Aberriberri
(Nota: este artículo apareció en al periódico Diario de Noticias el día 30 de Enero y lo reproducimos aquí para su debate por petición de los lectores de Nafarroa)
Ioseba Eceolaza (miembro de Batzarre y parlamentario foral por NaBai)
No pretendo definir sino subrayar;
no quiero dibujar sino sugerir.
Animar, en su exacto sentido.
Herir pájaros soñolientos.
(Federico García Lorca)
NINGUNA guerra, ningún hecho violento tiene la honestidad de confesar que el dolor que genera, en la mayoría de las ocasiones, es más poderoso que la justicia por la que pretende luchar. Así las cosas, se suman una serie de exageraciones, deseos, realidades a capricho que permiten hacer el intento, contra los tiempos que corren, de reproducirse para seguir en la tragedia.
Estamos en guerra, el ellos y el nosotros, la literatura exagerada, son conceptos que permiten la reproducción social de ETA, de ahí que sea necesario de una vez por todas desmontar ese andamiaje conceptual y sentimental que nos hace seguir pendientes de los que se tapan los oídos a cañonazos, de los que están más acostumbrados a sus ecos que a las voces, estirando una supuesta guerra mentirosa y cruel, que asesina por pensar diferente.
Durante el franquismo y la transición, las fuerzas de izquierdas y las abertzales dieron un plus de rebeldía a ETA, tal vez cegados por el mito guerrillero, por la contestación a un régimen dictatorial que también, vaya paradoja, asesinaba desde el poder por pensar diferente. A partir de esa idea, existió y existe demasiada consideración hacia ETA y su mundo, y poco o ninguna atención hacia las víctimas que su actuar producía y produce. Y se infravaloró las consecuencias negativas de toda índole que acarrea la persistencia de ETA.
Volvíamos la cara para otro lado, teníamos enormes dificultades para mostrar nuestra solidaridad sin matices hacia la persona que había sido víctima.
Desde Batzarre hace unos cuantos años comenzamos a realizar una reflexión madura, serena y transparente sobre nuestro papel en el pasado, y nuestra mirada para el presente. Por eso nuestra autocrítica no es solamente una mirada hacia atrás, hacia un pasado que fue como fue y ya no podemos modificar. Es además, y sobre todo, una afirmación de los valores e ideas con las que ahora queremos que nos identifiquen.
La deslegitimación social de ETA, por lo tanto, es una condición, seguramente imprescindible, para la desaparición de ETA. Por eso desde las izquierdas y el vasquismo debemos reafirmar unos valores que contribuyan, como he comentado, a desmontar el andamiaje y los pluses de una organización antipluralista y, sobre todo, a trabajar contra la deshumanización de las víctimas.
La deshumanización es aquella actitud que pretende arrebatar el rostro a la víctima y sustituirlo por una toga, un tricornio o una ideología. Deshumanización es romper la lógica de la persona como ser social, frente a la barbarie que supone matar. Deshumanización es cuando los mecanismos de inhibición biológicos de la violencia se paran y se sustituyen por otras categorías. En fin, deshumanización es la construcción del otro como objeto del odio, para hacer una valoración asimétrica del dolor.
De ahí que se produzca, en ese mundo, lo que se llama una desconexión moral, por ejemplo, en la valoración de la vulneración de los derechos humanos, o cuando se impone una muerte para luchar contra la supuesta imposición del Estado español.
ETA no es una fuerza abertzale emancipatoria, ETA es un retroceso para muchas reivindicaciones, porque su entramado de intimidación sólo aportan realidades muy negativas. ETA no es la expresión del conflicto Euskadi-España, en principio porque el principal problema de la sociedad vasca y la navarra es la mala gestión de su secular pluralidad. El conflicto de ETA es contra la propia sociedad democrática.
Por eso sorprende que haya quienes den credibilidad a ciertas verdades sociales para el universo abertzale y de la izquierda radical que no se sostienen y, lo que es peor, permiten construir una literatura exagerada que agranda la identidad, falsa, de resistente. Se ha dado, y se da, la exaltación de valores y visiones duras, que son más estéticas que rigurosas, como si decir que nada ha cambiado fuera más radical que no decirlo.
Matar o intimidar a la otra parte por pensar diferente o por ser de la otra identidad es absolutamente ilegítimo. Es ilegítimo lo que hacen a sus víctimas, es ilegítimo el por qué lo hacen, y es ilegítimo para qué lo hacen. En todo caso sostenemos que la sociedad sí debe una reparación a las víctimas, cuya situación ha sido y es muy penosa porque al daño sufrido suman su invisibilidad y la insensibilidad social, sobre todo, desde la parte que está políticamente más alejada de ellas.
