que reclama esa convivencia y la superación de las barreras identitarias asumir como propios los postulados de una de las identidades en conflicto, a no ser, claro esta, que sean los suyos propios y que su discurso sobre la tolerancia y la convivencia sea, como la ikurriña, otra inmensa cortina de humo…
De todas formas, el recurso a «que vienen los vascos» cada vez vende menos. La credibilidad de UPN vendiendo Navarra por un plato de lentejas se ha mostrado más clara estos últimos años. No hablemos de los socialistas navarros…
Dicho esto, la necesidad de la ikurriña en Nafarroa no me parece un tema crucial. Se puede querer no ser español, pero tampoco euskadiano, amén de que la hipotética relación entre los países vascos no creo que encaje en lo que es Euskadi ahora, ya que en todo caso Nafarroa mantendrá su status diferenciado, ya que está arraigado en la conciencia de los navarros. Con que Navarra sea libre ya se ha cumplido, después la voluntad decidirá qué tipo de relación y símbolos serán los propios de Navarra.
Es una pena que en Euskadi tengamos un movimiento que gestiona de pena, que crea fatales relaciones entre la gente, y que además para colmo de muchos males está echando siempre bengalas y provocaciones para crear mal rollo y enfrentamiento y darle armas al enemigo para que ladre y se escabulla de su propia craca. En estos momentos de desprestigio institucional de UPN ¿qué mejor regalo que esa ikurriñaza en sanfermines, para que la gente no se preocupe de lo real? La IA es la gran aliada de todo radicalismo, también del de UPN, y con este radicalismo tiene en común no querer plantear políticas que beneficien a todos los ciudadanos sino la gresca continua.
es realmente tan «radical» desplegar una ikurriña?
Los que aplauden las «ekintzas» a favor de la ikurriña en Nafarroa son los que colocan la bandera de España en los ayuntamientos de Gipuzkoa. Eso sí que es «radical».
Es verdad, es de una caradura radical.
Es muy significativo el juego que se trae el MLNV en Nafarroa…ahora nos sale en gara una entrevista a uno de los huidos de Segi y nos vende su ocultación como un herri harresia…vamos que en Navarra no tienen la fuerza suficiente para montar un txun-txun como el de Ondarroa y nos quieren vender una vespino como si fuera una Ducati, vamos.Y la isumisión a los símbolos del Estado opresor, pues en la CAV nada de nada…el descojone.
Y yo que creo que la ausencia del txun txun de las Herri harresia en Nafarroa se deben mucho más al encargado de las detenciones, en este caso la Guardia Civil, que a la cuntificación de los presuntos participantes…
Algunos comentaristas si que son aguerridos, que si muros populares, que si insumision… siendo tan feroces no se a que partido votaran.
Lo importante es que los muros populares se ponen en la CAV para crear enfrentamiento con la Ertzaintza mientras que en Nafarroa la gallardía de la izquierda radical baja puntos y además no es una publicidad que les interesa. La izquierda radical siempre en contra de lo vasco.
La policia autonoma española es «lo vasco», los que por su reglamento interno estan para defender la constitucion y las leyes españolas son «lo vasco»?. Anda majo no me tomes el pelo.
La constitución y las leyes españolas las defienden sobre todo los electos de Bildu colgando en sus ayuntas la bandera española. La ertzaintza es la policía vasca, aunque te pese y uses el vocabulario batasuno. Lo importante en la CAV enfrentamiento callejero con la Ertzaintza y el PNV, en Nafarroa frente a la Guardia Civil no hay muro popular que valga, sino tomar las de villadiego.
JELen agur
A mí no me gusta que mi bandera se utilice de manera tan espúrea. No es un juguete en manos de personas que además sé que todo lo vasco, lo auténticamente vasco, lo utilizan para agredir, para someter, para presionar. No es para lo que está hecha mi bandera.
Además, por esos sujetos en labores de revolución sozialista antivasca que lo mismo tambien enaltecen la bandera española republicana.
No sólo ofendieron a muchos navarros españolistas, sino que tambien a muchos vascos…vascos. Los que nos tomamos en serio nuestra identidad.
¡Vaya cruz nos ha tocado vivir con esta cuadrilla de farsantes!.