Es obvio que no todo vale contra ETA. Los casos de torturas y arbitrariedades minan la legitimidad y credibilidad del estado democrático de derecho, y generan un dolor, también, innecesario.
Pero en mi opinión, no cabe la ambigüedad a la hora de condenar las acciones de ETA (y esto no quiere decir amparar o justificar actuaciones contra los derechos humanos), ni cabe utilizar otra retórica en función de quién es la víctima, eso es estar anclado en los 80.
La raíz de ETA es el fanatismo, porque pretende imponer una sociedad contra la voluntad mayoritaria de ésta, porque es antipluralista, porque arremete contra los que defiende legítimamente la identidad mayoritaria en Navarra; la navarro-española.
Lo peor de ETA son las consecuencias de su persistencia, ya que prolonga una tragedia inútil, empeora su propia situación y la de su entorno, favorece a las corrientes que están por restringir libertades y derechos, crea un clima desfavorable para una buena convivencia de identidades y para el cambio político en Navarra es un problema más que evidente.
ETA debe formalizar su abandono de las armas de manera inequívoca, con certeza absoluta para sus víctimas potenciales, que han de poder vivir sin la amenaza que pende sobre ellos. Por eso me pregunto ¿para qué tener un proyecto para las tierras si no tenemos un proyecto para las personas?
Me parec muy profundo y muy interesant el articulo. Es realmente gratificante que la izquierda vasca como Batzarre, q proviene del maoismo (EMK) y del trotskismo (LKI), llegue a la conclusion de q ETA no representa a nadie, q no es producto de ningun conflicto. Q abogue por la deslegitimacion de la violencia y q admita su erronea consideracion por ETA en el pasado.
Batzarre fue el primer partido en salirse del pacto de Lizarra, mucho antes q PNV y EA y creo q esta a años luz de madurez del resto de originarios del MLNV o aledaños. La condena de Batzarre es etica y no tactica, como en el caso de la ponencia de Aralar del q se hablo en este blog. Es una condena firme y definitiva y eso es gratificante.
Creo, en este sentido, q en NaBai todavia falta un partido, llamado Aralar, q esta por hacer la reflexion q ha hecho Batzarre.
Jarrera honekin ez da harritzekoa ETAren etsairik nagusienetakoa NaBai izatea. Gogora dezagun Eceolazak aurreko urtean jaso zuen erasoa:
http://www.noticiasdenavarra.com/ediciones/2008/04/21/politica/navarra/d21nav16.1224578.php
Pamplona. Batzarre denunció ayer una agresión sufrida el sábado por la noche por el parlamentario foral Ioseba Eceolaza en un bar de la cuesta de Labrit de Pamplona. Según pudo identificar el propio Eceolaza, los agresores eran miembros «de la izquierda abertzale», que le ocasionaron «la rotura interna del labio y otras contusiones».
Según explicó Batzarre en un comunicado remitido a los medios de comunicación, hacia las 5.00 horas de la mañana, cuando Ioseba Eceolaza se encontraba en un bar de la cuesta de Labrit, «y en un momento en que se quedó solo, sin mediar palabra, fue agredido, en primer lugar, por el miembro de la izquierda abertzale Ion Auza, quien le propinó un cabezazo, y posteriormente por Alberto Pío, que le dio un puñetazo en la cara».
Fruto del ataque -que ha dado pie a una denuncia- «sufre rotura interna del labio y otras contusiones». Además, Batzarre señaló que «gracias a que se encontraba con un grupo de amigos, cesó la agresión», pero «sobra comentar las repercusiones desagradables que estos hechos provocan en quien es agredido, entre su familia y sus amistades».
Esta agresión, «la más grave sucedida hasta la fecha», ha estado precedida, según Batzarre, «de diversos insultos y agresiones verbales que vienen recibiendo las personas públicas de Batzarre por parte de miembros de la izquierda abertzale». Asimismo, la formación quiso «denunciar con el máximo rechazo y el mayor de los desprecios a los dos agresores, como matones de baja estofa, y a los dirigentes de la izquierda abertzale que actúan como mentores ideológicos de estas personas cuyo único argumento es el insulto o la agresión».
Por su parte, el líder de Aralar y cabeza de lista de NaBai, Patxi Zabaleta, expresó su «solidaridad con nuestro compañero Ioseba y la más enérgica condena y reprobación de la agresión». Asimismo, Zabaleta anunció la adhesión de NaBai al comunicado emitido por Batzarre.
Del mismo modo, el PSN quiso solidarizarse ayer con el parlamentario mostrando su rechazo «sin paliativos» a unas acciones que «sólo sirven para dejar en evidencia la cobardía de quienes las realizan».
Mi solidaridad con Ioseba Eceolaza. Mi felicitación al mismo por su artículo. Magistral.
ETA y su izquierda abertzale hace tiempo que se convirtió en el enemigo público número uno de las libertades de Euskalherria entera.
Que alguien le explique a Ibarretxe de que va el conflicto; el político y el armado-terrorista. Sigue uniendo consulta con pacificación y por ahí vamos de cabeza. ¡LAMENTABLE!
Me parece que en NaBai se han hecho reflexiones muy interesantes. Su propia pluralidad interna pone en practica un pactismo estratégico y no táctico. NaBai cree en el pacto no porque el nacionalismo-vasquismo es minoria sino porque el pactismo debe estar por encima de la relacion de fuerzas.
Su propia ponencia política define muy bien lo que consideran pactismo:
http://www.nafarroabai.org/es/nafarroabai/programa2007.pdf
«Teniendo en cuenta la rigidez y las limitaciones de la actual Constitución española, Nafarroa Bai propugna el empleo de la vía de los Derechos Históricos, reconocida en la Constitución y en la LORAFNA, para hacer posible el nuevo pacto político con el Estado. El pactismo político propugnado por Nafarroa Bai no se basa en el pactismo menor y condicionado —y esencialista— de UPN, PSN y CDN, sino en una interpretación radical-democrática de los Derechos Históricos y de la foralidad, identificada con la capacidad incondicionada de decidir de la ciudadanía navarra. Es una interpretación enraizada en una cultura histórica minoritaria pero potente y, al mismo tiempo, la más acorde con los planteamientos democráticos actuales. Lo específico y singular de esta corriente estriba en la afirmación de que el pueblo de Navarra constituye un sujeto político pleno, dotado por ello de capacidad constituyente incondicionada, y del derecho a establecer libremente su propio régimen político, debiendo ser para la misma la articulación Navarra-España el resultado de un pacto entre sujetos iguales, que parten de sus respectivas Constituciones y llegan a establecer determinadas instituciones comunes que expresarían la unidad política. Pactismo Mayor con el Estado, que pone en evidencia y desactiva la trampa del Pactismo Menor practicado por el nacionalismo español.»
Es decir una apuesta por la retrovanguardia de los derechos históricos y una decidida apuesta por la ética y la convivencia. Solo asi pueden convivir diferentes tendencias dentro de NaBai primero y por extension, en Nafarroa.
Creo que el articulo de Eceolaza es muestra de esa pluralidad respetuosa y etica. Zorionak.
Desde una visión metafísica inicial de la que inevitablemente no puedo sustraeme, me adhiero a muchos de los postulados que se vierten en este bien trenzado artículo.
Pero mucho me temo que si lo observamos desde la óptica de la diálectica marxista, las conclusiones pudieran diferir.
¿Puede un maoista/marxista hacer una crítica a ETA sin hacer hincapié en el engaño de la forma abertzale, en favor de su finalidad revolucionaria?
¿Y no será que el engaño sigue vigente, y que en lo que se discrepa es en la lucha armada de ETA?
¿Se discrepa de todas las luchas armadas o sólo la que ha implementado ETA?.
Estoy de acuerdo con que la deslegitimación social de ETA es una condición imprescindible para la desaparición de ETA, pero para ello es necesario desenmascarar ante toda la sociedad el auténtico proyecto estratégico del MLNV; su carácter esencialmente revolucionario y antisistema, así como su intención manipuladora de la cuestión nacional.
Un saludo
Totalmente de acuedo Iñaki. Comprendo que Eceolaza tiene su parte de razón desde el punto de vista de también la izquierda, pues el MLNV también parasita una idea de la izquierda, no sólo la idea nacional, y se hace pasar también por una izquierda demoocrática al estilo Oskar Lafontaine, como decía Otegi en su libro.
Me da la impresión aunque puedo estar equivocado que la línea de Antonio Dupla y la del propio Eceolaza es sencilla: ellos crítican el uso de lo político (la cuestión nacional, la social) al servicio de un cuestionamiento de lo prepolítico (los valores de la ética clásica). Es la línea de Eugenio del Río que plantea siguiendo a la izquierda democrática la cuestión de la comunidad de valores pre-políticos, como una clave de la existencia de un ordenamiento democrático.
Eceolaza condena al MLNV desde el punto de vista de la ética clásica. Y me da la impresión de que es una crítica honesta, porque al menos deja un espacio de claridad, que es el de la comunidad de valores éticos entre vascos y españoles, izquierdistas y derechistas, que es el punto de vista mínimo para constituir una sociedad mínmamente democrática.
No es una crítica suficiente pero bueno al menos es una crítica clara que toma como piedra de toque los valores fundamentales. En eso coincidimos. Luego que vea o quiera ver la cuestión del engaño con lo nacional, eso es cuestión desgraciadamente que no ve o no quiere ver cantidad de gente aunque sea la pura verdad.
Un saludo.
Un viejo conocido, decía, que cuando algún texto, afirmación o slogan procedente del mundo revolucionario «sonase bien»… había que volver a leerlo. Y así lo he hecho.
Creo que las gentes de Zutik y Batzarre, aventajan en dos cuerpos al resto de izquierda abertzale, ya que, recordemos, participaron en el proceso de Lizarra Garazi, exigiendo firmes compromisos a Batasuna en relación a las condenas de la lucha que entonces practicaba la kale borroka. Efectivamente fue una de las primeras fuerzas políticas en abandonar aquel proyecto. Y fue tras el proceso Batasuna, culminado en 2001, cuando la corriente Aralar se constituye en formación política.Detrás de los valientes posicionamientos de Batzarre.
Pero hay una cosa, que no hay que olvidar: ambas formaciones, consideran que aún constituyen IZQUIERA ABERTZALE.
Coincido con Iñaki, en que de este texto se puede compartir que para la desaparición de ETA, es condición imprescindible, la deslegitimación social de ETA. Por eso la única estrategia factible a futuro contra ella es la lucha ideológica: es decir, lo contrario que lo que practican los distintos gobiernos del Estado: policía y ley. Pero, alguna duda me queda: en ese mismo párrafo, se añade que «desde las izquierdas y el vasquismo, debemos reafirmar unos valores que contribuyan a desmontar el andamiaje y los pluses de una organización antipluralista…». Cuando hablan de antipluralismos, ¿a qué pluralidad se refieren? ¿a la existente en toda sociedad, o sólo la circunscriben a la pluralidad izquierdista y vasquista en EH y Nafarroa? Porque nada dice del nacionalsimo vasco u otros partidos españoles.
Como bien dice Jose Eceolaza, «nuestra autocrítica no es solamente una mirada atrás, hacia un pasado que fue como fue, y ya no podemos modificar. Es …una afirmación de los valores e ideas con las que que ahora queremos que nos identifiquen», pero de lo que yo no estoy seguro, es si con esos valores estos de izquierdas y vasquistas realmente SE IDENTIFICAN.
«Eta no es una fuerza abertzale emancipatoria (osea, la emancipacion del proletarado respecto de la burguesía), ETA es un retroceso para muchas reivindicaciones», osea que la lucha armada es perjudicial para la lucha revolucionaria que pratica la I.a. (aqui coincide con la crítica de Aralar). ´»ETA no es la expresión del conflicto Euskadi-España, en principio porque el principal problema de la sociedad vasca y la navarra es la mala gestión de su secular pluralidad. El conflicto de ETA es contra la propia sociedad democrática». A mi humilde entender, lo que Joseba dice es que desntro de ese conflicto (contradicción principal Estado-Nación), en el que la «diferencia» navarra no está espcíficamente contemplada en esa contradicción, porque no contempla a toda la «pluralidad de izquierdas». El conflicto de ETA es contra toda la sociedad revolucionaria.
«… ETA crea un clima desfavorable para una buena convivencia de identidades (dentro de la izquierda) y para el cambio político en Navarra es un problema má que evidente. Osea que la l.a. es perjudicial para la lucha por otras reivindicaciones ¿A qué cambio político se refiere?
Estoy con Iñaki. Aunque suene bien, y haya cosas que me gusten, hay que considerar en su justa medida y valor. Distingamos proyectos del mundo izquierdista y revolucionario del proyecto nacionalista, que por cierto, expresión que no aparece en ningún momento.
Un saludo.